Yahoo Estilo Adultos hiperactivos, el trastorno de conducta (que está diagnosticándose tarde y mal) podría estar complicándote la vida
Si lo has intentado todo pero eres un inadaptado, tienes problemas para concentrarte, estás siempre disperso y te alteras a menudo, es conveniente acudir al especialista. Recibir un diagnóstico del trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) TDH en la edad adulta puede ser la solución
La obsesión actual de la sociedad por buscar un motivo médico para casi todo y el ‘empeño’ de muchos padres y madres por llevar a sus hijos al médico tratando de buscar una explicación al nerviosismo y ritmo frenético típico de la infancia (“no vaya a ser que sea hiperactivo”) ha dado visibilidad a un problema oculto durante generaciones: el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH).
Y hay motivo para preocuparse porque se trata del problema del neurodesarrollo más frecuente en la infancia. De hecho, los pediatras de Atención Primaria han identificado un aumento significativo en el número de casos de trastornos de conducta, emocionales y psiquiátricos entre la población infantil y juvenil.
Pero, ¿qué pasa con los adultos no diagnosticados? Se estima que existe un buen número de hiperactivos adultos que desconocen su condición. Son personas con baja autoestima y temperamento irascible, que sufren cambios bruscos de humor y baja tolerancia a la frustración. Además suelen pasar por un sinfín de relaciones inestables y cambian mucho trabajo porque son impulsivos e inestables.
Los expertos de la Sociedad Española de Patología Dual (SEPD) advierten de que el TDHA está diagnosticándose tarde y mal en las redes de asistencia sanitaria, y también afirman que está demostrada una alta frecuencia de pacientes que padecen al mismo tiempo trastorno bipolar,TDAH y adicciones
Una condición infradiagnosticada
Muchos desconocen su condición debido a la escasa detección del TDAH en adultos que “proviene del desconocimiento que los propios profesionales continúan teniendo sobre la importancia, características, gravedad y tratamiento del trastorno, lo que repercute en un infradiagnóstico y, por consiguiente, en la ausencia de tratamiento o en un tratamiento inadecuado en muchos casos”.
Es lo que nos cuenta el doctor José Martínez Raga, vicepresidente de la SEPD y jefe de Sección de Psiquiatría en el Hospital Universitario Doctor Peset de Valencia. El especialista añade que “el TDAH es un trastorno heterogéneo que evoluciona con la edad y que, en la inmensa mayoría de casos, se asocia a otros trastornos psiquiátricos que hay que saber también identificar y tratar”.
Con graves consecuencias
De no ser así existe un alto riesgo de que las personas con TDAH empiecen a consumir cocaína y cannabis a edades más tempranas y de desarrollar una adicción que, por lo general, es más grave que en personas sin TDAH.
Aunque el consumo de cocaína se sitúa muy por detrás del alcohol o el cannabis en las personas con patología dual, se ha detectado que esta sustancia es más habitual en las personas con depresión y también con TDAH, cuadros clínicos que pueden ser coincidentes.
El Dr. Martínez Raga detalla que las personas con TDAH tienen, al menos, el doble de riesgo de empezar a consumir sustancias y de desarrollar un trastorno adictivo, y, por lo tanto, de desarrollar una patología dual. Además, en el caso de la cocaína se produce un efecto paradójico: a dosis bajas de consumo, la persona adicta con TDAH experimenta frecuentemente el efecto opuesto a la excitación que experimentan los consumidores sin TDAH.
No obstante, el Dr. Martínez Raga lamenta que, aunque la medicación para el TDAH es considerada esencial en las guías clínicas nacionales e internacionales para el tratamiento en niños, adolescente y adultos, “este trastorno sigue siendo considerado de forma diferente al resto de patologías psiquiátricas y es una de las muy escasas excepciones en las que la medicación no está cubierta totalmente por el Sistema Nacional de Salud”.
Por otro lado, el Dr. Joseph Biederman, responsable de Programas Clínicos y de Investigación en Psicofarmacología Pediátrica y TDAH en adultos del Massachusetts General Hospital y catedrático de Psiquiatría en la Universidad de Harvard (Estados Unidos), ha apuntado que los avances en genética son algunos de los más prometedores en el ámbito del TDAH, mientras que establecer los vínculos del TDAH con la morfología cerebral y el perfil genético, a partir de los hallazgos obtenidos por técnicas de neuroimagen, forma parte de las tareas pendientes de la especialidad.
Asociado a las adicciones comportamentales
En este sentido, se ha descubierto que los trastornos mentales (incluso los trastornos categóricos como la depresión o el TDAH, por ejemplo) comparten un componente neurobiológico de las adicciones comportamentales o rasgos patológicos de personalidad con emocionalidad negativa o impulsividad. “Estos trastornos comparten bases genéticas, circuitos y sistemas cerebrales comunes”, como se pone de manifiesto en una publicación reciente en Science”, nos explica el doctor Néstor Szerman, presidente de la Fundación Patología Dual y jefe de Servicio de Salud Mental Retiro del Hospital Universitario Gregorio Marañón de Madrid.
Tratamiento con pros y contra
En cuanto al tratamiento, el objetivo consiste en disminuir la frecuencia e intensidad de los síntomas y facilitar estrategias para su control ya que no se dispone de un tratamiento curativo en la actualidad.
Pérdida de apetito y peso, insomnio, ansiedad y tics, entre otros efectos, son algunos de los efectos adversos más comunes del tratamiento con psicofármacos, la terapia habitual en caso de TDHA.
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