C.Tangana: "Creen que solo quiero la pasta, pero para mi el éxito es estar en los Goya"
Róterdam (Países Bajos), 3 feb (EFE).- El director de la película 'La Guitarra Flamenca de Yerai Cortés', Antón Álvarez, también conocido como C.Tangana o Pucho, aseguró que aunque durante mucho tiempo la gente pensó que su único objetivo era "la pasta", para él el éxito reside en el "respeto" que La Academia del Cine Español le otorga al acoger su obra.
"Cuando pienso en el éxito pienso en el impacto cultural, en la sensación de que la gente que se dedica a esto respeta lo que haces. Para mi ir a los Goya es eso", afirmó en una entrevista a EFE durante la 54 edición del Festival Internacional de Cine de Róterdam en su debut internacional.
A unos días de la celebración de los Premios de La Academia 2025, nadie aún sabe si los cohetes Starlink enviados al espacio por Elon Musk que vieron Álvarez y Cortés la noche que se conocieron y que funcionaron como una "señal" para lanzar la película los llevarán ahora a ganar en las categorías de Mejor Película Documental y Mejor Canción Documental.
El polifacético artista encontró solución a su inquietud de probar suerte como director de cine en una fiesta en la que quedó seducido por Yerai Cortés (Alicante, 1995), compositor y guitarrista que ha acompañado a figuras como La Negra, Javier Colina o Farruquito, entre otros.
"Conecté con él porque en su historia hay temas que pueden generar símbolos con los que la gente se identifique. Yo estoy obsesionado con la familia, con mi madre, con el amor. Es la preocupación del artista por contar con pasión", señaló.
Desde una comida en el salón de la casa de su madre, María, una mujer "delicada como una bomba", o una charla en el barrio con su padre Miguel, 'Mikel Nay', el documental se adentra con una mirada íntima en el "doler" del guitarrista por un secreto familiar.
"Quería contar la historia de mi hermana Tania. Si lo hacía yo solo, se iban a enterar los que me escucharan, pero cuando me junté con Pucho sabía que iba a ser algo grande. Me adentré en el proyecto casi por puro egoísmo, pero después te das cuenta de que la gente se identifica y sana al ver la película", confesó Cortés.
Si Pucho había vivido hasta ahora bajo los focos "sin cantar ni afinar" y con ganas de "triunfar y ganar", como cantaba en su canción 'Un Veneno', ahora esa "ambición desmedida" se aparta para ocupar un sitio tras la cámara.
"Estaba un poco cansado de la gira, de mí mismo, de los focos. Descubrir que podía usar mi creatividad para un proyecto en el que no tenía que estar en primera línea lo viví como una bendición", expresó Álvarez.
A esta nueva aventura se lanzó "con el atrevimiento que da la ignorancia" y "aprendiendo mientras lo hacía". "Es una forma muy flamenca", apostilló Cortés.
La esencia del filme, que recibió nominaciones en los Premios Forqué y en el Festival de Cine de San Sebastián, reside en un juego entre escenas de la cotidianidad y escenificaciones artísticas con temas del álbum de Cortés, que comparte nombre con la película y la "complementa".
"A veces la música es un lenguaje poco específico y muy abstracto, pero con la película puedes entender el por qué de los acordes", contó Álvarez.
Sin embargo, la magia se encuentra en la pulsera de oro que golpea el filo de la guitarra o en la cuchara que roza el plato, sonidos que se cuelan y otorgan a la película voz propia.
"Incluimos mucho sonido ambiente porque queríamos reflejar la vida queriendo meterse en la música. No grabar algo muy nítido en el estudio y que todo suene perfecto. La película vive de eso", concluyó C.Tangana.
Sara Morato
(c) Agencia EFE