Cardi B sabía quién era el diseñador de su vestido para la gala del Met, pero no recordaba cómo pronunciar su nombre

A Cardi B le han llovido las críticas por mencionar el nombre del diseñador que la vistió para la gala del Met del pasado lunes. Fiel a su costumbre de no morderse la lengua, ella ha querido responder para aclarar por qué se le olvidó que se llama Sensen Lii y que es chino, aunque el afectado por toda esta situación no se ha quejado públicamente por el desliz.

La rapera ha comenzado por explicar que se encontraba muy nerviosa cuando llegó a las escaleras del museo metropolitano porque nada había salido como esperaba. Ella se había preparado para posar con su voluminoso vestido subida a una especie de podio, y llevaba días practicando, pero en el último momento le informaron de que no podría usarlo por motivos que no ha entrado a aclarar.

Cardi tuvo que reclutar la ayuda de siete personas para que la ayudaran a navegar la alfombra roja, y cuando llegó el momento de charlar con Emma Chamberlain, la corresponsable de Vogue, se sentía completamente sobrepasada por las circunstancias: el vestido pesaba más que ella y le había producido tal dolor de cabeza que sentía nauseas.

La cantante reconoce que se le olvidó cómo se pronunciaba el nombre de Sensen Lii, aunque en su defensa recuerda que no es precisamente sencillo. Tampoco considera que cometiera un pecado imperdonable al no especificar que es un diseñador chino porque en su opinión habría sido peor que se equivocara con su país de origen.

"Sabía que el diseñador era asiático, pero no estaba segura de cuál era su nacionalidad. Y me parece que hubiera sido más ofensivo que dijera: Es chino, o coreano, o vietnamita... No quiero confundirme con la nacionalidad de nadie, por eso dije que era asiático. No pretendía ofender a nadie ni causar polémica", ha asegurado ahora a través de un vídeo publicado en Instagram.

Cardi ha respondido también al director general de Vogue, Gilbert Cheah, que le dedicó unas palabras muy duras en Instagram asegurando que lo menos que podía hacer era recordar el nombre del profesional que pasó dos meses trabajando en su atuendo. Ella ha contraatacado asegurando que toda esta polémica está desviando la atención del esfuerzo y el talento de las personas que ayudaron a vestirla para la velada. "Estás tratando de faltarme al respeto a mí, pero sólo ofendes a la gente que trabaja entre bambalinas, y que pasa horas y horas hablando por teléfono y por videollamada, y que gasta su dinero en este diseño sólo porque te ofendió un comentario que hizo, sin saber siquiera por qué dije lo que dije", ha añadido.

Tampoco le da miedo que no vuelvan a invitarla al evento por su olvido porque, como ella misma recuerda, es Cardi B.