Aprovecha el verano para desayunar más tarde y perder peso

Días más largos, jornadas de trabajo intensivas... y muchos más planes de tarde que se alargan hasta bien entrada la noche. En verano, es habitual relajar los horarios, con lo cual se complican los buenos propósitos alimenticios. Y es que, según la mayoría de profesionales, lo más saludable es cenar pronto, antes de que se ponga el sol. ¿El lado bueno? Además de que merece la pena disfrutar de esos planes vespertinos, existe un sencillo truco con el que mantendrás tu peso e incluso podrás adelgazar aunque hayas cenado muy tarde: solo con retrasar tu desayuno la mañana siguiente, reajustarás tu organismo.

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- ¿Cuánto tiempo tengo que ayunar si quiero perder peso?

Así lo ha contado en una entrevista Tim Spector, epidermiólogo británico y autor de reconocidos libros como El mito de las dietas Food for Life: The New Science of Eating Well (todavía sin traducción al español). Este experto en alimentación y salud afirma que retrasar el desayuno hasta las 11 es más adecuado para la mayoría de la población y puede ayudarles a mantener un peso adecuado. La razón es que, ahora, cenamos más tarde que las generaciones precedentes, y la explicación de los beneficios estaría en que, al separarlo más de la cena, se genera un periodo de ayuno con efectos similares a los del famoso ayuno intermitente: adelgaza, quema grasa, reduce los niveles de la hormona ghrelina (relacionada con el apetito)...

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¿De verdad adelgaza el ayuno intermitente?

Desde hace unos tres años, cuando celebrities como Elsa Pataky, Gwyneth Paltrow o Reese Witherspoon revelaron seguir este tipo de alimentación, el ayuno intermitente es temporada tras temporada la dieta más buscada. Aunque esas mujeres, y otras tantas más, afirmaron sentirse mucho mejor desde que comenzaran a practicar los periodos de ayuno (generalmente de entre 12 y 18 horas al día) e incluso haber perdido peso, lo cierto es que los estudios científicos no consiguen probar tantos beneficios como se les supone. Lo que sí han demostrado algunas investigaciones es que, si se mantiene el ayuno intermitente durante unas semanas, se adelgaza porque se reduce de forma sistemática la cantidad de calorías ingeridas (se comen 500 kcal menos al día). Pero también se sabe que mantener esas ventanas de alimentación y ayuno resulta bastante complicado a largo plazo, aunque con el consejo de Spector, retrasar el desayuno en vez de adelantar la cena, quizá sí sea más fácil.