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Dave Bautista ofrece el mejor papel de su carrera como protagonista de la escalofriante 'Knock at the Cabin'

Para ser claros, Dave Bautista podrá ser visto una vez más como Drax, el fiero guerrero gris del universo de Marvel. Pero la interpretación del personaje en manos del ex luchador profesional llegará a su fin en “Guardians of the Galaxy Vol. 3”, que se estrenará el próximo 5 de mayo.

Y es que, además de haber manifestado su descontento ante la supuesta falta de interés de los productores de la saga por darle una presencia mayor a Drax, Bautista reveló hace ya buen tiempo su interés por encontrar papeles más interesantes, lo que lo ha llevado a alejarse de las cintas de superhéroes para comprometerse con proyectos que le permitan desarrollarse realmente como actor.

Hay que recordar que él mismo intervino en tres prestigiosos filmes dirigidos por algunos de los cineastas más renombrados de la actualidad: “Blade Runner 2049” (2017), “Dune” (2021) -ambos de Denis Villeneuve- y “Glass Onion: A Knives Out Mystery” (2022), de Rian Johnson. Pero lo que el descendiente de filipinos y griegos nos ofrece ahora mismo va mucho más allá.

Y es que, desde esta noche, Bautista -quien tuvo que superar una infancia particularmente dura en los barrios pobres de Washington DC con la ayuda de su madre lesbiana antes de convertirse en ídolo de la WWW y estrella de Hollywood- se adueñará de la pantalla grande gracias a su papel estelar en “Knock at the Cabin”.

Esta no es una simple adición a la prolífica carrera del cineasta M. Night Shyamalan (“The Sixth Sense”, “Unbreakable”), sino una que viene siendo catalogada por diversos críticos como una de las mejores en la carrera de un realizador que no ha dado siempre en el blanco con sus esfuerzos artísticos.

En “Knock at the Cabin”, el actor interpreta a Leonard, líder de un grupo de personas que interrumpen las vacaciones campestres de una pareja gay y su hija adoptiva para tratar de convencerlos de hacer un sacrificio humano voluntario con la finalidad de evitar que se produzca el fin del mundo. Pese a su imponente aspecto físico, Leonard es un maestro de escuela amable y aparentemente razonable, más allá de la inaceptable exigencia que plantea ante esta familia no tradicional.

En la entrevista con Los Angeles Times en Español que puedes encontrar también aquí en su versión en video, Bautista habló de los desafíos a los que se enfrentó al interpretar a este personaje, de su trabajo con Shyamalan y con el resto del reparto, de la complejidad presente en el guion de la película y de los aspectos religiosos de la misma.

David, tu trabajo de actuación en esta cinta es impresionante. Sé que estuviste buscando roles más complejos que los que recibías durante mucho tiempo, y este va justamente por ese lado. ¿Cómo te preparaste para ponerte en la piel de Leonard?

No me preparé mucho. En primer lugar, no lo hice porque no tenía tiempo, pero también porque no soy uno de esos actores que piensan demasiado las cosas y se preparan en exceso. En la etapa inicial de mi carrera, recibí consejos de [el actor neozelandés] Temuera Morrison, quien me dijo que nunca se preparaba para las escenas, porque no quería llegar al set con la cabeza llena de ideas preconcebidas.

Si el director y los demás actores no están en la misma página y cada uno tiene sus propias ideas sobre el modo en que debe hacerse la escena, chocarás con ellos y no habrá química. [Morrison] me dijo: “Lee tus líneas antes de irte a dormir, pero no les pongas emoción; sé profesional. Y anda al set con la mente abierta, deseando ser dirigido y deseando compartir con los otros actores, porque la actuación es eso: vivir en el momento en lugar de estar sobre preparado en tu cabeza”.

Pasó lo mismo con este personaje. Me di cuenta desde el inicio de lo complejo y profundo que era, porque leí el guion, pero fui cada día al set con la mente abierta, tuve conversaciones con [el director M.] Night [Shyamalan] y seguí sus instrucciones, sin importar las que fueran. Confié en él completamente. En muchas ocasiones, aunque estuviera en contra del instinto que sentía dentro de mí, escuchaba lo que él decía y obedecía sus indicaciones. Ese fue mi proceso, y lo que ves en la pantalla es el resultado.

La manera en que la película fue filmada, con estos planos tan cerrados en varias escenas de diálogos, hizo sin duda que todo fuera más complicado para ti. No sé si sabías que iba a hacerse así, aunque, al estar filmando, te diste cuenta de dónde estaba la cámara, por supuesto. Fue un tratamiento muy personal, porque estaban literalmente en tu cara.

Claro, me daba cuenta, y era difícil; no había hecho nunca algo así. Pero estaba al tanto de los desafíos antes de empezar, porque estaba familiarizado con las películas de Night; soy un fan suyo. De hecho, nuestra primera conversación trató de eso; hablamos de sus películas y de lo que adoro de ellas. Yo sabía ya la manera en que esto iba a ser filmado y quería ese desafío, pero fue difícil.

