Cecilia Milone y Nito Artaza, en crisis: romance secreto, peleas, amenazas, reconciliaciones y una historia sin fin
Entre idas y vueltas, la historia de amor de Cecilia Milone y Nito Artaza lleva 25 años. Empezó en secreto en 1999 cuando protagonizaban Boeing Boeing en la temporada marplatense. Él estaba casado, pero el amor fue más fuerte y en esa primera etapa, la relación duró hasta 2006. Fueron siete años de encuentros a escondidas. Terminaron y volvieron muchas veces, y en agosto último, mientras ella se despedía de Drácula, en el Luna Park, tuvieron una crisis de pareja que parece no tener retorno . Durante varios meses ninguno de los dos quiso hablar del tema y ahora están dando algunas pistas sobre su intimidad.
Hace algunas semanas, Milone le confesó a LA NACION: “Estoy transitando un momento difícil… En un proceso de mucho descubrimiento, y soy muy cuidadosa de observar qué me está pasando. Es una época bisagra de mi vida. Quizá también se esté cerrando un ciclo o tenga que ver con mi edad, porque siento que todavía estoy muy activa y tengo la fuerza, pero me siento yendo hacia una vejez. Estoy viviendo un momento muy particular. No tengo tan entendido lo que me está sucediendo. Estoy de verdad en un proceso, tratando de pasarlo de una manera introspectiva… Viendo de qué se trata. En este momento necesito primero transitar lo que me pasa. Me estoy cuidando, profundamente. No puedo hablar (se emociona). Estoy revisando mi vida. Y es muy fuerte”.
Por su parte, Artaza habló en Intrusos, por América TV. “En esta discusión que hemos tenido con mi esposa nunca se habló de infidelidad. Nunca estuvimos en esa agenda. Hablamos casi diariamente con ella. Está trabajando en Porteñas, en Master Tango… Pueden ser muchos los motivos. Lo hablaremos juntos con Cecilia. Todavía estoy con el ala medio rota. Yo pongo la mejor sonrisa y me dejan como un tipo infiel. No, yo no”, contó, conmovido, y desechando los rumores de infidelidad que corrieron hace algunas semanas.
Secretos y amenazas
Muchos años después, ambos hablaron en algunas entrevistas sobre el inicio del romance. Él estaba casado con Cecilia Oviedo (madre de Leandro Artaza) y ese verano de 1999 se habló de crisis matrimonial. Fue en ese preciso momento en que algo pasó entre Milone y Nito cuando se miraron a los ojos. Se veían en secreto, primero en Mar del Plata, y luego de la temporada en Buenos Aires. Él siempre estaba a punto de separarse, pero ese día no llegaba nunca. A la decepción se sumaron las amenazas que Milone empezó a recibir varias veces por día; eran anónimos que decían “Nunca vas a ser feliz”. En los programas de chimentos de la época, la actriz decía: “ No puedo decir que Cecilia Oviedo sea quien me manda los mensajes porque son anónimos. Lo que puedo decir es que los mensajes la involucran y están redactados de tal manera que parecen escritos por ella ”. Ante el desencanto y la burla, cansada de esperar y de sostener una relación clandestina, Milone se fue a vivir un tiempo a España y el vínculo con Artaza se rompió. Sin embargo, a su regreso hubo un reencuentro y las cenizas se volvieron llamas.
Por ese entonces, y ante la sorpresa de todos, la actriz contó públicamente su romance clandestino y la respuesta fue contundente: Nito y Oviedo le iniciaron un juicio que Milone perdió años después. Así, la relación quedó totalmente quebrada y dicen que cuando se encontraban en los eventos o en algún estreno, terminaban a los gritos. Había bronca y frustración acumuladas durante años.
“I’m sorry for you, querida”
Los dimes y diretes y los encuentros y desencuentros no tenían fin. Fue cuando Cecilia Oviedo dijo la famosa frase “I’m sorry for you, querida. Yo lo lamento. Si estás resentida, andá a un psiquiatra”. Fue en el programa que entonces tenía Marcelo Polino, Ponele la firma. “ Yo no tengo la culpa si el tipo te colgó la galleta y nunca te blanqueó porque no fuiste importante. ¿Qué culpa tengo si no se jugó por vos y lo único que hacían era pasar un rato con vos porque estaba solo o aburrido? ”.
