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Chavela Vargas y el fugaz romance por el que la vetó el dueño de Televisa

Chavela Vargas fue una mujer que buscó la libertad para vivir, cantar y amar como ella quiso. (REUTERS/Marcos Brindicci)
Chavela Vargas fue una mujer que buscó la libertad para vivir, cantar y amar como ella quiso. (REUTERS/Marcos Brindicci)

Chavela Vargas contó que al inicio de su carrera, poco antes de la década de 1950, en su primera aparición artística se vistió muy femenina: "como toda mujer, con el cabello largo, maquillaje, tacones, no di una. Vestida como mujer parecía travesti", dijo. Así que decidió abandonar esos ornamentos y optar por pantalones, camisas y poncho, aún cuando en la calle le gritaran "marimacho".

Ella aceptó que era diferente a la mayoría de las mujeres mexicanas de hace más de medio siglo. Si bien no fue hasta después de cumplir 80 años que se declaró abiertamente lesbiana, eso no le impidió explorar su sexualidad y se dice que tuvo romances con Frida Khalo, la estrella hollywoodense Ava Gardner y con la hija de un expresidente guatemalteco, Arabella Árbenz, por quien, presuntamente, fue vetada en México al hacer enfurecer a un "Tigre".

Arabella Árbenz, hija de Jacobo Árbenz Guzmán, era modelo y actriz. La relación con su familia fue complicada, principalmente por la ideología política de su padre, afín al socialismo, y cuando el mandatario fue depuesto, se exiliaron primero en México y después en Uruguay y Rusia, acercándola a lo que más odiaba en ese momento.

Fue en Rusia donde la joven empezó a experimentar su bisexualidad, de acuerdo con cartas enviadas a su hermana Leonora que están archivadas en la Biblioteca General de Guatemala. En ese epistolario revela que el género de las personas con las que se relacionaba era lo de menos, lo importante era lo que ellos o ellas le podían proporcionar para seguir con el estilo de vida a la que estaba acostumbrada.

Cuando estudiaba en Francia en 1963 conoció a Emilio Azcárraga Milmo, el Tigre, antes de convertirse en el heredero de Televisa, y él la acercó a un nuevo círculo de intelectuales e influyentes de México, entre los que se encontraba la mismísima Chavela.

Jorge Palmieri, periodista guatemalteco y examante de la modelo, asegura que cuando Anabella filmaba la película ‘Un alma pura’, Vargas comenzó a rondarla. "La lesbiana que más la acosaba, constantemente, era la cantante folclórica Chavela Vargas, una mujer muy hombruna, muy vieja y muy fea, nacida en Costa Rica en el año 1919 con el nombre de Isabel Vargas Lizano", escribió. Según él mismo, la cantante logró conquistar a la actriz y sostuvieron un encuentro en el hotel María Isabel de Ciudad de México.

Al enterarse de esto, Azcárraga Milmo habría movilizado todos sus recursos para apartar a la cantante de los escenarios, según cuenta Alicia Pérez Duarte, la última pareja de Vargas, en el documental 'Chavela'. "Estaba literalmente vetada por Azcárraga, y según me contó que la había vetado porque le bajó a la novia, entonces cómo iba a aceptar que la señora siguiera cantando para Orfeón cuando le había bajado la novia". Rogerio Azcárraga Madero, dueño de la disquera, habría concedido el veto en favor de su primo, el Tigre Azcárraga.

Otra versión de este fugaz romance sugiere que Azcárraga Milmo también acabó con la carrera de Arabella y con el uso de sus influencias, logró que la expulsaran de México.

Extraoficialmente, la presión de Azcárraga Milmo la obligó a alejarse de los escenarios; la versión oficial alude a sus problemas de alcoholismo que ya afectaban su carrera. La ausencia provocó que muchos creyeran que estaba muerta a principios de la década de 1990, pero conocer al cineasta español Pedro Almodóvar que la ayudó a presentarse en Francia y España logró un renacimiento de la macorina. La fama la abrazó de nuevo, hasta el día de su muerte en 2012.

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