“Cargo esa cruz”: el marido de Amy Winehouse admitió que fue el culpable de la adicción de la cantante

Blake Fielder-Civil y Amy Winehouse tuvieron una relación plagada de excesos y adicciones
Blake Fielder-Civil y Amy Winehouse tuvieron una relación plagada de excesos y adicciones - Créditos: @Dave M. Benett

Hoy Amy Winehouse hubiera cumplido 40 años, pero su vida quedó trunca el 23 de julio de 2011, luego de sufrir un paro cardiorrespiratorio como consecuencia de una intoxicación alcohólica. Tenía 27 años y una vida marcada por los excesos, las adicciones y la depresión. Desde que murió, muchos apuntaron contra la figura de Blake Fielder-Civil, su marido. “Siempre, siempre la extrañaré. Ella era mi mejor amiga”, dijo hoy el actor. También admitió que si bien fue el culpable de la adicción de la cantante, no fue el responsable de su trágico final.

Amy Winehouse hubiera cumplido hoy 40 años
Amy Winehouse hubiera cumplido hoy 40 años - Créditos: @Jason Squires

“Pensé en ella esta mañana y le dije feliz cumpleaños. Siempre, siempre la extrañaré. Ella era mi mejor amiga”, arrancó Fielder-Civil, de 41 años, la entrevista que le brindó al programa inglés Good Morning Britain. Luego hizo referencia a su tiempo con Winehouse y la idea de muchas personas que lo señalan todavía como el “responsable” de su muerte. “Esa es una de las razones por las que quería hablar hoy”, dijo. “Y eso está bien. No puedo cambiar lo que otras personas sienten al respecto, pero personalmente necesitaba dejar de cargar esa cruz. Yo mismo he cargado con eso durante más de diez años. Para ser honesto, siento que soy la única persona dentro de esta historia que alguna vez se ha responsabilizado, que alguna vez ha tratado de decir: ‘Sí, cometí algunos errores enormes’”, se sinceró.

Cuando le pidieron a Fielder-Civil que explicara algunos de esos errores, el actor se explayó: “Yo era un drogadicto de veintitantos años. No tenía la menor idea de cómo limpiarme y menos sabía cómo limpiar a alguien más que, además, era un gran engranaje de la maquinaria de un sello discográfico. Había intereses creados en que Amy siguiera actuando”, explicó. En ese momento, Ben Shephard -el presentador- señaló que Winehouse era “muy vulnerable” y un “alma frágil”. “Sí, lo era. Creo que la fragilidad es con lo que la gente se conecta en los álbumes y en la composición”. respondió.

En una entrevista de 2018 con el mismo medio, Fielder-Civil dijo que la narrativa sobre su consumo de drogas estaba sesgada. “Lo de las drogas es algo que se me atribuye desde hace años. El hecho es que Amy y yo solo consumimos drogas juntos tal vez seis meses de nuestro matrimonio. Eso fue todo. Y antes de eso, Amy no consumía drogas. Ella fumaba cannabis y yo consumí heroína tal vez cuatro o cinco veces”, dijo en ese momento. Luego añadió: “La gente no se da cuenta de que Amy no hizo nada que Amy no quisiera hacer. Siempre llevaré una carga de culpa porque debí haber actuado”, sentenció en esa oportunidad.

Según publicó The Sun, Fielder-Civil aseguró que haría “casi todo” de otra manera si le hubieran concedido su tiempo con Amy nuevamente. Además, reveló que no se comunicó con la familia de la recordada cantante hoy porque no sentía que fuera bienvenido.

Amy Winehouse conoció al entonces asistente de producción de videos en un pub londinense en 2005, dos años después del lanzamiento de su primer gran disco, Frank. La atracción fue instantánea, pero la relación se terminó al año siguiente por supuestas infidelidades de él. Sin embargo, Amy no pudo superarlo: en 2007, no solo retomaron su relación sino que la oficializaron.

Amy Winehouse y su marido Blake Fielder-Civil en un recital
Amy Winehouse y su marido Blake Fielder-Civil en un recital - Créditos: @Shirlaine Forrest

Amy y Blake se casaron el 18 de mayo de ese año en Miami. De 2007 a 2009, año en el que se divorciaron, ambos fueron perseguidos incesantemente por la prensa y Winehouse, lejos de disfrutar lo que estaba cosechando tras años de trabajo, era fotografiada en las calles de Londres con moretones en su cuerpo, al igual que su marido, quien llegó a contar que fue él quien la hizo consumir heroína y crack.

Cuando la relación llegó a su fin, Blake argumentó que una de las causas de la ruptura fue la del adulterio. Esa dependencia se cristalizó aún más con la muerte de Winehouse. La madre de Blake declaraba en ese complejo momento que su hijo “iba a matarse si ella no estaba más”. “Va a volver a lastimarse”, manifestaba Georgette respecto de la salud de Blake, nombre que Amy llevó tatuado en la piel y quien estaba preso cuando la cantante murió. En agosto de 2012, Fielder-Civil tuvo una recaída y debió ser conectado a un respirador artificial.