Analía Franchín entró a la casa de Gran Hermano y encontró un “gualicho” en la cocina

La casa de Gran Hermano (Telefe) quedó vacía. El 27 de marzo, Marcos Ginocchio se consagró campeón y fue el encargado de apagar las luces de la propiedad que fue su hogar por más de cinco meses. Pero fue el staff de A la Barbarossa (Telefe) que horas más tarde realizó el programa en vivo desde el lugar. Y al recorrerlo se llevaron diversas sorpresas, entre ellas un “gualicho”.

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Marcos, Nacho y Julieta fueron los últimos tres habitantes de la casa, que supo alojar a 20 personas. Y a la hora de irse la dejaron con algunos elementos propios de las necesidades diarias y la limpieza no fue de excelencia tras la salida de Romina, que era la encargada de organizar esa tarea.

Pero ya deshabitada, los periodistas no dudaron en actuar como detectives para recorrer sus recovecos. Entre los hallazgos que realizaron llamó la atención uno hecho por Analía Franchín, quien encontró un particular elemento en la cocina que tendría un gran tiempo dentro de la casa.

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“Esto es un gualicho. Es un vudú”, indicó la periodista ante la atenta mirada de Georgina Barbarossa, al señalar que habrían realizado una práctica de magia dentro de la casa, con la que se buscaba hacer un “trabajo negativo”. Puntualmente, se trataba de una cebolla que tiene dibujada un rostro. “Le fue bien”, aseguró la conductora luego de indicar que esto habría sido dedicado a Alfa, aunque no habría surgido nada mal en él, ya que disfruta de su presente en los medios. Lo cierto es que todo se trató de una acusación humorística de ambas, que no aguantaron la risa.

Acto seguido, procedieron a revisar la heladera. Allí encontraron restos de alimentos y una torta congelada, que causó la risa entre los presentes debido que estaba vencido.