Desayunar no te ayuda a perder peso (y saltártelo no te hace engordar)

Forzarnos a tomar algo por la mañana además de no servir para controlar el peso, puede provocar el efecto contrario. ¿Y si el desayuno no es tan importante como creíamos?

Desayunar podría no ser una buena estrategia para perder peso, independientemente del hábito establecido en el desayuno.  (Foto: Getty)

La creencia de que desayunar es bueno para controlar el peso está muy extendida, pero no hay pruebas sólidas de que sea cierto, ni tampoco de que saltarse la ‘comida más importante del día’ conduzca a engordar, según un estudio publicado en la revista British Medical Journal (BMJ).

Este trabajo desmiente la teoría de otras investigaciones que aseguran que un buen desayuno es una forma de prevenir la obesidad ya que acelera el metabolismo y ayuda a las personas a no tener sensación de hambre durante el día, sobre todo las que hacen dieta.

Saltarse el desayuno o la merienda se asocia con un mayor riesgo de obesidad, pero un nuevo estudio desmiente que (Foto: Getty)
Saltarse el desayuno o la merienda se asocia con un mayor riesgo de obesidad, pero un nuevo estudio lo desmiente. (Foto: Getty)

Hasta la fecha tomar un desayuno equilibrado (lácteos, pan, cereales y frutas variadas) se considera como uno de los hábitos saludables que contribuyen a nuestro bienestar en el día a día. De esta manera aportaremos el 30 por ciento de los nutrientes que necesita diariamente nuestro organismo. Al menos eso aseguraban varios estudios: que comer regularmente e incluir el desayuno es la clave de una dieta equilibrada, que es una de las comidas principales y seguramente la que más energía nos da para todo el día.

De hecho, cuando queremos adelgazar lo primero que nos dicen es que está prohibido saltarse el desayuno ya que llegar al mediodía con hambre o en ayunas comeremos con ansiedad y en exceso. Además, se apunta que quienes no desayunan picotean más durante el día y normalmente optan por alimentos poco nutritivos y muy calóricos. Por lo tanto, según este argumento, es mejor comer más veces.

Sin embargo, otras voces aseguran que comer menos y saltarse alguna comida es mucho más saludable, y practican el ayuno intermitente de manera habitual. Uno de los seguidores de esta tendencia es el doctor Luis Vecilla Rivelles, autor de “¡No es hora de comer! ¡Es hora de andar!”, donde cuenta su experiencia realizando un régimen que propone cambiar la hora de la comida por dar un largo paseo. Él mantiene que“no pasa nada por no desayunar” y que el ayuno “es una fuente de salud, no solo para adelgazar de forma rápida y segura, sino también para prevenir y curar las enfermedades asociadas al síndrome metabólico”.

Qué es mejor cuando quieres perder peso: desayunar o no

Para salir de dudas, un equipo de la Universidad de Monash en Melbourne (Australia) analizó el efecto de desayunar regularmente sobre el cambio de peso y la ingesta diaria de energía, basándose en las evidencias de 13 ensayos controlados aleatorios realizados principalmente en EEUU y el Reino Unido durante los últimos 28 años.

Los hallazgos mostraron que la ingesta diaria de calorías fue mayor en las personas que desayunan y que saltarse el desayuno no provoca más apetito al final del día.

Los participantes eran tomadores habituales y no habituales de desayuno, con diferentes pesos, que se controlaron en un rango de entre 24 horas y 16 semanas.

Los investigadores descubrieron que la ingesta diaria total de energía fue mayor en aquellos que tomaron el desayuno que en quienes se lo saltaron, con un promedio de 260 calorías más.

Además, los que optaron por no desayunar eran en promedio casi medio kilo más flacos que los otros.

Por otro lado, el efecto del desayuno no difirió entre las personas con un peso normal y aquellas que tenían sobrepeso.

Este estudio sugiere que aunquedesayunar regularmente tiene otros beneficios importantes (como la mejora de la concentración y los niveles de atención en los niños), se debe tener cuidado al recomendarlo a los adultos como método para adelgazar, ya que puede provocar el efecto contrario, según este estudio. “Este estudio muestra claramente que no es una buena idea”, señala la autora principal, la Dra. Flavia Cicuttini, profesora de epidemiología en Monash.

El mensaje clave es que si a una persona le gusta desayunar está bien. Sin embargo, no hay evidencia de que debamos alentar a las personas a cambiar su patrón de alimentación para incluir el desayuno (si es que no lo toman) con el fin de prevenir el aumento de peso o la obesidad… Hasta donde sabemos, puede hacer lo contrario.

No obstante, los autores dicen que para tener una respuesta definitiva se necesitan ensayos controlados aleatorios adicionales de alta calidad para examinar el papel del desayuno en el control del peso.

¿No sales de casa sin desayunar o eres incapaz de tomar sólidos por la mañana? ¿Crees que el desayuno no es la comida más importante del día?

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