En busca del vestido perfecto, Raf Simons para Dior
Pasaron varios meses después de la intempestiva salida de John Galliano de Dior para que el consorcio se decidiera por algún reemplazo. Se barajearon prácticamente todos los grandes nombres de la moda, al final el gran ganador fue Raf Simons. Este joven diseñador anteriormente había trabajado para Jil Sander caracterizándose por sus colecciones estructuradas, mucho color y un excelente uso de las texturas y telas, algo que no faltó en su primer desfile para la marca.
Dior es una de las últimas casas de alta costura parisinas. Es un ícono de la ciudad y del orgullo francés y, si bien, Simons no era la opción obvia, después de mirar su primera colección para la casa muchos creen que sí fue la correcta.
Simons mostró la clásica silueta Dior, haciendo énfasis en la perfección de la alta costura, cada una de las telas utilizadas fueron confeccionadas a mano como marca la regla. Si bien en apariencia muchas piezas lucen simples, la atención al detalle es impresionante, además de que se logró un gran homenaje a la historia de esta casa.
En realidad no ha sido fácil mantener vivas estas colecciones de alta costura donde todo tiene que ser fabricado a mano y la perfección de la factura es deber, generando precios exorbitantes. La casa Dior incluso tuvo sus momentos oscuros como cuando el empresario Bernard Arnault adquirió la marca pagando tan solo un franco por ella en 1984. Pero eso no ha impedido que se siga en la búsqueda del vestido perfecto.
A pesar de todo, a lo largo de su historia encontramos que han definido un concepto de lo clásico, sus prendas clave han sido los vestidos y abrigos que acentúan la silueta femenina logrando una pequeña cintura, apoyándose en crinolinas o prendas péplum. Aquí vemos a la ex primera dama Carla Bruni en un desfile de Dior en 1995 con una prenda icónica, el abrigo rojo.
Fue en 1947 que se lanzó la primera colección donde Dior mostró su "New Look" un estilo completamente exuberante que, contrario a lo que se venía usando durante la guerra, era excesivo, pomposo y desperdiciaba tela fina con capas y capas. La idea era romper con los racionamientos de la guerra y volver a la cultura de celebración por la vida. Galliano, hoy prácticamente un innombrable, trabajó durante años con esa idea, logrando algunas de las colecciones más aplaudidas de la historia por su exageración y teatralidad sin fronteras, aquí un claro ejemplo:
En 50 años de existencia la casa ha pasado por varios diseñadores, entre ellos el adorado Yves Saint Laurent, con cuyos diseños Sanders probablemente más se relaciona. Sanders como Saint Laurent optaron por favorecer un patronaje perfecto, y a la vez práctico y cómodo que es mucho más adecuado para la mujer moderna. De ahí los vestidos largos con bolsas y pantalones de la actual colección presentada el 2 de julio pasado.
Si bien Sanders miró hacia atrás para hacer esta colección también tuvo algunos otros guiños al futuro como los vestidos tipo tie-dye.
Y a ti ¿qué te pareció la colección? ¿Qué tanto éxito le auguras a este diseñador?
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