Maravillas del cloruro de magnesio

El cloruro de magnesio es un compuesto químico formado por cloro y magnesio; tiene muchas aplicaciones industriales, pero también su presencia en la dieta diaria logra aportar importantes beneficios para el mantenimiento de nuestra salud.


cloruro
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Este compuesto es un potente relajante muscular y permite la mejor absorción y fijación del fósforo y calcio. En la naturaleza es muy abundante, lo podemos encontrar en la corteza terrestre y en las sales del mar, pero en los alimentos ha ido desapareciendo poco a poco; lo anterior se debe a que en la actualidad, los terrenos agrícolas son sobre explotados y no descansan, lo que ocasiona que el magnesio no alcance a reponerse de manera natural y en consecuencia, los productos cada vez contienen menos o incluso ya no contienen este importante mineral.

Después de los 40 años, el cuerpo comienza a absorber menor cantidad de magnesio de los alimentos, lo que ocasiona envejecimiento y ciertas enfermedades. En nuestro metabolismo, el cloruro de magnesio se encuentra principalmente concentrado en el corazón, el hígado, el cerebro y los riñones, por eso su carencia produce síntomas variados.

Según un estudio realizado por el Reverendo José Chorr, profesor de física y biología, y apoyado también en su experiencia personal, muchas de las enfermedades que existen actualmente se deben a la carencia del cloruro de magnesio o a la ausencia de cantidades adecuadas de éste en el organismo, lo que ocasiona que éste sea incapaz de aprovechar todas sus propiedades.

Algunas de las propiedades y beneficios del cloruro de magnesio, son:

  • Según estudios científicos realizados, el cloruro de magnesio es la sal que más fortalece el sistema inmunitario.

  • Mejora la circulación, especialmente en arterias coronarias, ayudando a evitar infartos, por lo que se dice que tiene un efecto cardio protector.

  • Mejora la absorción de muchos nutrientes, entre ellos el calcio, previniendo así la osteoporosis.

  • Normaliza la presión arterial.

  • Ayuda a conciliar mejor el sueño por la noche y a estar más alerta en el día.

  • Al evitar que el ácido úrico se deposite en las articulaciones previene la artritis.

  • Ayuda a combatir el estreñimiento.

  • Estabiliza el sistema nervioso, dando calma y armonía.

  • Previene problemas de próstata.

  • Previene distintos tipos de cáncer, aunque una vez diagnosticado, es conveniente suspender su uso.

  • Previene la formación de cálculos renales.

  • Ayuda a prevenir la diabetes y mejora la calidad de vida de quienes la padecen.

  • Combate la depresión, estrés, ansiedad y mal carácter.

  • También ayuda en tratamientos de Alzheimer, asma, arritmia, fatiga, hipertensión, estrés, etc.

  • Definitivamente ayuda a llegar a la vejez con una mejor calidad de vida.

  • Mejora la memoria.

  • Alivia dolores crónicos.

Es importante que el cloruro de magnesio se adquiera en grado farmacéutico de alguna marca que certifique su origen y calidad. Debes disolver en una jarra de vidrio con un litro de agua fría hervida, 30 gramos de cloruro de magnesio con una cuchara de madera; es importante disolverlo bien.

La dosis recomendada es tomarlo en una copita tequilera, teniendo en cuenta la edad y el padecimiento:

  • De 40 a 55 años, media dosis.

  • De 56 a 70 años, una dosis por la mañana.

  • De 71 años en adelante, una dosis por la mañana y otra por la noche.

El cloruro de magnesio es considerado como la fuente de energía del cuerpo y la mente, su uso no crea habito y no se contrapone con otros medicamentos, si se deja de consumir, se perderán todos sus beneficios. Consumirlo en las dosis recomendadas, hará que nuestro organismo en general sea más saludable. Es curioso pero se trata de un complemento económico y que ha aliviado a muchas personas.

El cloruro de magnesio, como todo principio activo, no está exento de contraindicaciones y es importante conocerlas para evitar efectos adversos, no se recomienda su uso en casos de diarrea o insuficiencia renal. Para cualquier duda, te recomiendo verifiques con tu médico de cabecera.

¡Recuerda…tú generas el cambio!

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