De CDMX a Mazatlán: 4 casos de gentrificación y extranjeros

CIUDAD DE MÉXICO, abril 12 (EL UNIVERSAL).- En los últimos meses se han viralizado diversos casos que han causado indignación en la población mexicana y catalogados como ejemplos claros de los problemas que puede ocasionar la gentrificación.

De acuerdo con la ONU, la gentrificación sucede cuando un proceso de renovación y reconstrucción urbana se acompaña de un flujo de personas de clase media o alta que suele desplazar a los habitantes más pobres de las áreas de intervención.

Uno de los casos más recientes fue el del restaurante "Gaby's", localizado en el centro de Puerto Vallarta y el cual cuenta con 35 años de antigüedad.

El dueño del restaurante, el chef Julio Castillón detalló que extranjeros quisieron clausurar su negocio por tocar música mexicana en vivo, argumentando que la música "afecta su calidad de vida".

De acuerdo con Castillón, los demandantes de origen americano, compraron una residencia al lado del restaurante y poco a poco fueron expresando su inconformidad hasta que recurrieron a términos legales. Como respuesta y apoyo al local se realizó una manifestación acompañada de mariachis.

Otro caso reciente sucedió durante el eclipse solar, cuando un grupo de extranjeros corrieron a locales de un mirador en Durango, argumentando que habían rentado el lugar exclusivamente para ellos.

En un video que fue difundido por 'Espacio Libre México', muestra el momento en que una mujer extranjera, aparentemente de nacionalidad estadounidense, solicita a los ciudadanos mexicanos abandonar el mirador. El gobierno del estado negó que el lugar fuera apartado para extranjeros.

Otro momento de tensión sucedió cuando hoteleros de Mazatlán expusieron que la música de banda es un "escándalo" que afecta al turismo extranjero.

El empresario, Ernesto Coppel, presidente de Grupo Pueblo Bonito Golf & Spa Resorts expresó que turistas estadounidenses han declarado que no regresarían a Mazatlán debido al ruido "por el escándalo y el ruido que provoca que tengan una proyección de destino turístico chafa", calificó.

Ante el escándalo residentes de Mazatlán se manifestaron afuera de los hoteles con música de banda para exigir se respete su cultura y trabajo.

Otro momento que causó indignación fue cuando una modelo extranjera pidió a sus seguidores no darles dinero a los organilleros de la Ciudad de México.

La mujer identificada como Breanna Claye y quien reside en la capital del país se quejó de los organilleros y los calificó como "contaminación auditiva".

Ante el escándalo ofreció disculpas y aseguró que no conocía el trasfondo histórico cultural de los organilleros.