La actriz Beverly D’Angelo compartió unas inusuales fotos de su intimidad junto a su exesposo, Al Pacino: “En las buenas y en las malas”

A través de su cuenta de Instagram, en donde sus seguidores le hicieron varias preguntas, Beverly D’Angelo se sinceró sobre su relación con su ex, Al Pacino, padre de sus gemelos Anton y Olivia, de 22 años.

La estrella de Vacaciones familiares, de 71 años, y Pacino, de 83, fueron pareja de 1997 a 2003 y tuvieron lo que una separación “complicada”, según ella. La actriz le preguntó a sus seguidores qué querían ver en sus cuentas de ahora en adelante, y las consultas sobre la relación que mantuvo y mantiene con su ex fueron tantas que terminó enfocándose en el tema.

Según reveló D´Angelo, antes de hablar sobre su pasado obtuvo la aprobación de los gemelos, quienes la autorizaron a publicar lo que sucedió. “Mi historia con Al empezó hace 27 años: dos artistas que se conocieron y se enamoraron. Vivimos juntos siete años, tuvimos dos hijos, rompimos, pero continuamos nuestro viaje como padres y llegamos a compartir nuestras vidas con una intimidad, honestidad y aceptación más profundas de lo que una relación ‘tradicional’ nos habría permitido (al menos a nosotros) ”, escribió como epígrafe del video en donde relata su historia.

“Siempre hemos estado unidos en el plano creativo: nuestras conversaciones sobre la actuación, la búsqueda y la necesidad de expresión, son conversaciones que empezaron en el 96 y que continúa hoy en día”, añadió. “Es definir una relación única, que abarca una gran amplitud/profundidad de experiencias y emociones, en las buenas y en las malas, una verdadera amistad”.

Aunque admitió que Instagram no era el lugar adecuado para adentrarse realmente en las “infinitas capas” de su relación íntima, esperaba que el video que la acompañaba aclarara a sus fans algunas de sus dudas. “Viví con Al durante 7 años y tenemos dos hijos. En 1996 íbamos en el mismo avión de Los Ángeles a Nueva York, él estaba sentado adelante de mí, me dijo ‘subí y sentate al lado mío’, y para cuando el avión aterrizó, lo nuestro se había encendido”, contó en el video.

“ En 1997 me miró a los ojos y me dijo: ‘Quiero que seas la madre de mis hijos’. Aunque había evitado ese papel durante toda mi vida, estaba profundamente enamorada y lo acepté al cien por ciento ”, continuó. “Hicimos nuestra primera ronda de in-vitro en el 97 y unos años más tarde, con mucho esfuerzo y los milagros de la ciencia moderna, esto sucedió”. En ese momento, compartió foto de la pareja con los mellizos, cuando eran tan solo unos bebés.

“Nuestra separación finalizó en 2004″, continuó D’Angelo. “ El poder del amor por nuestros hijos fue la base para resolver cualquier conflicto y crear una nueva historia como copadres, llevando vidas individuales por separado, pero siempre entrelazados como una familia ”.

Más allá de la relación que mantienen por sus hijos, con el tiempo el vínculo entre ellos también cambió para bien. “En cuanto a mí y Al, se trata de una amistad única y profunda entre dos artistas que perdura hasta nuestros días”, explicó. “En las buenas y en las malas, 27 años ya haciéndolo a nuestra manera. Y ahí lo tienen”, culminó.

El video publicado también incluía fotos recientes de las estrellas con los mellizos, compartiendo juntos vacaciones en la playa y algunos cumpleaños. Mientras que su hijo no está en las redes sociales, D’Angelo también invitó a sus fans a seguir a su hija Olivia y a su sobrina Courtney en Instagram.

Hace poco, D´Angelo contó cómo su separación legal con el duque italiano Lorenzo Salviati, con el que se fugó y casó a principios de la década de los ochenta, vino aparejada del inicio de su relación con el protagonista de El padrino (1972).

“Llamé a mi marido y le dije: ‘Estoy enamorada’. Él me contestó: ‘Oh, Beverly, ¿de quién se trata esta vez?’, y le conté que era un actor y que realmente lo amaba y que estábamos pensando en tener hijos y que él [refiriéndose a Al Pacino] creía que era una locura que estuviera casada”, reveló D’Angelo. En la entrevista aseguró también que con Salviati había llegado a un acuerdo de mantener una relación abierta, en la que si en algún momento sentían que se había acabado, hablarían y llegarían a un acuerdo para separarse.