Amazon Prime Video se convierte en lo que juró destruir y sus suscriptores no perdonan

Este 14 de marzo Prime Video informó a sus suscriptores que a partir del 11 de abril de 2024 incluirá anuncios comerciales en los contenidos de su catálogo. Precisó que toda aquella persona que desee evitarlos tendrá que pagar un costo extra de 50 pesos. La noticia provocó enojo en los usuarios suscritos a la plataforma.

“Nuestro objetivo es tener significativamente menos anuncios que la televisión abierta”, especifica uno de los párrafos del comunicado dado a conocer por la compañía. Y he ahí gran parte de la molestia de la gente. Una de las quejas es que eligieron a esta opción de streaming porque no quieren ver publicidad y perciben injusto que los orillen a gastar de más con tal de no padecerla.

Aquellas personas con posibilidad de pagar la suscripción a una plataforma lo hacen principalmente por dos motivos: tener la oportunidad de elegir el contenido de su agrado a la hora que sea y no sufrir por spots publicitarios que corten las series o películas de su elección. El aviso de Prime Video les cayó como balde de agua helada.

“Pues vaya, si se supone que pago la suscripción para no ver anuncios”. “Mejor quiten su cochinada de Amazon Music a cambio de los anuncios”. “Cambié la TV tradicional llena de comerciales por streaming y ahora resulta que también van a poner comerciales. ¿Que no era una parte de los beneficios de tener una suscripción?”. “Siento que este tipo de cosas son un retroceso en materia de entretenimiento. Digo, ¿estamos de acuerdo con que quienes contratamos estos servicios es porque no queremos ver ni un maldito comercial?”.

A esos comentarios de molestia por la inclusión de publicidad se añaden aquellos otros que expresan inconformidad por tener que pagar el cargo extra, lo que implica pasar de $99 mensuales a $149. “Ahora vamos a tener que pagar (opcionalmente) por no tener anuncios”. “Se nos acabó lo bonito de Prime Video, ahora habrá comerciales o paquetes para que pagues por no verlos”. “Es una locura”. “Definitivamente me cambio de plataforma”.

Existen también los usuarios que evidencian su clara animadversión y rechazo a la televisión abierta por considerarla “inferior” en cuanto a calidad de programación y manera de consumo. Manifiestan una sensación de “traición” por parte de Prime Video y reprochan que la plataforma les haga sentir justo el mismo malestar que les causa sentarse a ver lo que transmiten canales abiertos.

Incluso con memes, usuarios de redes hacen mofa de la situación. No obstante, mediante el humor, critican al streaming por recurrir a las prácticas que criticó y juró erradicar en beneficio del espectador como consumidor. “Las plataformas que jurarían destruir la televisión convencional y su publicidad invasiva. Te convertiste en aquello que juraste destruir”, dice una de las publicaciones.

Recordemos que con la llegada de las plataformas de streaming a la variedad de entretenimiento para disfrutarse en casa o en el móvil, un grueso del público lo celebró debido a que se les brindaba alternativas para no saberse obligados a consumir contenidos que les desagradan, tales como: telenovelas, noticieros, programas repetidos de antaño y realities.

Asimismo, un factor relevante de desprecio hacia la televisión mexicana son los anuncios publicitarios. Este fenómeno de los comerciales igualmente se extiende hacia la experiencia de asistir a una sala cinematográfica y soportar entre 15 y 20 minutos de publicidad previo al inicio de la película. Publicidad, por cierto, que no siempre son avances de próximos estrenos. En televisión el rango de minutos a favor de la publicidad oscila entre los tres y cinco minutos dependiendo el horario, el canal y la relevancia del contenido.

Lo que sucede con Prime Video también ocurre con Netflix. La diferencia es que la plataforma de la N maneja otro discurso con sus suscriptores. Quienes pagan la suscripción mensual del plan básico, que es de $139, reciben avisos con la opción de que pueden cambiar al plan estándar con anuncios cuyo costo es de $99.

Un caso particular es el de Vix. Perteneciente a Televisa, empresa que posee derechos de transmisión de partidos de fútbol (deporte que es de los contenidos más consumidos y vistos por televisión abierta), trasladó partidos de algunos equipos a la plataforma para aumentar el número de suscriptores, quienes al contratar saben de antemano que habrá comerciales.

“Ahora estamos en lo peor: televisión de paga que es abierta pero pagando más se vuelve de paga pero hasta que la vuelvan a convertir abierta y con comerciales. Vergüenza”, reza otra de las protestas que resume el espíritu de molestia que ha causado Prime Video con su aviso.

A varios de sus suscriptores les duele la noticia porque eligieron esa plataforma debido a que posee un catálogo amplio de películas actuales, clásicas y de culto de distintas décadas, aparte de un vasto repertorio de documentales que no encuentran en otras opciones, mucho menos en la televisión abierta.

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