Archie celebra su quinto cumpleaños en California y sin felicitación por parte de la familia real británica

Este lunes la familia de los duques de Sussex está de celebración porque Archie, su hijo mayor, cumple cinco años. Por el momento Harry y Meghan no han hecho público ningún comunicado ni fotografía para conmemorar la ocasión, y lo más probable es que pasen la jornada en la intimidad de su hogar en Montecito.

Aunque nació en Londres, Archie no ha celebrado ninguno de sus cumpleaños en Inglaterra porque sus padres renunciaron a su rol institucional en 2020. Eso explica por qué no habrá una felicitación oficial para el pequeño por parte del palacio de Buckingham, al contrario de lo que sucede con sus primos Jorge, Carlota y Luis.

La política actual de la casa real pasa por mencionar únicamente las efemérides relacionadas con los miembros en activo de la familia, es decir, los príncipes de Gales, y por defecto sus tres hijos, la princesa Ana, y el príncipe Eduardo y su esposa la duquesa de Edimburgo. Las cuentas oficiales del palacio de Kensington, Buckingham o de la familia real tampoco suelen mencionar los cumpleaños de las princesas Eugenia y Beatriz, hijas del príncipe Andrés, o de los hijos y nietos de la princesa Ana.

Archie pasó sus seis primeros meses de su vida en Frogmore Cottage, la casa en los terrenos del castillo de Windsor donde el príncipe Harry y su flamante esposa se instalaron tras su boda. Tras una breve estancia de seis semanas en la isla de Vancouver para reflexionar acerca de su futuro, el matrimonio inició el proceso para desvincularse de la monarquía y se estableció definitivamente en California.

Desde entonces Archie ha crecido alejado de las cámaras que le fotografiaron en su primer posado a los pocos días de nacer o durante la visita oficial a Sudáfrica que los duques de Sussex realizaron cuando tenía cinco meses. Sin embargo, ha aparecido de refilón en la entrevista que sus padres concedieron a Oprah Winfrey o en la serie documental que grabaron para Netflix, jugando con la sobrina de su madre o celebrando el primer cumpleaños de su hermana Lilibet.

En cuestión de unos meses el niño afrontará un nuevo cambio muy importante empezando el colegio, aunque el inicio de su etapa escolar será un asunto privado, sin anuncios sobre el centro escolar elegido por sus padres ni posados a la puerta el primer día de clase.