Cómo es la casa sustentable donde Calu Rivero pasa fin de año junto a su novio ruso

Ya hace un tiempo no quedan dudas de que Calu Rivero está de novia con Andrey Manirko, un documentalista ruso. Si bien "Dignity" había publicado imágenes de su nuevo amor en sus redes sociales e incluso estuvo con él durante su estadía en Nueva York, a principios de esta semana la actriz posteó fotos de Andrey junto a sus padres en su cuenta de Instagram. Además, según trascendió, ambos recibirán el nuevo año en la casa que la artista se construyó en José Ignacio, Uruguay.

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"Corazonada", como decidió bautizar a la propiedad, es una casa sustentable hecha a medida de los intereses de Calu. "Yo quería que mi casa tuviera apertura total al paisaje. Una forma más simple y austera de estar conectada con la naturaleza", dijo sobre la vivienda en una entrevista en ¡HOLA!, hace un año.

La construcción busca minimizar el impacto en el medio ambiente y se encuentra en una zona virgen de la Laguna Escondida.

Eco friendly, está construida con madera y el techo tiene paneles de vidrio, para aprovechar al máximo la luz natural y, de esa manera, reducir el suministro eléctrico.

A su vez, las habitaciones tienen grandes ventanales que le permiten no solo entrada de luz solar, sino también tener una vista al espectacular paisaje.

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La cocina está integrada al living. La mesa del comedor y la auxiliar son, al igual que los muebles exteriores, fabricados en Córdoba por Pablo Rolotti, un amigo de la familia. En el living se lucen dos sillones de cuero escandinavos que pertenecían a Elda, la abuela paterna de Calu.

A mediados de noviembre, "Dignity" se instaló nuevamente en su casa soñada, donde suele pasar sus veranos. "Poética y artística, pura corazonada", escribió en sus redes, dando a entender que ya se encontraba en Uruguay.

Según contó en su momento, la idea de construir esta propiedad surgió entre 2014 y 2015, cuando comenzó a experimentar "las nuevas formas sustentables de habitar, como las casas de adobe o en el árbol".

Cuando pisó por primera vez el terreno donde erigiría su casa, sintió una conexión muy especial: "De todos los terrenos que había visto en la zona, este fue el último. Me acuerdo perfecto: me paré frente a la laguna y miré el espacio, con esa cantidad de árboles, la arena, el agua".

Luego, añadió: "Me pareció una combinación de elementos bellos que hicieron que yo lo sintiera con una energía especial. Ese día, el sol pegaba de una manera ideal. Por eso también llamé a la casa 'Corazonada', porque dije: 'Es este lugar, no hay forma de que sea otro'".