Cardi B quiere evitar que sus hijos vivan en una burbuja de lujos y privilegio

Cardi B credit:Bang Showbiz
Cardi B credit:Bang Showbiz

La pareja formada por Cardi B y Offset puede presumir de ser una de las más acaudaladas y poderosas de la industria discográfica. La verdad es que los dos artistas lo hacen con frecuencia y sin complejos de ningún tipo, como se desprende de esas imágenes y vídeos que publican en sus redes sociales para alardear de sus espectaculares coches, sus vacaciones de ensueño y otras muestras de su lujosa vida.

Sin embargo, a lo largo de su carrera musical la rapera también ha demostrado que tiene la cabeza muy bien amueblada, especialmente en lo que se refiere a la educación de sus hijos. Su ingente patrimonio y su gusto por darse caprichos que no están a la altura del común de los mortales no implican que Cardi, de 30 años, no tenga los pies en el suelo o sea incapaz de evitar que la fama la convierta en una mujer elitista o inaccesible. Y ahora ha vuelto a dejar claro que sus dos retoños, Kulture (5) y Wave (1), seguirán inevitablemente sus pasos.

La estrella del hip hop siempre ha estado muy unida a su familia y conectada al barrio en el que se crio, el Bronx de Nueva York, al que debe su actitud, su afán de superación y, en sus propias palabras, su "identidad". Aunque sus niños ya han nacido en un entorno muy privilegiado, su famosa madre se encargará personalmente de que no se olviden de dónde vienen, de que mantengan una estrecha relación con sus parientes y, sobre todo, de que entiendan que sólo ellos y su esfuerzo determinarán lo que consigan en el futuro.

"Siempre me he asegurado de que mis niños estén constantemente rodeados de su familia. Vienen conmigo cada vez que venimos al Bronx. Conocen muy bien a sus abuelos y la comunidad en la que yo he crecido, que también es una parte importante de su identidad", ha explicado la intérprete a la revista InStyle.

Cardi B, cuyo nombre real es Belcalis Marlenis Almánzar, tiene raíces dominicanas y trinitarias. Como buena caribeña que es, una de sus grandes aficiones pasa por reunir a tantos familiares como pueda alrededor de la mesa para disfrutar de un buen banquete y de todas esas caóticas conversaciones nacidas del entusiasmo. "Mis mejores recuerdos siempre implican comer juntos, en familia. Hay muchas personalidades juntas. Quiero que mis hijos sepan lo importantes que son esos momentos, estar con la familia y atesorarla", ha señalado.