Canales Rivera paga el precio de ser títere de 'Sálvame'

El torero José Antonio Canales Rivera es colaborador de ‘Sálvame’ desde hace años y lleva tiempo pagando el precio pero, desde luego, lo que ha pasado ahora, lo supera todo con creces.

El Puente de la Constitución, Canales Rivera tenía fiesta del programa y aprovechaba cada minuto para estar con sus hijos disfrutando de tiempo de calidad pero, el pasado jueves ocho de diciembre se le pidió desde ‘Sálvame’ que aceptara una conexión en directo.

El tema a tratar era, como no, el monotema del mes: Alba Carrillo. La colaboradora de Telecinco se ha liado con Jorge Pérez, les han pillado y se ha montado el pollo. El caso es que Alba también se lió con Canales cuando este tenía pareja pero hace pocos días él aseguró que solo había sido una vez.

Alba, cabreada por el hecho de que el torero opinara sobre lo suyo con Jorge, le ha acusado de haberse acostado con ella en otra ocasión también, es decir, volviendo a ser infiel a su pareja. El caso es que, con toda esta polémica sobre la mesa y en pleno puente, José Antonio accede al directo con su programa.

Él había pedido que free a las 16h, a primera hora, para poder aprovechar la tarde con sus hijos pero el programa le hace esperar hasta que oscurece. Lo peor del asunto es que, para su sorpresa, ante de que abra la boca en directo le plantan un vídeo de lo más humillante, tanto a nivel personal como a nivel profesional.

La pieza en vídeo va acompañada de una voz en off que narra sus presuntas deslealtades a sus parejas y dice cosas tan feas sobre él como: “el torero, mejor dicho intento de torero porque su carrera fue un auténtico fracaso” o “el auténtico embustero” y también “torero frustrado”.

Además de esto, que ya es un auténtico despropósito, el vídeo asegura que: “solo él se cree sus mentiras, cuando dije digo, dije cuernos” y “tienes un serio problema de respeto a tus parejas” así como “su novia es víctima de sus instintos más primarios”.

Su cara al terminar el vídeo era un auténtico poema, se le veía tocado, dolido y humillado. Antes de que Canales Rivera pudiera abrir la boca, María Patiño y Adela le han pedido perdón en nombre del programa por el “desafortunado y fuera de lugar” comentario sobre su profesión en el vídeo.

Evidentemente, José Antonio ha respondido que sí, claro, que ahora pedían perdón pero que ya estaba dicho. De nada sirve meter un vídeo que tiene que haber pasado varios filtros antes de ser emitido para luego pedir perdón cuando ya la basura está vertida sobre su persona.

En un ataque de dignidad muy necesaria, José Antonio Canales Rivera ha explicado que estaba ahí por respeto al programa que le paga, que estaba en puente perdiendo tiempo con la conexión en vez de estar con sus hijos y que, en pocas palabras, tras esa ofensa, ahí se quedaban.

El torero se ha quitado el ‘pinganillo’, ha salido de plano y ha dejado a las presentadoras y colaboradoras sin derecho a réplica y con la palabra en la boca y, sinceramente, el programa se lo merecía.

Eso sí, esta actitud también les va bien porque genera más salseo de cara a los próximos días. Ya me imagino los cebos de “El cabreo de Canales” la próxima semana y es que trabajar en ‘Sálvame’ hace que los colaboradores paguen un alto precio y esta vez, le ha tocado a Canales Rivera.

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