Alimentos sólidos, ¿cuándo incorporarlos?

Texto: Natalia Iscaro

Si tienes un bebé, probablemente su nutrición sea una gran preocupación para ti. En este sentido, la incorporación de sólidos en su alimentación será un gran paso para ambos. Porque cuando comience a ingerir, paso a paso, alimentos de adultos debidamente procesados o cortados, implicará que va haciéndose más grande e independiente, y que tú puedes comenzar a tener un poco más de libertad.

Si tienes un bebé, probablemente su nutrición sea una gran preocupación para ti. / Foto: Thinkstock
Si tienes un bebé, probablemente su nutrición sea una gran preocupación para ti. / Foto: Thinkstock

En esta ocasión, como tantas otras, todos tendrán una opinión y un consejo para darte. Es importante que sepas que la ciencia va evolucionando, y que las indicaciones de otros tiempos hoy ya no aplican. Por eso, debes respetar los plazos recomendados por tu pediatra, o al menos debatirlos con él, antes que atender a cualquier otra fuente de información.

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En primer lugar, los estudios más relevantes acuerdan sobre la importancia de dar el pecho hasta, al menos, los 6 meses de edad de tu bebé. En caso contrario, puedes utilizar la leche de fórmula que te recomiende tu médico. Él también te indicará cuándo tu bebé deba comenzar a incorporar sólidos, probablemente en torno a los 4 y 6 meses de edad. Recientes estudios han demostrado que algunos padres y pediatras o enfermeras recomiendan la incorporación de alimentos antes de tiempo. Sin embargo, esto tiene sus riesgos. Aquí los repasamos.

Antes de tiempo

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos, encuestaron a 1334 madres, que llenaron cuestionarios mensuales sobre la alimentación de sus hijos. Más del 93% de esas madres afirmó haber introducido sólidos en su dieta antes de los 6 meses de edad, el 40% lo hizo antes de los 4 meses y un 9% antes de que tuvieran 1 mes. Cuando se les consultó por los motivos de darle sólidos, las madres respondieron que:

- “Mi bebé ya tiene la edad para comer sólidos”

- “Siempre parecía tener hambre o querer mi comida”

- “Quería darle algo más que la leche materna o de fórmula”

- “Va a ayudar a que duerma más de noche” (algo que los especialistas reconocen como un mito)

- “Mi médico me lo indicó” (en este caso, la afirmación no puede ser comprobada)

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La investigación, que fue publicada por el Diario Pediatría de la AAP (Asociación Americana de Pediatría), agregó que aquellas madres que pudieron dar de mamar a sus niños hasta los 6 meses de edad, fueron menos proclives a darles sólidos antes de tiempo que aquellas que los alimentaron con leche de fórmula.

Los riesgos

Introducir sólidos antes de tiempo implica que el bebé tendrá menos leche materna o de fórmula a lo largo de su niñez, y ambas son responsables de protegerlo contra infecciones y asegurar que cuenten con todos los nutrientes que necesita, y en las proporciones adecuadas, detalla la AAP.

Sumado a esto, si el pequeño no está capacitado para tragar, puede llegar a ahogarse. Por otro lado, los especialistas de la AAP agregan que la inclusión de sólidos en la dieta de los bebés antes de tiempo puede resultar en obesidad, así como el desarrollo de enfermedades crónicas como la diabetes.

De acuerdo a la especialista que dirigió la encuesta, la Dra. Alice Kuo, es importante que los médicos adapten las indicaciones hechas a cada niño y cada padre en particular. “La decisión de incorporar sólidos en la dieta del bebé debería tener sentido para el bebé y para la madre, que seguramente ya ha vuelto a trabajar”, explicó.

¿Está listo para sólidos?

La mayoría de los niños están listos para ingerir sólidos, como un complemento de la leche materna o la de fórmula, entre los 4 y 6 meses. Según la AAP, algunos puntos que pueden indicar que tu bebé está listo para incorporar sólidos son:

- Demuestra interés por lo que comen los adultos del hogar

- Abre la boca cuando le ofreces una cuchara

- Puede sentarse y mantener su cabeza derecha

- Tiene la coordinación necesaria para mover el sólido de la boca hacia el estómago para trabarlo (algunos niños escupen todo el alimento que se les ofrece, algo que indica que no están listos para realizar este movimiento)

- Pesa alrededor de 6 kilogramos (13 libras) o más

En caso de que comiences a notar estas señales, es importante que lo consultes con tu pediatra, él será el encargado de definir si ya es hora para dar este paso. En todo caso, si respondiste afirmativo a los puntos antes señalados, es probable que ya puedas comenzar a complementar su dieta líquida con algunos sólidos. Según la AAP, durante al menos 12 meses desde este momento, su alimentación aún deberá complementarse con la leche, que continuará aportándole los nutrientes que necesita para su desarrollo.

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Recuerda que antes de realizar cambios en la dieta de tu bebé, debes consultar a un profesional de la salud.

Fuentes: Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (www.cdc.gov). Academia Americana de Pediatría (www.aap.org). Pediatría, Diario de la Academia Americana de Pediatría (www.pediatrics.org). Clínica Mayo (www.mayoclinic.com).