Yahoo Estilo Este es el color de la primavera y no hay quien lo discuta
La particular batalla que se libra cada temporada en la paleta cromática por salir victorioso tiene ya ganador. Al menos en lo que concierne a la primavera porque a estas alturas ya no hay quien discuta que es el naranja el que ha logrado conquistar más armarios. Puede que Pantone pusiera el foco en el Very Peri y que el fucsia haya cobrado una fuerza inexplicable, pero el estimulante naranja ha vencido. Lo cual tiene su mérito no solo por la cantidad de contrincantes ante los que se enfrentaba, sino porque contaba como punto de partida con un importante factor en contra y es lo complejo que resulta combinarlo.
Al ser tan llamativo da cierto respeto y parece que invita a ser llevado únicamente de formas conservadora con blanco, negro o piezas vaqueras, ya que no todo el mundo se atreve con el color block, que no es más que la técnica que propone mezclar un tono con otro complementario igual de frío o cálido –el ejemplo más claro está en el genial tándem que forman el naranja y el morado–. Sin embargo, ha quedado más que demostrado que no hay más que darle una oportunidad para ver todo lo bueno que puede conseguirse con él porque encaja con muchos otros compañeros.
Funciona en solitario para un resultado impactante, también como protagonista de un estampado y, como no, a través de una sola prenda que sea capaz de hacer "pop". Quizá por eso la manida frase de "el naranja es el nuevo negro" sigue en boca de tantas fashionistas aunque este nunca llegue a tener el mismo poder que el básico oscuro al que alude.
Sobre la pasarela hemos visto el naranja declinado en prácticamente todas las tonalidades, desde las más suaves hasta las más ácidas, condensadas todas ellas en un mismo estilismo como vimos en el desfile de Stella McCartney o simplemente salpicando algunos looks gracias a los complementos como pueden ser bolsos o zapatos. No se han puesto de acuerdo, por tanto, en cuál es la intensidad de naranja que merece más atención, simplemente se han limitado a abrazar este color en cualquiera de sus bellas formas.
En lo que sí han llegado a un consenso es en que no es una tendencia pensada solo para los meses de calor, también de cara al próximo otoño-invierno promete buenos momentos. Firmas como Chloé, Erdem o Gucci así lo han propuesto en sus respectivas colecciones rebajando vivazidad al tono.
De momento, esta fiebre por este vitaminado color se ha notado (y mucho) estas últimas semanas en las calles de todo el mudno pero, sobre todo, en lo que mejor nos sirve para tomar el pulso a determinada moda, Instagram. Pocas son las influencers o famosas que no han probado suerte con el naranja en su ropa, pero todavía son menos las que no lo han hecho en su manicura –las uñas en este tono son las más repetidas últimamente– o en su pelo, ya que no hay que olvidar que el bautizado como "blorange", a medio camino entre el rubio y el pelirrojo anaranjado, es uno de los más demandados en las peluquerías en lo que llevamos de 2022.
Curiosamente entre las prendas que más se han visto teñidas por esta tonalidad no encontramos los vestidos, más bien los trajes, los pantalones informales con los que sustituir a los jeans y los tops, siendo todos ellos el mejor reflejo de que su radio de acción no tiene ningún límite.
Hemos mencionado los contras de los que partía pero no sus virtudes, que son las que le han llevado al triunfo, Porque entre las razones que explican el éxito del naranja en estos tiempos, más allá de lo obvio por ser coronado como rey por las expertas, se encuentra el chute de energía que aporta de manera instantánea a quien lo luce. Es capaz de llenar de luz cualquier estilismo y eso es algo innegable, como también lo es que consigue rejuvenecer a quien lo luce por ese poder estimulante del que presume. Un efecto dopamina que es motivo suficiente para amar el naranja frente a cualquier miedo.
Más historias que te puedan interesar
VÍDEO: Una ex modelo de Victoria Secret demuestra con un sujetador las presiones que tuvo que aguantar
