Camilo: cómo lo transformó la paternidad, su relación con Evaluna Montaner y el amor por sus fans

Camilo vuelve a Buenos Aires: se presentará el 10 y el 11 de marzo en el Movistar Arena
Camilo vuelve a Buenos Aires: se presentará el 10 y el 11 de marzo en el Movistar Arena

Camilo Echeverry tiene 28 años y su voz encabeza los rankings internacionales de música. Sus bigotes “a lo Dalí” le dan el toque excéntrico de la estrella latinoamericana que es. Pero el resto de su ego parece bien colocado, casi sin rastros de haber sido su cara la que atiborró portales de noticias con especulaciones sobre el género de su beba Índigo, ni siquiera de haber expuesto su vida en el reality Los Montaner.

Tras agotar entradas en Europa, Estados Unidos y en varios países de América Latina, el cantante pisa nuestra tierra con enorme entusiasmo: se presentará el 10 y el 11 de marzo en el Movistar Arena. La Argentina no solo es el país de su suegro, Ricardo Montaner, padre de su esposa Evaluna y abuelo de Índigo, sino el referente cultural de cuando le gustaban los “rockitos” de Sui Generis, como señaló en 2007, durante su audición en la versión colombiana de Factor X, reality que ganó y que marcó el inicio de su carrera.

La cadencia de su acento colombiano colma de dulzura y calidez a los que lo rodean. Al escucharlo hablar de su hija o al preguntar cómo se cura un mate es poco el registro que devela que él es el mismo Camilo que antes de su debut como intérprete y de su arrollador éxito internacional, escribió múltiples singles para Becky G y Natti Natasha (“Sin pijama”). Hoy sus canciones hablan de amor y sus videos lo muestran junto a su esposa y su beba. Mientras los artistas de su generación ascienden de la mano del trap con un estética rebelde y desenfrenada, la música de Camilo parece mantenerse en otro carril. La de él, según dice, es “la revolución del amor”. “Quiero seguir haciendo música que genere felicidad y que me represente”, expresó el cantante. Camilo es ganador de cinco premios Latin Grammy y fue dos veces nominado al Grammy, y es considerado uno de los mayores exponentes del nuevo pop de su generación, con más de cinco mil millones de reproducciones en todas las plataformas digitales alrededor del mundo.

Su tour lo llevó por Europa, Estados Unidos y Latinoamérica con récords de ventas
Su tour lo llevó por Europa, Estados Unidos y Latinoamérica con récords de ventas

-¿Qué nos podés adelantar de tu tour en la Argentina y qué es lo que más te gusta de nuestro país?

-Tengo mucha ilusión porque aunque tuvimos la oportunidad de estar tocando antes en la capital, nos debíamos el viaje al interior y recorrer más un país que a mi me ha causado tanta curiosidad, agradecimiento y cariño. Siento que era hora de poder atravesarlo más. Sé que falta aún, pero es una ilusión muy grande poder estar en Villa María, Neuquén, Pilar, Córdoba, San Juan, Rosario y cerrar con dos noches el 10 y 11 de marzo en el Movistar Arena de Buenos Aires. Me da mucha felicidad, mucha alegría porque son lugares que no he pisado, confirmando una vez más que este país es extenso, precioso, diverso, bonito, abierto, con un corazón muy lindo para mi y para mi música. Me ha dado una gran oportunidad. Estoy muy emocionado porque esta gira la ansiaba hace mucho tiempo.

-¿Qué es lo que más te atrae del público argentino?

-Muchas cosas. Argentina es un país con mucha historia de buen gusto musical y de movimiento cultural. El público argentino sabe lo que le gusta y lo que no , entonces cuando algo le gusta es porque verdaderamente le gusta. Subirse a un escenario con un público tan apasionado, tan querido y con tanta diversidad, es muy lindo. Para mí, la parte más linda de un concierto es asomarme a observar a mi público y cuando veo que hay gente de todas las edades, con historias completamente diferentes y con todo tipo de identidad, me emociona. No sé si eso es algo que pasa en todos los conciertos, pero la Argentina que me abrió las puertas a mí, la tribu que me he encontrado es fascinante y me enamora muchísimo.

-Tu música conecta muchísimo con los chicos más chicos. Me imagino que no lo hacés a conciencia pero, ¿qué pensás de ese furor que causás en los más pequeños?

-Yo creo que hay una diferencia entre voluntad y conciencia. Conciencia sobre ese hecho me sobra por el asombro de verlo suceder y el tamaño de la bendición que eso significa para mí. Creo que los niños son el público más difícil que existe: a ellos les gusta lo que les gusta y lo que no, aunque intentes, no les va a gustar, como pasa con los vegetales. Soy muy consciente del privilegio que significa que mi música sea reconocida, disfrutada, bailada, gozada, repetida y vivida por los más pequeños. Ahora, no es algo construido a voluntad. No tengo ni idea cómo hacer música que le guste a los niños, no tengo idea qué es lo que mi música conectó. No tengo idea qué es lo que hace que Índigo, mi hija, se mueva como se mueve cuando escucha lo que escucha. Es algo intangible, inexplicable, que va más en el reino de las cosas sutiles y del alma que en el mundo de las letras y las melodías.

