Anfernee Simons se corona campeón con el peor mate ganador de la historia

El All Star Game de la NBA tuvo su Show Time en el State Farm Arena, de Atlanta y todas las miradas se quedaron con este nombre: Anfernee Simons. Aunque por los motivos equivocados. El jugador de los Portland Trail Blazers logró ganar el concurso de mates con una última maniobra que desató la polémica. El llamado "mate del beso", en el que sus labios no contactaron con el aro y, para muchos, es el peor mate ganador de la historia.

Simons se coronó con el concurso más tradicional de todos los que se celebran en el All-Star con cierta polémica. En total, su actuación estuvo compuesta de tres maniobras, aunque la última fue la más controvertida.

En la primera, el de los Blazers realizó un salto bajando la pelota desde un pequeño aro pegado en el tablero algunos centímetros más alto que el aro principal. Se llevó 46 puntos.

Para su segunda acción, con la cual se metió en la final con puntuación de 49, realizó un homenaje a Tracy McGrady, imitando un mate que este ex jugador hizo en el concurso del año 2000, con un giro de 180° mientras vestía la camiseta con su nombre.

Lo más hablado llegó en su último turno de la noche. Simons se reservó "el mate del beso". Esto es, primero le lanzó un beso al aro y después enterró el balón a una mano. Sin embargo, la ejecución fue cuestionable. El joven jugador, de 21 años, no llegó a besar el aro en ningún momento, por lo que se quedó un mate del montón, especialmente si tenemos en cuenta que le sirvió para llevarse el campeonato, derrotando en la final al rookie Obi Toppin.

Es cierto que el concurso tuvo que ser reducido por la ausencia de Zion Williamson, que se presentaba como el gran candidato. Eso sí, más allá de la discutida final, ninguno de los tres participantes restantes decepcionó. Simons se quedó con el trofeo de campeón que en el último año había sido conquistado por su actual compañero de equipo Derrick Jones Jr.

Domantas Sabonis se quedó con el concurso de habilidades

El hijo de Arvydas Sabonis, leyenda del baloncesto mundial, y jugador criado baloncestísticamente en Málaga, fue el primer jugador de los Pacers en ganar el concurso de habilidades y se tomó revancha del segundo puesto que obtuvo en la pasada edición, en la que cayó en la final ante Bam Adebayo.

El lituano llamó la atención de todo el mundo por su habilidad con el balón pese a sus 2,11 metros de altura. Aunque en la final se midió a otro pívot europeo, Nikola Vicevic, de los Orlando Magic.

Su triunfo se convirtió en una sorpresa, debido a la calidad de participantes contra los que compitió. No en vano, Chris Paul, base de Phoenix Suns, y Luka Doncic, de Dallas Mavericks, eran los máximos candidatos a quedarse con el concurso, pero la final se disputó entre dos jugadores interiores, que demostraron la versatilidad que tienen los pívots y ala-pívots en la NBA durante los últimos años.

Curry ganó los triples

Finalmente, Stephen Curry se consagró como el mejor triplista de la Liga en un concurso que tuvo máxima emoción.

El base de Golden State, que se quedó por segunda vez con el trofeo que ya había ganado en 2015, tuvo en frente a grandes lanzadores que tiene la NBA como Donovan Mitchell, de Utah Jazz; Zach LaVine, de Chicago Bulls; y a Jaylen Brown y Jayson Tatum, ambos de Boston Celtics, además de Mike Conley, que llegó a la final.

Curry arrancó encendido en primera ronda con 31 puntos sobre 40 posibles, una puntuación récord para el torneo de triples de un All Star-Game, y en la final debió medirse frente a Tatum y Conley. En la definición, el jugador de los Jazz, que ingresó al torneo como uno de los últimos invitados, le metió toda la presión a Steph y encestó 27 puntos. Sin embargo, al jugador de Golden no le tembló la muñeca y metió 28 para ganar el campeonato.

El base de Golden festejó con mucha euforia porque el último triple que encestó fue el que le dio su segunda conquista en siete participaciones. De este modo, Curry iguala a Larry Bird, Craig Hodges, Mark Price, Jeff Hornacek, Peja Stojakovic y Jason Kapono como los únicos en ganarlo en más de una ocasión. Vale destacar que Bird y Hodges se quedaron con el torneo de triples en tres oportunidades cada uno.