La Banda del Golden Rocket: un auto con problemas, un elenco que hacía delirar al público y un romance que nació entre bambalinas
El comienzo de la década del noventa marcó la privatización de los canales 11 y 13, que quedaron en manos del grupo Atlántida y Clarín, respectivamente. Ese fue el puntapié para la competencia que se da hasta el día de hoy entre Telefe y eltrece. En ese tiempo, una de las armas más poderosas que existían a la hora de seducir a la audiencia eran las ficciones: tiras y unitarios varios eran parte de la grilla de programación de estas dos señales líderes.
El martes 17 de septiembre de 1991, la exitosa dupla de autores Jorge Maestro y Sergio Vainmann estrenó una ficción para el prime time del flamante canal trece para atraer al público adolescente llamada La Banda del Golden Rocket. Tres primos interpretados por Adrián Suar, Diego Torres y Fabián Vena, que luego de pasar varios veranos en la casa de su familia en Villa Gesell se habían distanciado, pero todo cambió cuando el abuelo de los chicos muere y les deja como herencia un excéntrico auto amarillo.
“La Banda arrancó mientras junto a Jorge Maestro estábamos escribiendo en el canal otro unitario que se llamaba Estado Civil. La idea nació por un auto que vimos, que finalmente no fue el que salió al aire, el Káiser Carabela, y pensamos en una historia que plasmara la continuidad familiar de un rodado. Pensada para un público joven, nos empezamos a delirar con el vehículo y allí aparece la idea de los primos con la misión de sanear a una familia dividida ”, recordó su autor, Sergio Vainmann en diálogo con LA NACION.
Pero estos tres primos no estaban solos, había novias, amigos, más familiares y vecinos. El elenco estaba compuesto por Araceli González, Gloria Carrá, Marisa Mondino, Carolina Fal, Germán Palacios, Eleonora Wexler y Fernán Mirás, la mayoría comenzando sus carreras. Pero en el reparto también había figuras consagradas, como Hugo Arana, Nelly Beltrán y Jorge Sassi.
“Desde un principio Diego Torres y Fabián Vena estaban pensados para sus papeles, el tercer primo iba a ser Leonardo Sbaraglia pero no pudo por otros compromisos y así fue que entró Adrián Suar. El cuarto primo, que interpretó Germán Palacios, se llamaba Pablo y en realidad ese nombre fue puesto por un chiste interno del programa. Siempre fuimos con Jorge Maestro, muy amigos de Carlín Calvo que competía con nosotros en Telefe, y le pusimos así porque decíamos que le queríamos robar a Pablo Rago”, revelo Vainmann.
La Banda del Golden Rocket competía mano a mano con uno de los éxitos más grandes que tuvo la televisión argentina, Amigos son los amigos; sin embargo, cada cual tenía su púbico. Pero como suele suceder en este tipo de historias para adolescentes, lo que importa es el amor. Y allí, entre bambalinas, nació la relación en la vida real de Adrián Suar con Araceli González que también eran pareja en la ficción.
“ Nosotros queríamos que estuviera Araceli desde un principio, pero en el canal tenían resistencias para su incorporación. Por prejuicio quizás, pensaban que como era modelo no iba a poder llevar adelante un personaje, pero nosotros apostamos fuerte a ella ”, contó Vainmann.
Lo que poca gente sabe es que originalmente el unitario se iba a llamar La Banda de los Conejos porque la familia llevaba ese apellido en la ficción. Pero un día, Hugo Di Guglielmo, gerente del canal en aquel entonces, recordó que de joven había tenido un Golden Rocket y le pidió a los autores modificar el título, a cambio de dejar a Araceli dentro del elenco.
Suar interpretaba a Adrián, los tres protagonistas llevaban sus nombres reales en la ficción, un joven de bajo perfil que estaba muy enamorado y por casarse con su novia, Carolina Fal, hasta que conoce a Pato, el personaje de Araceli González que trabajaba en un Pumper Nic y el flechazo fue instantáneo. Fabián Vena era la pareja de Gloria Carrá y Diego Torres, sin relación formal, dedicaba su vida a la música.
“ Nosotros sabíamos como autores que Suar estaba muerto por Araceli, pero la historia de amor de Adrián y Pato estaba planteada desde mucho antes. En el medio de esto, explota el romance y ese noviazgo potenció mucho a la trama ”, contó Sergio Vainmann.
El gran secreto de la tira es que el Oldsmobile Golden Rocket nunca funcionó. Para cada escena había que remolcar o mover el auto porque nunca llegaron los repuestos desde los Estados Unidos para hacerlo arrancar. Muchos se preguntan qué paso con este emblema de la historia. Años después, por pedido de Julián Weich, el famoso vehículo amarillo fue subastado a beneficio de Unicef, en uno de los especiales que siempre realizó eltrece de Un sol para los chicos.
Este año se cumplieron treinta y un años desde que se emitió el último capítulo de la tercera temporada. La Banda del Golden Rocket simboliza un tiempo de la tele que ya no existe, donde toda la familia se sentaba a las nueve de la noche frente al televisor a vivir las fantasías y locuras de tres adolescentes que marcaron una época. Cada vez que suena la cortina del programa interpretada por Alejandro Lerner es inevitable no transportarse hacia los años noventa y añorar un viajecito en aquel descapotable amarillo.