Daniela Darcourt es la peruana que empezó 'versionando' a Nodal, y ahora va por el Latin Grammy

No es ninguna improvisada. Estudió canto en la Universidad Nacional de Música del Perú y ballet en el Centro Cultural de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, pese a ser de origen humilde.

Las carencias económicas de su familia la llevaron a trabajar desde pequeña como animadora, actriz y bailarina en fiestas infantiles. En esa época, cobraba solo 10 soles (es decir, menos de tres dólares) por cada actuación.

Todo esto le brinda desde ya un merecido sentido de legitimidad a Daniela Darcourt, una artista peruana que, además de haberse convertido en una de las estrellas más populares de su país de origen, no ha pasado desapercibida en los Estados Unidos, aunque le ha tocado presentarse hasta el momento en clubes orientados a audiencias muy específicas.

Esta situación podría cambiar en los próximos meses, marcados por la ventaja incuestionable que le ha dado su primera nominación al Latin Grammy en la categoría de Mejor Álbum de Salsa gracias a la producción “Catarsis” (2023). La decisión de la Academia Latina de la Grabación se hará pública el próximo 16 de septiembre en la ciudad española de Sevilla, donde se desarrolla el evento.

En la entrevista con Los Angeles Times en Español que puedes encontrar a continuación tanto en versión de video como de texto, la joven limeña habla del momento que atraviesa, de lo que le costó obtener lo que tiene, de su estilo musical y de la compleja situación que atraviesa su país.

Daniela, ser nominada al Latin Grammy es un logro inmenso para ti, pero me llama la atención que se haya dado gracias a “Catarsis”, que es un EP.

Lo hice así por el tema de los presupuestos, porque soy una artista independiente y no tengo un sello grande que me respalde. Pero todo funcionó a nuestro favor, y aquí estamos.

Me imagino que eso también tiene que ver con el hecho de que los EPs se han vuelto sumamente comunes por la manera en que funciona actualmente la industria.

Yo creo que el mundo urbano nos ha dado como latinos algo más práctico, más rápido, que no implique tener que grabar 10 o 12 canciones, como se hacía anteriormente.

La categoría en la que te encuentras tiene algunos nombres de mucho peso, como el Grupo Niche y Gilberto Santa Rosa.

Imagínate, hay mucho pan por rebanar. Yo estoy feliz de poder decir que me encuentro al lado de grandes maestros, colegas y, sobre todo, amigos. Los conozco casi a todos. Al maestro Willy García; a la gente del Grupo Niche, que me trata con mucho cariño; a Gilberto Santa Rosa; a Jeremie Bosch, y a Alain Pérez, quien produjo de hecho mi álbum anterior.

Es una lista donde me siento cómoda. Además, estoy orgullosa de ser la única mujer latinoamericana que está ahí, representando a todas las damas hermosas que quieren cumplir un sueño como éste.

También es interesante que los artistas peruanos están siendo nominados cada vez más al Latin Grammy. Estás tú, Susana Baca, el Septeto Acarey, Kayfex y Flor Bromly, que es una peruano-americana. 

Es que la Academia ya nos tiene en el radar. Me emociona mucho que Perú tenga este tipo de emociones, porque nos las merecemos. Hay mucho talento; hay mucha gente que trabaja duro, que se esfuerza y que merece destacar.

https://youtu.be/2ljWYdu0ad4

El Septeto Acarey practica una vertiente de la música afroantillana distinta a la tuya. La salsa es un género extremadamente popular en Perú, pero no ha pegado tanto internacionalmente. Es importante que tenga ahora a dos artistas nominados.

Uno se da a conocer de diferentes maneras. Yo celebro los tres ‘covers’ que me abrieron las puertas en mi país, es decir, “Probablemente”, “Adiós, amor” y “A esa”. Los dos primeros son originales de Christian Nodal, quien, después de eso, me invitó a cantar “Probablemente” a su lado durante el primer concierto que dio en Lima.

No sabía que Nodal era popular en Perú.

Christian pego aquí por mis versiones. No se escucha mucho la música regional mexicana en esta parte del mundo. La vida me devolvió este favor con él, que es súper lindo, joven y maravilloso. Acaba de ser papá; lo felicito mucho. Recibió con mucho cariño mi propuesta, porque se trataba de una versión diferente a la suya, en otro género y con otro estilo.

Tengo entendido que llegó un momento en el que decidiste dejar los ‘covers’ para poder avanzar como artista.

¡Pero yo solamente hice tres! Lo que pasa es que pegaron mucho y la gente empezó a pensar que solo hacía eso. Me llamaban ‘Darcovers’; imagínate. Yo no tengo ningún problema con eso, porque artistas de la talla de Michael Jackson, Luis Miguel y Marc Anthony han hecho álbumes de versiones adaptadas a sus propias fórmulas.

