Shuvi-Luna: La magia del color y la elegancia
Cuando ves los bolsos de Shuvi — Luna te enamoras. Tu sentido del gusto comienza a saborearse esos diseños hechos en piel que parecen deliciosos caramelos de colores con incrustaciones de ensueño.
Los cinturones y los accesorios son más obras maestras de las diversas colecciones que se exhiben como piezas de museo en una boutique de la calle Monte Everest en la colonia Lomas de Chapultepec, ubicada en la Ciudad de México.
La responsable de estas diversas creaciones que comenzaron a surgir hace 10 años y que hoy día, además de México, tienen presencia en Nueva York, Alemania y Japón, es Shula Atri, una joven de 39 años a la que su pasión por la moda y el diseño la llevaron a arriesgarse a convertir el sueño de ser diseñadora de bolsos en toda una carrera que le ha dado grandes satisfacciones, como presentar sus creaciones en las mismísimas pasarelas de la principal capital de la moda: París, donde los accesorios que oferta han sido muy aplaudidos.
"Lo que me gusta de mis creaciones es que además de que no boceteo, sino que comienzo a crear a partir de una pieza que me imagino, es que todos los bolsos y cinturones están hechos de pieles mexicanas. No usamos textiles, ni sintéticos y tampoco pieles exóticas. Otro aspecto importante es que cada bolso es distinto", detalla la diseñadora, quien orgullosa comienza a contar sus inicios.
Y es que Shula no es una diseñadora convencional. Su pasión por la moda comenzó desde pequeña, gracias a su madre, quien se dedicaba a diseñar herrajes y accesorios para bodas.
"Ahí fue donde comenzó mi pasión. Más adelante, comencé a diseñar, a especializarme. No estudié una carrera de diseño, sino que sola fui aprendiendo", dice la creativa, quien comenzó su negocio con piezas personalizadas que firmaba con sus iniciales.
Empezó a diseñar cinturones y bolsos como me los pedía la gente. De acuerdo a su personalidad, estilo de vida y necesidades. La noticia de que había una diseñadora tan entregada a su trabajo comenzó a regarse como la pólvora y en poco tiempo la chica comenzaba a idear el nombre de su marca, la que hoy se conoce como Shuvi-Luna.
"Es la fusión de las iniciales de mi nombre con el de mis tres hijas: Shula, Victoria, Lucy y Naomi, damos el nombre a esta firma de la que nos sentimos orgullosas", relata la simpática Shula.
Cuanbdo ella habla, la emoción y el amor por su trabajo puede percibirse. ¿Y cómo no? Si sus bolsos y accesorios, todos llenos de originalidad y colores ya se exhiben en tiendas de la talla del Palacio de Hierro y en un showroom en Nueva York, uno de sus países favoritos para inspirarse en sus diseños.
"Me gusta pasear por las calles de Manhattan y ver a la gente que pasa, cómo se viste, qué le gusta. De ahí me inspiro mucho. Igual en México. Y es que ves cosas increíbles. Nuestra cultura es impresionante. Es un honor que en el extranjero reconozcan mis piezas", explica.
Como ejemplo platica de una colección llamada "Piel de Oaxaca", la cual hace un tiempo fue todo un éxito en Alemania.
Hoy día, la joven diseñadora, quien siempre es apoyada por su esposo y sus hijas, prepara ya la colección Primavera-Verano 2013. La apuesta son los colores metálicos y tornasoles. Todo lo preparan en su taller, ubicado en León Guanajuato, en México, donde día a día surgen ideas y se materializan sueños.
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