La oficina en casa
Ya sea porque trabajas desde tu casa, porque necesitas un espacio para tener organizados los papeles de tu familia o para que tus niños hagan sus tareas escolares, la oficina en el hogar se ha convertido en un espacio común hoy en día y la tendencia de tener este tipo de ambientes dentro del hogar sigue estando en vigencia.
Con los cambios en la tecnología en los últimos años, el espacio designado para los electrónicos y/o computadores es cada vez menor. Si los comparas con los de años anteriores, este tipo de aparatos son cada vez más pequeños y con mejor diseño, lo que hace que la oficina luzca, no sólo más bonita y serena a la vista, sino que además te permite mantener coherencia con el estilo decorativo del resto de tu hogar.
Hay quienes pueden asignar un cuarto completo para usar como oficina dentro del hogar y hay quienes sólo cuentan con un espacio dentro de otro ambiente, cómo puede ser la cocina, la sala, el comedor o el dormitorio (aunque este es el ambiente menos recomendable, según el Feng Shui). Sin importar cuál sea el caso, lo principal al diseñar el espacio de la oficina en tu casa es que tengas en cuenta cuánto tiempo pasarás allí y cuánto trabajo desarrollarás en esa área para evaluar si se justifica dedicarle un ambiente entero o sólo un espacio. También deberás tener en cuenta el volumen de papeles y documentos que allí guardarás y cualquier otra necesidad especial, de acuerdo al tipo de actividad que realices, haz una lista con todos estos detalles y no comiences a diseñar tu oficina hasta que tengas los puntos más importantes bien planeados. Recuerda que al final del día es un ambiente más de tu hogar (no una oficina comercial) y tiene que lucir como tal.
1. La silla
La silla es uno de los elementos más importantes dentro de tu oficina, ya que allí pasarás la mayor parte del tiempo. Tiene que ser, no sólo cómoda, sino también fácil de deslizar, es mejor si tiene ruedas y es giratoria, para facilitar el acceso a todas las cosas que estén alrededor sin tener que levantarte de la misma, esto te ahorrará mucho tiempo cuando estés en plena tarea. Elige la silla de acuerdo al estilo decorativo de tu hogar.
2. Almacenamiento
La segunda cosa más importante es el espacio dedicado al almacenamiento de papeles, documentos y artículos de oficina. Si la habitación cuenta con un armario o clóset puedes diseñarlo de manera tal que no sólo guardes allí este tipo de cosas, sino que, además, puedas instalar electrónicos que no son agradables a la vista cómo routers, módems, impresoras, etc.
Utiliza diferentes tipos de cajas, canastos y contenedores para mantener el espacio bien organizado. Si tu espacio de oficina funciona dentro de tu cocina puedes, por ejemplo, dedicar una hilera de cajones o gavetas de la estantería para almacenar todo lo referente al trabajo; también puedes colocar algunas cajas pintadas o decoradas sobre el escritorio o mesa para que cuándo no estés trabajando, el espacio luzca organizado.
3. El escritorio o mesa
Elige el tamaño y material del escritorio o mesa de acuerdo al tipo de trabajo que realizas y a tus necesidades. Si, por ejemplo, tu trabajo consiste, cómo el mío, en diseñar y trabajas con varias muestras de tela, pintura, fotos y materiales a la vez, lo mejor es que elijas un escritorio amplio dónde puedas esparcir todo y trabajar cómoda; lo mismo sucede si trabajas con muchos documentos. Si, en cambio, sólo utilizas un computador y apenas algo más, puedes simplemente elegir un pequeño buró o escritorio. Según el Feng Shui, la silla de tu oficina debe estar ubicada de manera que no dé la espalda a la entrada de la habitación.
4. Iluminación
Debes contar con diferentes tipos de iluminación, dependiendo el tamaño del espacio. Una luz general o desde el techo, una lámpara de pie, una lámpara de mesa y luces decorativas, como las de los cuadros. La más importante es la lámpara que pongas sobre tu escritorio, tiene que ser una luz que no te dé directamente en la cara y siempre tiene que iluminarte por detrás cuando estés leyendo para no cansar la vista.
5. Organización
Organiza el espacio de acuerdo a tus necesidades. Mantén sobre el escritorio y al alcance de la mano sólo las cosas que utilizas a diario y el resto guárdalo. Usa divisores en los cajones para mantener el orden, puedes utilizar pequeños frasquitos de comida para bebé dentro de las gavetas para guardar allí clips y todo tipo de cosas pequeñas. No utilices, en lo posible, lapiceros y accesorios típicos de oficina, recuerda que la idea es que luzca como un ambiente más de tu hogar. Puedes, por ejemplo, colocar los lápices y esferos (plumas) en pequeñas macetas decoradas en lugar de lapiceros, y canastos de mimbre o cajas con estampados en lugar de las típicas cajas plásticas de oficina.
6. Decoración
¡Olvídate por un momento que estás decorando una oficina! Recuerda que no estás en una corporación y que tienes plena libertad para hacer lo que te venga en gana.
Si cuentas con espacio suficiente, puedes tener un rincón de lectura que incluya una silla o sillón, una lámpara de pie y una pequeña mesa para saborear tu bebida favorita mientras lees. También puedes poner, por ejemplo, un cojín estampado sobre tu silla, cuadros, plantas, flores y recuerdos de viajes. Este es el ambiente perfecto para exhibir tus premios, títulos, condecoraciones, etc. Utiliza una pequeña alfombra debajo de la mesa o escritorio, elige un material bien suave como lana, verás que confortable se siente debajo de tus pies descalzos cuándo tengas que trabajar largas horas... al fin y al cabo es tu casa, ¡aquí sí puedes hacerlo!
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