Coti, de Gran Hermano: cuál cree que fue su error de juego, por qué busca la eliminación de Alfa y a qué mujer quiere ver como la ganadora

Coti en su salida de Gran Hermano
Coti en su salida de Gran Hermano - Créditos: @ADRIAN DIAZ BERNINI

Cada edición de Gran Hermano deja jugadores y jugadoras para el recuerdo, nombres que emplearon estrategias que despertaron odios y amores por igual. Y durante su estadía en la famosa casa, Constanza Romero tuvo mucho de eso. Acusada de traidora por sus pares y por buena parte del público, la correntina empleó una lógica de juego muy audaz, en la que apostó el todo por el todo. Y aunque el último domingo ella fue eliminada, es muy probable que su nombre quede asociado durante años a la historia de este reality.

En una nota con LA NACIÓN, Coti confesó cuál fue su error en el juego, qué espera de su vínculo con Alexis, y por qué quiere que esta edición la gane una mujer.

-Vos hablás mucho de las estrategias que usabas, y das ejemplos claros. ¿Sentís que eras la única en la casa que realmente estaba jugando?

-Yo percibía que no había muchos jugando, solo veía gente conviviendo normalmente como si estuvieran en su casa, aunque quizá ese era su juego. Yo me tenía un poquito de fe afuera, porque había ido a jugar y las estrategias las pensaba cuarenta mil veces antes de hacerlas. Pero a mí me juzgaron un montonazo, quizá porque la gente no sabía las internas, y ahí yo pifié en no contarle más a la gente, en no hablarle a las cámaras. Yo pensaba que todo se entendía, es más, siempre me decían que yo era caprichosa y celosa, pero eso lo usaba porque quería que la gente adentro me viera como una nena y no me percibiera como una potencial jugadora. Sin embargo, se ve que al afuera eso no le gustó mucho, y lo tomaron como si yo fuera realmente así... Esos son los riesgos de jugar fuerte.

-¿Entonces dirías que tu gran error fue jugar solo para el adentro, sin tener en cuenta el afuera?

-Claro, mi error fue el no involucrar tanto al público, contándole cómo iba a hacer las cosas. Me confié con que la gente iba a entenderme y no pensé en eso, porque estaba todo el día metida en el juego del adentro. Igualmente me siento bien con lo que hice, aunque hubo a quienes no les gustó mi juego y eso es válido, obviamente.

-¿Pensás que los televidentes no vieron con buenos ojos las estrategias que usaste? ¿Creés que solo hay ganas de ver gente conviviendo y llevándose bien?

-Sí, pienso que es así. Este año noto que a la gente no le gusta mucho el juego. Al único que veía como jugador era a Agustín, que hacía distintas estrategias adentro de la casa, pero que terminó yéndose antes. Eso me parecía raro, pero pensé que quizá había otras razones por las que lo habían eliminado, y yo seguía adelante, segura que a la gente le gustaba mi tipo de juego. Entonces, cuando me sacan, me doy cuenta que todo estaba muy raro, que el público prefería ver algo normal, con gente conviviendo. Igual yo me siento orgullosa de haber jugado y sé que voy a perdurar en el tiempo, porque aunque no gané, sé que la gente va a recordar mi paso por Gran Hermano .

-Vos insistís con que la mayor parte del tiempo no eras como te mostrabas. ¿En qué momentos sí sentías que eras cien por ciento vos?

-Cuando me sentía un poquito triste con cosas que me sucedían, o cuando Alexis me contenía, esos eran momentos en los que era cien por ciento yo. Aparte no tengo tanta energía como para sobreactuar todo el tiempo (risas). Pero en esos momentos en los que me apagaba un poquito más, ahí sí sentía que era yo.

-¿Qué esperás a futuro de tu relación con Alexis?

- Aunque vi comentarios que no me gustaron mucho y me hicieron sentir un poquito mal, me reconforta un montón saber que cuando él salga nosotros vamos a seguir. Alexis me demostró que es muy sincero, y yo lo quiero muchísimo. Obviamente que cuando uno se enoja dice cosas que realmente no piensa, y yo me enojé con él y por ahí dije “no quiero saber más nada”, pero son cosas que uno realmente no siente. Entonces me quedo con lo bueno que pasamos, con lo que me hizo sentir y con lo que sé que siente él. Yo me veo en un futuro con Cone, y espero que sea así, me encantaría.