Tuve que esforzarme mucho cada día, y Night me ponía a prueba constantemente. Eres muy consciente de lo que estás haciendo cuando tienes la cámara tan cerca de ti, pero fue también complicado participar en las tomas tan largas que se hicieron, de cinco, diez y hasta quince minutos, con una sola cámara y en soporte fílmico [de celuloide].

Cuando esa cámara giraba [hacia ti], sabías que tenías que ofrecer lo mejor que tuvieras, porque todo el mundo dependía de ti; tenías compañeros de reparto poniendo sus corazones y sus almas en sus interpretaciones, y cuando te tocaba, no podías arruinarlo, porque eso hubiera significado desperdiciar sus interpretaciones. Nadie quiere ser el responsable de desperdiciar las interpretaciones de gente talentosa, especialmente cuando están poniendo tanta emoción en ellas.

Tomamos entre todos la responsabilidad de estar preparados, de hacerlo bien y de apoyarnos mutuamente, y tuve la inmensa fortuna de trabajar con este reparto, conformado por actores provenientes del teatro que tenían mucha experiencia con esta clase de diálogos largos, algo que era nuevo para mí. Fue aterrador.

¿Tuviste que leer la novela original? Sé que hay un libro [en el que basó ‘Knock in the Cabin’], aunque la película no sigue exactamente la misma historia.

Lo recibí y le dije a Night que lo iba a leer, porque quería tener más información sobre Leonard, pero él me dijo que no lo hiciera, porque era diferente al guion de la película y no quería que eso quedara marcado en mi cabeza. “Por ahora, lee el guion y enfócate en él”, me dijo. Todavía lo tengo y todavía quiero leerlo. He leído algunas partes, porque quería encontrar las diferencias, especialmente hacia el final de la historia; pero no lo he leído completamente.

La película es también interesante porque trata intencionalmente de hacer que nos sintamos incómodos y hace preguntas complejas interesantes sobre la fe y la religión. Sé que fuiste criado en el catolicismo; ¿cómo te enfrentaste a la presentación de estos temas?

No le he dado muchas vueltas a eso. La religión es un tema muy delicado, por lo que creo que le corresponde al cineasta decir lo que quería presentar, porque cuando presentas interrogantes religiosas de cierto modo, siempre habrá alguien que se molestará. Tienes incluso que encontrar una manera de dar tu mensaje sin excluir a quienes podrían ver la película. Esa fue la manera en que me aproximé al tema.

En este momento de mi vida, considero que soy mucho más una persona espiritual que una religiosa, pero en este caso, me enfoqué en la fe que hay que tener en los seres humanos. ¿Creemos en los demás? ¿Somos esencialmente buenos? ¿Está bien hacer sacrificios para salvar a gente que merece ser salvada? ¿Cómo medimos el amor y cómo debe lucir este? ¿A través de una familia tradicional? ¿Es una familia no tradicional tan valiosa como una tradicional?

Para mí, la respuesta inmediata es que sí, porque no vengo de una familia tradicional; pero creo que hay personas que deben empezar a verlo, porque [en esta película] hay tanto amor en una familia no tradicional que en los estereotipos de familia tradicional que se muestran habitualmente. Son preguntas importantes y son temas importantes, especialmente ahora, cuando vivimos en tiempos tan hostiles, aunque pensábamos que las cosas ya no iban a estar así. Hablar de esto es más relevante que nunca.

En ese sentido, también es importante que la pareja a la que te refieres sea interpretada por actores que son gays en la vida real, algo que no sucede habitualmente en el cine comercial de Hollywood. La película no es por lo tanto solo inclusiva en el modo en que presenta a estos personajes, sino también en la elección de su reparto.

Es muy inclusiva, y fue importante para Night tomarlo en cuenta, porque esto tiene un fuerte mensaje que se relaciona también con la diversidad del reparto, donde todos somos muy distintos en términos de origen, de etnicidad, de tamaño, de forma y de género. Todo eso suma a la conversación y es relevante.

Yo encuentro belleza en películas de esta clase, porque se siente bien hacer algo así y poder no solo hablar de estas cosas, sino también interesarse en ver la película de nuevo y procesarla una vez más. Me gusta concentrarme cuando veo una película por primera vez y que nadie me hable mientras lo hago, pero me encanta cuando esta genera discusiones posteriores y puedo verla de nuevo mientras hablo de ella.

Cuando encuentras películas que te inspiran, esa inspiración se debe a ciertas razones, y las razones se encuentran normalmente relacionadas a algo que está pasando en tu vida o en el mundo. Este es definitivamente uno de esos filmes.

Este artículo fue publicado por primera vez en Los Angeles Times en Español.