Anthony Hopkins reniega de su trabajo en Marvel: 'No tiene sentido actuar'

Marvel no solo ha lanzado la carrera de actores y actrices prácticamente desconocidos al convertirlos en sus superhéroes y superheroínas; también ha conseguido seducir a grandes nombres de la meca del cine para que entren a formar parte de su universo con la promesa de jugosos cheques y una inyección de popularidad entre los espectadores más jóvenes, que quizá no les conozcan por sus éxitos anteriores.

Anthony Hopkins fue uno de ellos. Él mismo ha reconocido en varias ocasiones que fue la posibilidad de ponerse a las órdenes de Kenneth Branagh, encargado de dirigir la primera de las tres películas en solitario sobre el dios nórdico Thor, lo que le convenció de aceptar el papel en un momento en que se estaba planteando abandonar por completo el cine.

Desde entonces ha aparecido en dos filmes más del universo Marvel como Odín, el padre de Chris Hemsworth y Tom Hiddleton, ha seguido trabajando en la gran pantalla y ha ganado su segundo Óscar por 'El Padre'. Sin embargo, su recuerdo del proyecto que precedió a esa segunda etapa dorada en su carrera no es demasiado positivo.

Al igual que le sucede a otros intérpretes de su edad, sir Anthony Hopkins no se siente del todo cómodo trabajando frente a cromas, y las historias de Marvel se apoyan demasiado en la magia de los efectos especiales para su gusto.

"Me metieron en una armadura, me pusieron una barba. Siéntate en el trono, grita un poco. Si estás sentado delante de una pantalla verde, no tiene sentido actuar", ha asegurado en un nuevo perfil del New Yorker sobre el impacto brutal que Marvel ha tenido en la industria cinematográfica.