Armando Hernández vivió en la calle antes de actuar en "Amarte duele"

CIUDAD DE MÉXICO, junio 6 (EL UNIVERSAL).- A lo largo de su trayectoria, Armando Hernández ha interpretado varios personajes entrañables; uno de los más recordados es el de Genaro, el amigo de Ulises en "Amarte duele" y, aunque este personaje le trajo fama generalizada, momentos antes de entrar al proyecto el actor vivió en la calle, luego de abandonar la casa familiar para demostrarle a su padre que tenía la suficiente capacidad para independizarse.

En entrevista con el "Burro" Van Rankin, el actor de 41 años recuerda que se fue de su casa a muy temprana edad. En esa época, Armando seguía estudiando y no estaba muy seguro a qué se iba a dedicar, sin embargo, los roces con su padre fueron los que lo impulsaron a tomar algunas de sus pertenencias para no volver, pese a que no tenía ningún lugar a dónde ir.

"Me fui, me salí y me tocó vivir unos días en la calle, tal cual, tuve una discusión con mi papá y me ganó el orgullo, me decía: '-Cuando te mantengas, haces lo que quieras, aquí no es hotel', y ya sabes, todas esas cosas que todos los papás nos dicen y me salí y, la verdad, no es fácil, aunque nunca volví porque me ganó el maldito orgullo", confió.

Hernández vivió en situación de calle alrededor de tres semanas; para comer, el actor intercambió la bicicleta y un peluche que se llevó de casa por dinero.

Según sus recuerdos, con el poco dinero del que se hizo, el actor de "40 y 20", compraba un refresco y unas donas Bimbo para matar el hambre, pues era lo único que probaba durante todo el día.

"Me acuerdo mucho que comía donas con refresco, porque era barato y te llenaba la panza, es una mala receta, pero la panza se te infla, engañar la tripa, como decimos", señaló.

Luego de días de estar vagando, su hermana mayor lo contactó y le propuso que se mudara con ella y su pareja, petición a la que él accedió. Con los meses -aclaró- se reconcilió con su papá, y aunque esté le abrió de nuevo las puertas de su casa, él ya no volvió.

"Me acuerdo mucho que mi papá me decía que regresara a mi casa cuando quisiera y, al día de hoy, me lo dice", reveló.

Para esa época el actor cursó un taller de teatro en la escuela, donde conoció a un productor que cazaba talentos y le contó que estaban buscando jóvenes para aparecer en un comercial, el cual sería dirigido por nada más y nada menos que Alejandro González Iñárritu.

Su rostro apareció dos segundos en pantalla, pero esto despertó en él su deseo de dedicarse a la actuación, aunque las oportunidades no se le dieron fáciles, ya que luego de aparecer en su primer película "De la calle", tuvo que pasar año y medio para que Fernando Sariñana lo invitara a participar en "Amarte duele".

De hecho, Armando se encontraba con Luis Fernando Peña, que da vida a Ulises en la cinta, pues ambos salieron en "De la calle" y, a raíz de eso, se convirtieron en grandes amigos.

"Él y yo éramos uña y mugre, andábamos de aquí pa'llá", destacó.

Hernández acompañó al actor al casting para la película de Sariñana que, al verlo, le ofreció un papel dentro de la misma. "Salí de ahí con un guion, yo no lo podía creer, no había tenido un casting en año y medio, entonces me fui a mi casa, lo leí, me emocioné, para mi buena suerte me toca con Luis Fernando Peña y nos quedamos los dos", precisó.