Yahoo Estilo Adal Ramones y la ocasión en que un mesero salvó su carrera
POR Alejandro Feregrino-. Hasta la fecha, Otro Rollo es considerado uno de los programas más icónicos de la televisión mexicana en las últimas décadas. Aunque inició como un programa de cable en Puebla en 1995, pocos años después el late night show conducido por Adal Ramones y Yordi Rosado ya era todo un fenómeno de la televisión nacional.
¿Pero qué tiene que ver el manager de un restaurante de hamburguesas con el nacimiento de Otro Rollo? En realidad, mucho más de lo que imaginas.
En una reciente entrevista con Juanpa Zurita para su nuevo podcast titulado ‘No hagas lo fácil’, Ramones contó la anécdota de la ocasión en que presentó el proyecto de Otro Rollo a Arianna Azcárraga, la hermana del presidente de Televisa, Emilio Azcárraga Jean.
Eduardo Suárez, el director del programa, le preparó a Adal un VHS para que se lo llevara a Arianne, a quien Adal conocía desde hace tiempo. Para entonces, en Puebla ya habían tenido invitados de la talla de Alek Syntek y La Ley.
“La llevé al Chili’s, al restaurante el Chili’s, amigo, cuando ella ha conocido los mejores restaurantes de París (...) Y le dije ‘Ari, yo te cité aquí para darte este video’”.
Su respuesta fue un tanto decepcionante: “‘Adal –le dijo– tú eres creativo, tú eres escritor, eres director de escena. Perdón que te lo diga, pero siento que a cuadro no’. Pero yo sabía el producto que llevaba y le dije ‘Ari, chécalo’”.
La entrevista no había salido tan bien como Adal esperaba, aunque había conseguido su objetivo de entregar a la hermana del presidente de Televisa su cinta de Otro Rollo.
Pero las cosas se pusieron mucho peor en el momento en que Ramones quiso sacar su cartera del pantalón.
“Cuando voy a pagar y digo ¡Madres, mi cartera!
“Entonces, volteo y le pregunto a un mesero ‘güey, estoy en esa mesa, estoy con Arianna Azcárraga, que es la hija de Emilio Azcárraga. No traje la cartera y los invité a pagar’”.
Ramones tuvo que explicarle de qué trataba el show y cómo tenía todas sus esperanzas puestas en ese proyecto.
“Ok –le dijo el empleado–, yo pago la cuenta. Nada más que el día que hagas el programa, cuando hagas el programa, te espero aquí a ver si es cierto. Él paga la cuenta, llego yo a la mesa”.
Gracias a aquel mesero, la comida más importante en la vida profesional de Adal Ramones no tuvo complicaciones.
Al día siguiente por la mañana, finalmente Adal recibió la llamada de su vida.
“Adal –dijo Arianna por teléfono– vi el VHS, está poca madre, está increíble, bájate rápido a la oficina de mi hermano. Bájate con Emilio, ya te están esperando”.
Pocas semanas después, el programa ya estaba en Unicable con repetición en Canal 9. A los pocos meses se convirtió en el fenómeno nacional que todos conocemos.
Adal volvió a aquel restaurante a cumplir su promesa e incluso hizo amistad con el manager.
