Amaia Romero se planta como una ganadora de 'Operación Triunfo' que vuela diferente

Por Miguel Ángel Pizarro.- Desde que ganase Operación Triunfo 2017, Amaia Romero se ha mostrado como una ganadora inusual dentro del propio talent-show. Porque a diferencia de sus compañeros en la que fue la edición revival del formato -como Aitana, Ana Guerra, Lola Índigo, Agoney o Cepeda- Amaia optó por un perfil más personal e intimista, algo que ha podido verse en su música, su rol mediático y en cómo ha gestionado su carrera tras ganar el concurso.

Y ahora repite con su nuevo reto. Porque la navarra enfrenta a su primer proyecto como actriz, La Mesías, la esperada nueva producción de los Javis, que próximamente veremos en Movistar Plus+. Y si bien no es la única de la cantera de OT que prueba suerte en la interpretación (Aitana también ha abierto esa puerta recientemente), hasta en esto, Amaia ha demostrado volar de forma distinta.

A diferencia de Aitana, que este verano completó el rodaje de La última, drama musical para Disney+ junto a su pareja en la vida real, Miguel Bernardeau, y tiene previsto pasarse a Netflix con la comedia romántica Tras la pared (remake de la cinta francesa de 2015), Amaia se atreve con una propuesta aparentemente más arriesgada en el plano creativo.

Protagonizada también por Albert Pla, Roger Casamajor, Macarena García, Lola Dueñas, Cecilia Roth y Carmen Machi, La Mesías se enfoca en hablar sobre “la superación del trauma, de la fe como herramienta para llenar el vacío y del arte como única vía de escapa del terror”, según lo que explicó Movistar Plus+ en un comunicado de prensa. Sin duda, una opción que a priori parece destilar una profundidad dramática e intimista menos comercial y más en sintonía con cómo ha ido forjando su carrera.

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Su salto es un proyecto que me recuerda a cómo ha ido perfilando su carrera como cantante indie. Ya la manera en la que fue gestando su primer álbum de estudio, Pero no pasa nada, fue distinta, viéndose en cada nuevo single que iba saliendo. Prácticamente todos los sencillos salieron antes de la publicación del disco, en septiembre de 2019, mostrándonos que Amaia seguía apostando por un estilo pop clásico con fuerte presencia de sonidos de cuerda.

Además, no podemos olvidar que pudimos ver todo el proceso de creación en el documental Una vuelta al sol en Amazon Prime Video, por el que fue candidata a un Grammy Latino. Incluso este mismo año nos ha gustado mucho su cambio al pop electrónico, frente al tono clásico de su anterior trabajo, con su segundo álbum, Cuando no sé quién soy, en el que puede verse una clara evolución en su estilo.

Su apuesta por el pop clásico y alternativo nos demostró que Amaia, a pesar de haber ganado Operación Triunfo, no iba a renunciar a un estilo que ya tenía antes de entrar en el talent-showy del que pudimos ver los primeros esbozos cuando participó con solo 13 años en El número uno. Y es por eso que no me ha extrañado que su salto como actriz venga de la mano de los Javis, creadores que siempre han demostrado que su éxito se basa en no renunciar a su particular mirada artística. Con quienes, por cierto, ya trabajó cuando hizo un cameo en Paquita Salas.

Y es que, cuatro años después de convertirse en la ganadora de OT, Amaia me ha demostrado que apostar por su propio estilo como artista independiente le ha hecho una ganadora única, que está sabiendo mantenerse en el caldero a su manera. Puede que no haya sido imagen de un restaurante de comida rápida o para una firma de lencería, pero Amaia sigue ahí, como ejemplo de artista reconocida, al participar en especiales navideños, como los de Pablo Alborán o Samantha Hudson, así como en el homenaje que Atresmedia hizo a la icónica banda Camela. De ahí, que sintamos máxima expectación por ver su faceta como actriz en La Mesías y deseando que sea el inicio de una nueva e interesante etapa artística en su carrera.

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