Austin Butler sortea las preguntas de su ex Vanessa Hudgens en la alfombra 'champán' de los Óscar

Vanessa Hudgens y Austin Butler durante su relación credit:Bang Showbiz
Vanessa Hudgens y Austin Butler durante su relación credit:Bang Showbiz

Aunque no se llevó el Óscar al mejor actor protagonista, que fue a parar a Brendan Fraser por su aclamado papel en 'La Ballena', el actor Austin Butler se erigió desde el minuto uno en uno de los protagonistas de la gala de ayer domingo. El intérprete, de 31 años, acaparó todas las miradas gracias a su elegante esmoquin, su innegable atractivo y un peinado extremadamente cuidado que, en opinión de algunos comentaristas, mereció su propio galardón.

El guapo californiano es plenamente consciente de las pasiones que levanta y del tirón mediático que tiene su figura, especialmente cuando se ahonda en el plano sentimental. Quizá por ello, Butler hizo todo lo posible para que su presencia en la alfombra roja, o mejor dicho color champán, girara únicamente en torno a su buen hacer profesional en el popular biopic sobre Elvis Presley. Tanto es así, que el artista decidió no posar ante los fotógrafos junto a su actual pareja, la modelo Kaia Gerber, hija de Cindy Crawford, y hacerlo en su lugar con su mánager, James Farrell.

"Hoy vengo con mi mejor amigo, que también es mi agente. Le debo toda mi carrera, así que le traigo a modo de agradecimiento. Quería que estuviera a mi lado esta noche", explicó en conversación con Ashley Graham, la encargada de cubrir el paso de las estrellas hacia el interior del Dolby Theater para la cadena ABC. "Es un sueño hecho realidad", expresó con entusiasmo sobre las sensaciones que le embargaban con su primera candidatura a la estatuilla dorada.

Curiosamente, otra de las reporteras situadas en la entrada del auditorio era Vanessa Hudgens, protagonista de la afamada saga de películas de Disney 'High School Musical' y exnovia del nominado. A muchos tuiteros les ha llamado poderosamente la atención que Butler no se acercara a charlar con ella, teniendo en cuenta que la intérprete ya había hablado con el director de 'Elvis', Baz Luhrmann, así como con otros profesionales de la cinta. Pese a que ciertos internautas han descrito el gesto como un "desplante" por parte del actor, lo cierto es que ambos habrían decidido evitar, de mutuo acuerdo, cualquier interacción en público para no desviar la atención de los temas puramente cinematográficos.