Yahoo Estilo Bryan Singer producirá su propio documental sobre las acusaciones de abuso sexual en su contra
Luego del éxito de Sospechosos Comunes (88%), el nombre de Bryan Singer se convirtió en uno de los más populares en Hollywood y para cuando X-Men (81%) se estrenó en el mundo, su legado en el género de superhéroes estaba decidido. A pesar de varios tropiezos en su carrera, como Superman Regresa (76%) o Jack el Cazagigantes (52%), el creador mantuvo su reputación en la industria, aunque tuvo que volver al mundo de los cómics para poder mantenerse a flote. Las cosas se salieron rápidamente de control durante la producción de Bohemian Rhapsody: La Historia de Freddie Mercury (51%) y luego de que el también productor enfrentara diversas acusaciones de abuso sexual en su contra. Luego de pasar años lejos del ojo público, Singer pretende volver con un documental donde abordará estos escándalos desde su perspectiva.
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Las acusaciones contra Singer fueron tema de debate porque para cuando el mundo prestó atención fue demasiado tarde. Lo cierto es que rumores sobre su comportamiento siempre estuvieron presentes en todas sus producciones, pero hasta la llegada de los movimientos Time's Up y MeToo, así como el juicio contra Harvey Weinstein, nadie los tomó con seriedad. En 1997, un extra menor de edad acusó al director de acoso porque intentó presionar a varios jóvenes de filmar desnudos una escena de ducha en Apt Pupil aunque eso no estaba en el guion. Tras ser respaldado por otros extras, se investigó la situación, pero en ese momento se decidió no presentar cargos en su contra.
En 2014, el nombre de Singer volvió a circular en los medios, ahora por una acusación de abuso sexual que reveló el modelo Michael Egan, quien aseguró que tras conocer en una fiesta al director, éste lo drogó y violó a finales de los noventa. Como ciertos puntos en la historia de la víctima no eran claros y él mismo retiró las acusaciones después, se consideró un desagradable chisme que no debía afectar la carrera de Singer, postura que cambió unos años más tarde. En 2017 una nueva víctima presentó su caso, pero tampoco se avanzó mucho, aunque en esta ocasión, Singer decidió mantener un perfil bajo.
Aunque Bohemian Rhapsody se estrenó a finales del 2018 y ya se había confirmado el despido de Singer, fue en 2019 cuando se revelaron las verdaderas razones sobre su salida. Se dice que, además de no presentarse a trabajar, las cosas se salieron de control por el errático comportamiento del director, mismos que dejaron en el centro a Rami Malek, quien nunca ha aclarado exactamente qué sucedió, pero hay rumores de que fue atacado físicamente en más de una ocasión. Ese mismo año se publicó un nuevo artículo donde aparecían más víctimas y con un nuevo contexto en la industria, las productoras y asociaciones que alguna vez lo elogiaron y protegieron, se desentendieron por completo.
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Singer se retiro en silencio y se mudó a Israel, pero ahora está listo para volver con varios proyectos con los que busca recuperar su estatus como creador independiente. A pesar de no tener un agente, él espera obtener el financiamiento por su cuenta y, por desgracia, parece que lo está logrando. Según Variety, el director tiene preparadas tres películas relacionadas y ambientadas en Israel, una de ellas se desarrolla en 1970, y ya ha tenido reuniones importantes con posibles inversionistas. La idea es producirlas y filmarlas por la cantidad de US$10 millones cada una, pero todavía no se sabe si ya ha cerrado algún trato definitivo. Lo que sí se sabe es que su viejo colaborador y colega, Jason Taylor, está dispuesto a producir estos proyectos.
Lo que es todavía más curioso es que Singer también está preparando un documental que él mismo va a financiar y producir sobre su vida privada, en el que abordará las acusaciones en su contra. Según esta información, el director espera revelar su punto de vista sobre todo el asunto y promete abrirse al público para explicar sus problemas personales, su larga historia de adicciones y su lucha dentro de la industria. Por supuesto, otros documentalistas ya están tachando el proyecto de ridículo porque se siente como una forma manipuladora de volver al medio y controlar la percepción que el público tiene sobre él.
Pero los planes de Bryan Singer no acaban aquí, pues una fuente cercana al director también asegura que ya está planeando otro documental sobre Greg Louganis, un deportista estadounidense que se llevó dos medallas de oro en Juegos Olímpicos y que es considerado una figura importante en la comunidad LGBTTQ+ gracias a sus años como activista y a su lucha pública contra los prejuicios. Todas estas ideas del creador nos demuestran que supo ser paciente, pero nunca dejó de ser ambicioso, pues es seguro que espera que los años funcionaran para hacer olvidar al público, pero eso está por verse.
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