Sean Combs se queda sin el reality acerca de su familia que ya había empezado a grabar

Sean Combs con su hijo Justin Dior Combs credit:Bang Showbiz
Sean Combs con su hijo Justin Dior Combs credit:Bang Showbiz

Hulu ha decidido que no es el mejor momento para grabar un reality show al más puro estilo de los Kardashian, pero centrado en la familia del rapero Sean Combs. La plataforma de streaming ha sido la última en una larga lista de compañías que han decidido cortar toda relación comercial con la estrella del hip-hop tras las acusaciones de malos tratos y abusos sexuales que han realizado en su contra cuatro mujeres diferentes, entre las que se encuentra su antigua pareja sentimental Casandra 'Cassie' Ventura.

No está claro cuándo se tomó la decisión de archivar todo el proyecto, pero no puede ser ninguna casualidad que haya sido justo ahora.

El programa llevaba por título provisional 'Diddy+7', en referencia a los siete hijos que Combs tiene con cuatro mujeres diferentes, y estaba siendo producido por Fulwell 73, la productora de James Corden. A principios de este año se le vio en público seguido por un equipo de cámaras, como hacen a menudo las hermanas Kardashian-Jenner cuando se encuentra en pleno rodaje de una de sus temporadas, aunque en el caso de Combs, parece que todavía quedaba mucho por hacer, según aseguran varias fuentes conectadas directamente al proyecto.

Combs ha dejado de ser un reclamo atractivo para las marcas, que han roto sus contratos comerciales. A pesar de que ha mantenido su inocencia en todo momento, él decidió renunciar voluntariamente a su puesto como presidente de Revolt Media. La compañía de licor Diageo está dispuesta a llegar hasta los juzgados para impedir que sea la imagen de su próxima campaña publicitaria, y varias empresas de emprendedores negros han roto lazos con Empower Global, la plataforma de comercial online que él puso en marcha en 2022.

Cassie Ventura presentó una demanda contra Combs el mes pasado donde alegaba que había abusado de ella en múltiples ocasiones y que la había obligado a mantener relaciones sexuales con trabajadores sexuales. Otra mujer -cuya identidad se ha protegido en su correspondiente demanda- alega que en 1991 Combs la drogó, la violó y grabó en vídeo la agresión, para mostrarle después la cinta a unos amigos. Otra demanda afirma que Combs y el artista de R B Aaron Hall se turnaron para agredir sexualmente a dos mujeres en los noventa y que Combs atacó a una de ellas días después en su casa.

En el caso de Cassie, Combs llegó a un acuerdo fuera de los juzgados en menos de 24 horas, cuyos detalles no han trascendido, aunque él se apresuró a asegurar que el hecho de que hubiera firmado un acuerdo no socava en modo alguno su rotunda negación de todas las acusaciones.