Confusión eléctrica: a la clásica banda musical de los Muppets esta vez la eligieron solo para acompañar

Los Muppets tratan de ponerle música a un programa con letra ajena a ese mundo
Los Muppets tratan de ponerle música a un programa con letra ajena a ese mundo - Créditos: @Captura

Muppets Mayhem: Confusión eléctrica (The Muppets Mayhem, Estados Unidos/2023). Showrunners: Bill Barretta, Adam Goldberg y Jeff Yorkes. Fotografía: Craig Kief. Música: Mick Giacchino. Elenco: Lilly Singh, Dave Goelz, Eric Jacobson, Peter Linz, Bill Barretta, David Rudman, Matt Vogel, Saara Chaudry. Disponible en: Disney+. Nuestra opinión: buena.

Cada regreso de los Muppets es una bendición. Qué estén de vuelta con el plantel completo o, como en este caso, a través de un puñado de personajes interactuando con seres de carne y hueso en una sitcom hecha y derecha funciona como elemento liberador y antídoto para toda clase de rutinas y convenciones.

Esto es algo que no cambió desde que Jim Henson puso en movimiento a sus creaciones allá lejos, en 1976. Aunque el control de este mundo haya cambiado varias veces de manos, la esencia está intacta. Esté quien esté detrás de cada muñeco: ningún otro lugar de la creación audiovisual nos ofrece un ticket completo de entrada a un universo que da vuelta por completo al nuestro a partir del caos, del delirio y de una lógica incomprensible.

Al mismo tiempo nadie es capaz como los Muppets de facilitarnos el viaje de vuelta a la “normalidad” después de esa visita con una actitud más tierna, feliz y bondadosa. La pequeña temporada que pasamos junto a ellos y a su extraña lógica en medio del desbarajuste total funciona como remedio perfecto para curarnos de casi todos nuestros males. Es una terapia, lo sabemos de sobra, que además cree en el mejor humor posible.

El único problema de este regreso es que el mundo de los Muppets y el de los seres “normales” que coexisten en esta nueva serie no terminan de compatibilizarse del todo. Y durante más tiempo que el recomendable ambas realidades terminan por rechazarse. Por eso Confusión eléctrica funciona solo por impulsos y no tiene la dinámica constante y contundente que identifica a las grandes producciones concebidas alrededor de estos personajes.

La trama de esta nueva serie de Disney+ transcurre en el mundo real y aquí los Muppets son meros invitados. Llegan desde afuera en vez de activarse como núcleo del relato, como viene ocurriendo desde siempre. La verdadera protagonista es Nora (Lilly Singh, la joven canadiense que se convirtió en actriz después de hacerse conocer como youtuber), ejecutiva de un sello discográfico venido a menos necesitado de un gran golpe de efecto para sobrevivir en medio de la decadencia de esta actividad. Allí es donde aparece la banda para tratar de salvar la causa.

El único recurso que encuentra a mano es la convocatoria a la imperecedera banda de rock muppet que tiene como líder al siempre optimista Doctor Dientes (o Dr. Teeth) y en la que aparecen la blonda cantante Janine, el bajista Floyd Pepper, el trompetista Lips, el saxofonista Zoot (con los eternos rasgos de nuestro Gato Barbieri) y el impagable Animal, un baterista todoterreno.

Cada vez que el grupo toma el control de la situación y transforma a su modo todo lo que tiene enfrente, Confusión eléctrica es puro disfrute. Como pasa siempre cuando los Muppets entran en acción, los gags son tan precisos que al unirse quedan configuradas algunas situaciones perfectas en cuanto al efecto humorístico y el contraste con la realidad convencional.

Lo vemos, por ejemplo, durante la convivencia de la banda en una casa californiana o cuando un despechado Animal sale a buscar trabajo. Los momentos que el baterista comparte con el gran comediante Ben Schwartz, aquí a cargo de una agencia de empleo, son de pura cepa muppet al 100%. Lo mismo pasa cuando Animal revela un inesperado talento para la cocina del Extremo Oriente o expresa su fascinación por Nora.

Todos estos buenos momentos aparecen subordinados a otras necesidades, bastante menos llamativas e interesantes. Las que se imponen en Confusión eléctrica cuando el protagonismo lo tiene la peripecia de Nora: sus problemas para salir adelante, una elección de vida que no parece adaptarse al mundo de hoy, las discusiones con su hermana y el regreso de un antiguo novio que además maneja negocios no muy virtuosos en el mundo de la música.

Este aspecto de la trama, que suele ser el preponderante en la serie, abunda en clisés, resoluciones fáciles, lugares comunes y frases aleccionadoras. Todo lo contrario a la identidad del universo Muppet. A veces quedan disimuladas por las ingeniosas ocurrencias de los muñecos, siempre dispuestos a dar vuelta todo. Y también nos ayuda a olvidarnos de ella la permanente y casi siempre divertida aparición de personajes famosos interpretándose a sí mismos en breves cameos.

Cuando los Muppets son nada más que los simpáticos invitados de una celebración ajena, por más amable que sea ese encuentro, siempre nos quedará sabor a poco. Pero nos queda el consuelo de que andan todo el tiempo por allí, listos en todo momento para convertirse en protagonistas y llevarnos de nuevo a su mundo caótico y feliz.