Así concibió Salma Hayek su papel como Frida Kahlo en el cine

CIUDAD DE MÉXICO, abril 28 (EL UNIVERSAL).- Salma Hayek volvió a ponerse en los zapatos de Frida Kahlo, durante su aparición en el último concierto de Madonna en México, como lo hizo hace 22 años, cuando en 2002 protagonizó "Frida", la película en la que Julie Taymor retrata la historia de amor que existió entre la retratista mexicana y el muralista Diego Rivera, un proyecto que supuso gran complejidad para la actriz, como ella misma lo reconoció en aquella época.

A pesar de que "Frida" se estrenó en el otoño del 2002, Salma ha confesado que fue una producción que requirió de siete años de trabajo para que pudiera ver la luz.

Para la actriz mexicana, Kahlo es una de sus heroínas, por lo que enfrentarse a trabas creativas, llegó a pensar que lo mejor era no rodar el proyecto que persiguió por más de un lustro:

"Podría haber hecho la película hace cinco años, tal vez hace seis años, pero nunca sentí que todos los elementos estuvieran ahí, quería hacer una película sobre Frida Kahlo, pero quería hacer la película ´correcta´ sobre Frida Kahlo o no hacerla", dijo en una entrevista, concedida en 2002, en San Francisco.

De acuerdo con las declaraciones de Salma, las y los creadores de la película trabajaron con 25 borradores, nueve de ellos escritos por Edward Norton, antes de elegir el que llevarían a la gran pantalla.

Las aspiraciones de la actriz, que en esa época tenía 36 años, no eran las de crear una película que hablara de la vida de Frida Kahlo, sino de algunos de los pasajes de que atravesó.

Mientras estudiaba la posibilidad de pilotear el proyecto, pues cabe destacar que -además de ser la protagonista- fue productora de la cinta, Hayek recordó la película biográfica de Mozart, dirigida por Milos Forman.

Para Salma, Milos supo plasmar los sentimientos que rodeaban el entorno del compositor austríaco; la envidia.

En su caso, trataba de contar no sólo la vida épica de Kahlo, sino profundizar en las cualidades humanas de su existencia para, de ese modo, la audiencia se identificará con ella. En este caso, le importaba retratar la historia de amor entre la pintora y Rivera.

En ese momento, también se sinceró al reconocer que su desnudo en la cinta fue muy más cómodo que aparecer en otra clase de cintas con un "vestuario sensual", que la sexualizaba, pues en "Frida" se trataba de retratar una realidad; la forma apasionante en que la pintora se entregaba al amor.

"Y te diré que hay desnudos en esta película, pero me sentí mucho más desnudo y avergonzado usando ese estúpido disfraz de "Wild Wild West!", tenía que salir del remolque todos los días, no puedo expresar cuán mortificante fue eso en comparación con estar completamente desnudo, en la cama con otra mujer, porque en esta circunstancia particular era muy orgánico para la historia que estábamos contando, e increíblemente importante para decirte realmente quién era esta mujer. Entonces te hace sentir menos desnudo porque no es gratuito, no es explotación".

Todo esto convirtió a "Frida" en el reto más complejo al que la actriz se enfrentó hasta ese momento, sin embargo, lo que más sorprendió de sus declaraciones es que afirmó que, y que, probablemente, sería la cinta más compleja en la que trabajaría sin importar el paso del tiempo.

"¿Honestamente?, definitivamente es el personaje más complejo que he interpretado jamás y quizás el personaje más complejo que jamás interpretaré", precisó.

Sin embargo, destacó que hubo otra cinta que consideraba como "la más desafiante"; se refería a "From Dusk Till Dawn", la película en la que aparece bailando con una serpiente entre sus hombros, pues Salma recordó que tuvo que perderle el temor a una especie que la intimidaba, así como se dio a la tarea de ver ese baile como un ritual donde conectaba poderosamente con el reptil.

Otras y otros grandes actores que aparecen en esta película son Alfred Molina (Diego Rivera), Antonio Balderas (David Alfaro Siqueiros), Edward Norton (Nelson Rockefeller), Ashley Judd (Tina Modotti), Mía Maestro (Cristiana Kahlo), Diego Luna (Alejandro Gómez Arias), y Geoffrey Rush (León Trotski).