¿Qué cara tiene tu casa?

Dime por cuál puerta entras a tu casa y te diré qué clase de fortuna tienes.

El frente o fachada de tu casa es lo que primero ven tus invitados al llegar y la carta de presentación tuya y de tu familia.

Las primeras impresiones siempre cuentan y si estás queriendo, por ejemplo, vender tu casa tener la fachada en buenas condiciones asegura que los compradores sientas deseos de querer seguir viendo más allá de la puerta de entrada.

Pinta todo lo que esté oxidado, mantén el techo limpio, los arbustos cortados y reemplaza las flores y plantas que estén secas.

Las ventanas son los ojos de la casa, deben estar limpias y pintadas, y si tienen persianas, no olvides pintarlas también. Elije para las persianas tonos oscuros y colores más claros para los marcos de las ventanas.

La puerta es lo más importante de la casa y, según el Feng-Shui, es por dónde la energía entra tu hogar, el color ideal es el rojo aunque no a todas las casas les va bien este color. Otro dato importante de la puerta de entrada es que siempre debes entrar a tu casa por esta puerta ya que al abrirla y cerrarla estarás permitiendo que la energía y la fortuna entren a tu hogar. Si usas, por ejemplo, la puerta del lavadero estarás haciendo que el dinero se vaya por las cañerías o desagües, y si entras por la puerta de la cocina, es como si estuvieras quemando el dinero. Así que ya sabes... ¡usa siempre la puerta principal!

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