-A varias semanas del episodio en el que Alfa te hizo ese gesto desagradable, ¿qué balance hacés de ese momento? ¿Sentís quizá que se te puso en un lugar injusto con respecto a cómo te manejaste y cómo representaste a las mujeres?

-Me parece muy injusto cuando me dicen que tendría que haber hecho otra cosa, porque esto es un juego, y en ese marco todo es válido. Claro que eso no significa que yo no haya pensado que lo que pasó es lo peor que hay. Pero dentro del juego es distinto, porque hay cosas que sabía que iba a tener que hacer, aunque no me gustaran, si es que mi idea era ganar. Por otra parte, no considero haber representado mal a las mujeres. Yo siempre dije, incluso en mi casting, que esta edición quería que la gane una mujer. Obviamente que me hubiera encantado ganar, y aunque eso no va a poder ser, igual quiero que gane una mujer. La mayoría de los Gran Hermano los ganaron hombres, y este año sentía que había muchas chances para que eso no fuera así. Mi intención era representar a la mujer como alguien inteligente, capaz de jugar , y me hubiera gustado ganar para que dijeran que una mujer puso todo de sí, que tuvo estrategias, que fue inteligente, y tuvo agilidad mental.

-¿Y también buscaste enganchar a Alexis como parte de tu estrategia?

-En realidad yo no quería enamorarlo, solo buscaba acercarme a él, entrarle por el lado de contarle mi vida, darle ese voto y así poder ganarme su confianza, pero no para enamorarlo. Y al final me enganché, aunque no me arrepiento porque fue muy lindo. Y se lo dije, que si él no hubiera estado ahí, yo no hubiera podido hacer lo que hice, porque la contención que me dio fue muy fuerte y muy importante.

-Y de las mujeres que siguen en juego, ¿quién querés que gane?

- Quiero que gane Romi, por sus hijas, porque sé que le pone mucho empeño. Yo la conocí, y a pesar de que tuvimos un desencuentro grande, y que escuché comentarios muy feos que hizo sobre mí, creo que hay que separar lo que es el juego. Me gustaría que gane ella, se lo merece

-Volviendo a Alfa, ¿por qué sentís que tiene tanto apoyo afuera, a pesar de las cosas que dice o hace dentro de la casa?

-Él tiene sesenta años, es un hombre más grande y se le perdona todo. Lo que vi un montón de veces es que él siempre se victimiza, incluso en la cena de nominados, cuando le dije que me había perseguido por todos lados, yo le hablé de su hija y ahí me di cuenta que hacía eso. Su juego es victimizarse, la gente lo compra, pero se tiene que terminar. Él también hizo comentarios gordofóbicos, machistas y homofóbicos que no me parece que estén buenos que salgan en la tele.

-Vos fuiste materia de muchos memes, algunos hechos con saña y otros con mucho sentido del humor. ¿Pudiste ver algunos?

-Vi varios y me reí con todos, me encantaron. Hay algunos que dicen que soy la novia de Chucky, o la enana diabólica y aparezco con un cuchillo, y me hicieron reír un montón. Con todos los memes me llevo algo muy lindo.

-¿Qué podés contar con respecto a cómo era tu vida antes de Gran Hermano?

-Yo no vivía con mi familia, ellos viven en Caá Catí, un pueblito del interior de Corrientes, y yo estaba en Corrientes Capital, estudiando kinesiología. Antes de Gran Hermano me encontraba en época de parciales, estaba a full con el estudio, y también trabajaba de influencer en Corrientes. Yo andaba de acá para allá, haciendo fotos, videos, y también cursando. No tenía mucho tiempo para nada, y me la pasaba todo el día con el celular; eso fue algo que me gustó de entrar en la casa, no tener el teléfono no me afectó, ni siquiera lo extrañé.

-¿Y hay algo que quizá no pudiste mostrar en el reality y te gustaría que el público supiera de vos?

- Creo que la parte que me gustaría que conozcan de mí, es que yo soy una persona muy sobreprotectora con mis amistades y con la gente que quiero. Soy muy leal y es irónico, porque en la casa no fui para nada lo que soy yo , porque todo lo vi como un juego. Pero en mi día a día, si vos me brindaste tu ayuda, me hiciste sentir bien o de alguna forma me defendiste, yo no voy a ir en contra tuyo jamás, te voy a apoyar. Y esto es algo que recalco de mí, porque me gusta y mis amistades más cercanas saben que soy así. Entonces digo: “Bueno, no soy mala persona como dicen”, y sé que a mí no me va a definir lo que hice adentro de la casa, porque eso fue un juego.