¿Cambió en algo la paternidad en tu forma de hacer música? ¿Sentís otra responsabilidad a la hora de transmitir cierto mensaje?

No hay nada en mi que sea lo mismo antes y después de Índigo. Ser papá me transformó de una manera bastante arrolladora. No hay nada de mí que no haya sido tocado por el hecho de tener ahora a mi hija a nuestro lado . Aprendemos todos los días de ella, vemos el mundo a través de sus ojos y en ese mundo también estoy yo con mi música y mi oficio creativo. No hay nada que en este momento haga o deje de hacer que sea sin pensar en cómo impacta eso en la vida de mi hija. Es lo mismo con mi esposa. Cuando yo conocí a Evaluna, de repente veía la vida a través de los ojos del amor que sentía por ella. Entonces si, soy una persona que se deja atravesar por lo que está viviendo y en este caso por mi hija.

-Se los ve dispuestos a resguardar la intimidad de Índigo pero a la vez están súper expuestos. Por ejemplo, la elección del nombre de la beba generó polémica por ser neutro. ¿Cómo gestionan la intimidad en el día a día?

-Con mucho menos estrés del que se imaginan. Con calma y sentido de la seguridad. Yo creo que Índigo esta viviendo en un mundo precioso y desde esa calma hay días que uno tiene las puertas de la casa abierta, otros en los que uno tiene la casa cerrada, días que uno quiere visitas en su casa y días que no. Todo es con calma.

-¿Cuáles son los próximos pasos para tu música?

-Los shows en vivo me emocionan mucho. El lado más bonito de lo que yo hago es el encuentro con las personas que están del otro lado de la música. Las canciones tienen significado y sentido en la medida que tienen significado y sentido en la vida de otras personas. Esta gira me emociona mucho porque es una gira que vengo soñando hace un montón. El gran bloque que sostiene lo que está pasando con mi música y mi carrera es gente de mi continente entre los que están ciudades y países que todavía no tuve la bendición de conocer, pero ahora ya está en plan y en calendario. Estamos viajando la familia entera a ese encuentro que me da tanta alegría.

“Quiero seguir haciendo música que genere felicidad y que me represente”, sostiene Camilo
“Quiero seguir haciendo música que genere felicidad y que me represente”, sostiene Camilo

-Sos de la misma generación de un montón de artistas a los que les está yendo muy bien con el trap ¿Cuál es tu mirada hacia ese movimiento?

-Me encanta el trap, me fascina, tanto el argentino como todo lo que está pasando en el Cono Sur; me inspira muchísimo. Hay un montón de amigos míos que son parte del movimiento del trap y me fascina porque me parece honesto, real, cargado e inundando de talento y de ideas y de gente con una capacidad de expresar lo que siente. Lo disfruto y en casa lo escuchamos. Me encanta que esté creciendo tanto a nivel internacional y que haya espacio para tanta diversidad.

-Tanto vos como Evaluna se encargan de todo el proceso creativo...la música, la estética, la producción de los videos ¿Cómo lo vivís?

-Procuro que mi creatividad no nazca tanto de mi cabeza porque cuando la gente tiene un encuentro con tu obra no lo va a tener desde la cabeza. El encuentro que uno tiene con el artista es desde el pecho más que desde la cabeza. Nada de nuestra creatividad nace del intelecto, lo hacemos desde el sentir. Nace de lo que somos aquí y ahora. Nuestro oficio artístico deja ese aquí y ahora inmortalizado. Partiendo de ahí tomamos riesgos creativos pero no es algo calculado, si no, no sería tan divertido.

Camilo se presentará en el Movistar Arena el 10 y 11 de marzo
Camilo se presentará en el Movistar Arena el 10 y 11 de marzo

-¿Qué palabras te gustaría que queden inmortalizadas con tu música? ¿Con qué sensación te gustaría que se vaya la gente después de ver tu show?

-En mis conciertos hay algo que se celebra profundamente con cada una de mis canciones y es lo valioso que es que cada uno sea libre de ser lo que verdaderamente es. Ser honesto con uno mismo. Mis conciertos son una total invitación a celebrar esa diversidad. Eso se celebra con solo observar a mi público y verlos disfrutar de la diversidad, pero aun hay mucha gente que necesita un empujoncito para sentirse orgullosa u orgulloso de lo que sea que son y sea lo que sea que eso signifique. Si yo pudiera elegir un solo mensaje para colar en el corazón de las personas a través de mi música sería ese: que a través del amor cada persona se sienta digna de ser celebrada.