Combatir el insomnio después de ser madre

La cruda realidad para cualquier madre es que la idea de dormir ocho horas seguidas es prácticamente una fantasía, especialmente cuando tu hijo es todavía un bebé. Muchas madres duermen menos de seis horas seguidas, durante más de la mitad de la semana, lo cual ya es considerado insomnio.

Y aunque la idea de volver a dormir es tan lejana, como la idea de realmente descansar, existen estrategias naturales y muy simples que pueden ayudarnos a regresar a nuestros patrones de sueño normales; siempre y cuando las necesidades de nuestro bebé nos lo permitan.

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Participar en estiramientos, respiración profunda e incluso yoga 30 a 45 minutos antes de la hora de acostarse pueden ayudar a relajar tu mente y tu cuerpo. Si tu cuerpo no está relajado, tu mente no puede descansar, por lo tanto esta es una forma natural de combatir el insomnio.

Generalmente utilizamos nuestros dormitorios como oficinas, centros de entretenimiento y para cualquier actividad diferente a la que están realmente destinados. Es por ello que sacar de tu habitación las computadoras, teléfonos celulares, tabletas y cualquier distracción electrónica es un paso en la dirección correcta para alcanzar el descanso que necesitas.

También, asegúrate de no ver televisión o trabajar en tu computadora dos horas antes del momento de dormir.

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Para la mayoría de la gente, al dormir, el mundo alrededor de ellos desaparece, pero para las personas con insomnio todo se magnifica. Los sonidos se hacen más fuertes. Una forma de hacer que estos sonidos desaparezcan, o al menos disminuyan su efecto es usar máquinas con sonidos relajantes.

Asegúrate de no consumir cafeína o azúcar 2 a 3 horas antes de tu hora de descanso. Generalmente nuestra falta de descanso nos lleva a consumir más azúcar y cafeína para combatir la depresión que nos produce la falta de sueño, pero esos dos son nuestros enemigos silenciosos a la hora de combatir el insomnio.

Reemplaza el café o los postres con té de valeriana, manzanilla o agua de manzana sin azúcar. Esto ayudará a calmar tu sistema nervioso y conciliar el sueño.

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Descansar es importante para que puedas ser la madre que tu hijo necesita, por ello, asegúrate de tomar tu descanso en serio y de encontrar formas naturales de relajarte para que tu mente y tu cuerpo puedan regenerarse.