Renovando el deseo en la pareja

Cuando la intimidad se vuelve algo rutinaria, dar el primer paso para el cambio es, sin lugar a dudas, uno de los requisitos más importantes. Quizá habría que empezar por recordar cómo era la sexualidad de los primeros tiempos que, desde ya, no brotará mágicamente, pero nos refrescará la memoria sobre ciertas preferencias.

Estar a gusto con el cuerpo. La sociedad y los medios transmiten mensajes que muchas veces no tienen relación con la realidad. Uno de ellos, es aquel que liga una buena sexualidad femenina con un cuerpo delgado. Cuando las mujeres se enfrentan con un ideal físico literalmente imposible no lo rechazan sino que se rechazan a sí mismas. Una persona puede ser gorda o flaca, alta o baja, tener pelo corto o largo, ser joven o madura y sin embargo todos tenemos una capacidad sensitiva, de placer, que y que es posible desarrollar. Todo cuerpo es capaz de dar caricias, bienestar y puede también sentir, recibir placer por todos sus sentidos, toda su piel, todo su cuerpo, desde la cabeza hasta los pies.

"Prohíbase" el sexo por unos días. Saber que no se puede hacer algo, aumenta el deseo, en especial, si usted y su pareja, llevan mucho tiempo juntos, y el sexo se ha tornado algo casi "automático". Cuando estén acostados, en lugar de ir directamente a la relación sexual, acaríciense el uno al otro y disfruten de la sensualidad de las caricias. Desvístanse, bajen las luces y túrnense para acariciar, besar y explorar cada milímetros del cuerpo del otro. Esto ayudará a ir aumentando el deseo y la expectativa.

Muéstrele a su pareja qué es lo que más le gusta. A los varones les encanta saber qué es lo que más excita a su pareja. El problema es que, ante esto, algunas mujeres realmente no saben qué decir. Muéstrele qué es lo que le gusta: ponga su mano sobre la de él y vaya guiándolo en cómo y dónde le gusta que la toque (incluso, qué cantidad de presión le gusta que use). Y cuando sienta que desea otros juegos sexuales, dígaselo: es la única forma de que él sepa qué es lo que usted desea. Tome la iniciativa de acercarse a él

Planeen una salida de fin de semana. Si no pueden irse a algún lado durante el fin de semana, al menos salgan una noche a cenar afuera. ¿O por qué no visitar a su pareja en el trabajo? Verse en un lugar, diferente del habitual, puede revelar facetas que desconocía.

Pero estas son sólo sugerencias, ideas, pero en definitiva la letra la escriben ustedes. ¡Que la pasen muy bien!

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