Milone no se quedó callada: “ No soy una mujer despechada. Hablo porque quiero terminar con estos dos años de amenazas anónimas. Fue un romance que duró seis años, y que mantuve oculto para proteger a quien creí el hombre de mi vida ”. Nito también habló en ese momento y minimizó la relación con Milone diciendo que eran “encuentros esporádicos” durante sus tiempos de soltero.
Con el correr de los años, Milone y Oviedo tuvieron una charla a solas y después Oviedo contó: “Hablamos, nos hicimos muchas preguntas, nos comprendimos, lloramos las dos porque pudimos entender la visión que tenía cada una desde su lugar”. A partir de entonces tuvieron un buen vínculo.
Artaza se separó de Oviedo y se puso de novio con la exGran hermano Silvina Scheffler y estuvieron algunos años juntos hasta que él se reencontró con Milone y el amor volvió a encenderlos. “Si Cecilia Milone es el amor de tu vida, andate con ella”, le habría dicho Scheffler en 2015. Y eso hizo el cómico. La reconciliación fue tan hermosa que terminó en una boda. Artaza y Milone se casaron el 25 de junio de 2017 en Bella Vista, Corrientes, ciudad natal del actor y exsenador por la Unión Cívica Radical. Los padrinos fueron Pepito Cibrián y Moria Casán, y en la fiesta con 300 invitados tiraron la casa por la ventana.
¿El amor es más fuerte?
“ Confieso que Nito Artaza es mi único amor. Tuve muchos romances en mi vida, pero amor verdadero, uno solo ”, dijo alguna vez Milone. “Cada uno se lo reconoció al otro. Muchas veces pensé en escribir un libro con nuestra historia. A veces es doloroso releerlo, porque contaba mi dolor y lo que sufríamos los dos, pero es asombroso que nunca le deseara el mal. Hoy disfrutamos de una pareja sólida. Podemos tener crisis, puedo gritar, puedo pasar épocas mejores o peores, pero no se me ocurre vivir sin Nito. Ni a él sin mí”, decía hace pocos años. Y también confesaba que le hubiera gustado ser madre, pero no encontraron el momento y el tiempo pasó. “Semejante historia de amor podría haber tenido continuidad en un hijo”.
Hace un tiempo también se habló de crisis y Artaza decía: “Se hizo una sobredimensión de una discusión. Las discusiones con Cecilia son fuertes. Fue un error mío porque ella es un amor. Cecilia es todo lo que está bien. Por ejemplo, yo puedo mirar una chica, y decir ‘Mirá, qué linda chica’ y Cecilia no dice nada, pero yo me olvido un aniversario y duermo afuera”, decía entre risas cuando ya estaba todo aclarado en la pareja.
En pandemia, cuando hicieron teatro juntos en Los ‘80 están de vuelta, en Mar del Plata, hablaron de su relación con LA NACION: “Generalmente, las discusiones con Cecilia son por el espectáculo, porque a veces tenemos criterios diferentes. Estoy acostumbrado a dirigir, tengo mi estilo pero en este caso la directora es ella y yo tengo que agachar la cabeza. Y a veces me cuesta (ríe). Nos pasó en La jaula de las locas, pero nos ponemos siempre de acuerdo porque hay mucho amor. No suelo aconsejar trabajar con la pareja, aunque ayuda, porque somos la unión de dos individualidades que nos amamos, y cada uno tiene sus proyectos personales, sus actividades”, decía él.
Milone agregaba: “Compartir el trabajo siendo pareja es algo positivo, creo yo. Tenemos las mismas discusiones que podemos tener como pareja, y que a veces son fuertes, pero también sabemos convivir con eso una vez que pasa. En general, es cierto, discutimos más que nada por trabajo. Gustavo Monje, que es nuestro artista invitado en el espectáculo y a quien conozco desde hace años, me dice que a veces discutimos diciendo lo mismo pero cada uno lo explica de una manera diferente. Nos pasa eso”. Y Nito concluía: “En el escenario nos entendemos bien porque muchas veces trabajamos juntos. Insisto, nuestras discusiones son por el espectáculo y por suerte nos ponemos de acuerdo. Soy un libriano muy conciliador, y soy político y sé que tengo que poner algo para sacar algo, y Cecilia es muy inteligente. Además, tenemos felizmente nuestro código de pareja y es que nunca nos vamos a dormir peleados. Antes de ir a la cama tenemos que encontrar un acuerdo”.
Este amor de 25 años tuvo muchos encuentros y desencuentros, discusiones, reconciliaciones, clandestinidad, secretos a voces, separaciones, duelos. Quizá no esté dicha la última palabra y todavía haya más temporadas.