El tema bandera de “Catarsis” ha sido “Vienes y me lloras”. Es una canción fuerte, donde aparecen algunas palabras altisonantes. Pero eso no es lo que sueles hacer en tus letras. Parece que le tenias un cariño especial a la persona a la que le dedicaste la canción [risas].

Sí, le tenía que llegar el mensaje de todos modos. Creo que le llegó, y la gente también lo recibió así. Me decían: “No eres una cantante vulgar ni nunca lo has sido, pero te salió chévere mandar a la ‘miércoles’ a alguien de ese modo”.

¿Fue un poco arriesgado hacerla así?

Sí, claro. Lo pensamos una y otra vez, porque a mí me escuchan también los niños. Pero creo que los tiempos han cambiado. Los papás de ahora son más jóvenes, tienen otro tipo de mentalidad. Y tampoco es que la canción entera vaya por ese lado.

Me imagino que le ha gustado también a la gente porque eso le da cierta identidad barrial, que es importante para un género como la salsa.

Imagínate; la salsa es calle, es reclamo, es vivencia, es esquina. Entonces, ¡toma!

Al escuchar las canciones de este disco, se podría pensar que estás muy frustrada con los hombres. Y uno de tus éxitos anteriores, “Señor Mentira”, iba por el mismo lado.

Todas las canciones que hago tienen que ver con mi vida, porque yo muestro en mis canciones lo que me pasa. Una cosa es que te diga que los chanchos vuelan y otra es que los veas. Trato de ser lo más honesta y lo más transparente que sea posible para que la gente siga enganchada conmigo.

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Entonces, ¿todos los hombres son malos? 

La verdad es que no todos. Hay excepciones. Pero la gran mayoría lo son, por no decir el 98.9 por ciento.

Por el lado de la calle, del barrio, hay un montón de discusiones sobre cuál es el estilo de salsa más legítimo. Lo que tú haces me suena bastante internacional. Tienes ese rasgado de garganta que viene del R&B. ¿Qué crees tú que haces en términos musicales?

Hago lo que mejor sé hacer: pararme, cantar y comunicarme con la gente. También trato de hacer un poco de show, trato de que el público se mate de la risa, trato de que sientan que me interesa lo que les pasa. Siento que soy una luciérnaga llena de música y de energía, y que hasta que no bote toda la energía que tengo, no voy a estar tranquila. Soy súper eléctrica.

Pero en términos de estilo, ¿haces timba, salsa romántica, o una combinación de diferentes cosas?

Creo que es una combinación. El rasgado en la garganta viene del latin jazz, del R&B, del soul, del gospel que practiqué varios años cuando era pequeña. Y tengo mucha influencia latinoamericana, porque he hecho desde joropos hasta pasillos. No siento que me identifique solamente con una cosa. Yo, más allá de querer ser una cantante de salsa, quiero que se me considere una intérprete que puede hacer lo que quiere en el momento que quiere.

¿Cuáles son tus influencias?

En lo tropical, definitivamente, Héctor Lavoe y Celia Cruz. Luego, Michael Jackson, Whitney Houston y Donna Summer, que me han acompañado desde niña. Me motiva muchísimo creer que en algún momento voy a llegar al nivel al que ellos llegaron.

¿Cómo has ido evolucionando en términos de composición? Sé que inicialmente cantabas temas escritos por otros, más allá de los ‘covers’. Pero eso ha cambiado.

Antes, no me atrevía a componer; solamente tenía ideas que ponía en textos larguísimos. Pero después de eso, me atreví. Empecé como coautora, con amigos. Pero ya tengo temas inéditos propios. De todos modos, quiero seguir trabajando en campamentos de composición, porque me parece interesante aterrizar ideas. A veces, uno tiene algo muy parametrado en la cabeza. Siento que estoy en un momento de descubrimiento muy importante en lo que respecta al lado de la composición y la producción.

Te criaste en el barrio popular de La Victoria y tuviste que recorrer un camino difícil. Pero no veo que hayas hecho letras de salsa dura, con cuestiones más sociales.

En mi próximo álbum sí quiero hablar de algo así, direccionado a la problemática que pasa el mundo entero con el tema de violencia, con el tema del cuidado de los niños. Como tú dices, sería algo más social, relacionado a la rudeza que tiene la calle, a las posibilidades que tienes como artista para levantar la voz y analizar algo.

La situación política en Perú es complicada, pero tú no has querido involucrarte mucho en esas discusiones. Hasta la selección de fútbol se ha metido en enredos por las inclinaciones que han mostrado algunos de sus jugadores.

Mi hermosa selección. ¿Qué te puedo decir? Mi país es hermoso, y lo disfruto mucho. Disfruto de su gente, de cómo sabemos atravesar las adversidades, brincar la valla y seguir adelante. Somos muy emprendedores.

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Este artículo fue publicado por primera vez en Los Angeles Times en Español.