El desgarrador y profético mensaje de Matthew Perry sobre la ketamina: “La probé y pensé: ‘Esto es lo que pasa cuando morís’”
Este viernes, el departamento médico forense del condado de Los Ángeles dio a conocer los resultados del informe de la autopsia de Matthew Perry, que fue encontrado sin vida en su casa el 28 de octubre. La conclusión a las que arribaron los peritos es que el protagonista de Friends murió de forma “accidental” debido a “efectos agudos del conumo de ketamina”, una sustancia a la que el actor le dedicó varios párrafos en su autobiografía Amigos, amantes y la gran cosa terrible: una memoria.
En el libro, que fue editado en 2022, el actor habló sin tapujos sobre su experiencia con aquella droga, que le suministraron en una clínica de rehabilitación suiza a la que acudió en medio de su lucha contra las adicciones en medio de la pandemia . “ La ketamina era una droga callejera muy popular en los años 80. Ahora existe una forma sintética y se usa por dos razones: para aliviar el dolor y ayudar con la depresión”, explicó primero. Y, con ironía, agregó: “Tiene mi nombre escrito por todas partes; bien podrían haberla llamado ‘Matty’”.
Al describir la droga como una “exhalación gigante”, Perry aseguró que recibía ketamina con los ojos vendados y escuchando música. Explicó que se “desasociaba” durante las infusiones y que a menudo sentía como si estaba “muriendo”. “‘Oh’, pensé, ‘Esto es lo que pasa cuando morís’”, reveló.
A pesar de la mala experiencia, el actor reconoció que terminó consumiéndola de manera recurrente. “Sin embargo, me inscribía continuamente en esta m... porque era algo diferente, y cualquier cosa diferente es buena”, indicó. Perry explicó además: “Tomar K es como recibir un golpe en la cabeza con una pala gigante y feliz. Pero la resaca es dura y pesa más que la pala”.
“La ketamina no era para mí”, concluyó. Sin embargo, el informe de toxicología reveló que había estado recibiendo infusiones de ketamina incluso después de su estancia en Suiza, pero que la última ocurrió aproximadamente una semana y media antes de su muerte. El médico forense indicó específicamente que el efecto promedio de la ketamina es de solo tres o cuatro horas, lo que hace imposible que su última transfusión sea un factor en su fallecimiento. Por eso, indica que “es más probable” que la cantidad encontrada en su cuerpo haya sido consumida para uso recreativo.
De acuerdo con la autopsia, por “los altos niveles” de la droga encontrados en su sangre “los principales efectos letales serían sobreestimulación cardiovascular y depresión respiratoria”. El informe toxicológico no reportó rastros de alcohol, metanfetamina, cocaína, heroína, PCP ni fentanilo. “Entre los factores que contribuyeron a la muerte del señor Perry figuran el ahogamiento, la enfermedad arterial coronaria y los efectos de la buprenorfina (utilizada para tratar el trastorno por consumo de opiáceos)”, se agregó en el comunicado.
“El ahogamiento contribuye debido a la probabilidad de inmersión en la piscina, ya que perdió el conocimiento”, agrega el comunicado. El cuerpo sin vida fue encontrado por el asistente del actor, en la piscina de su casa de Pacific Palisades, California, el 28 de octubre pasado.
En 2022, a propósito de la publicación de su libro, Perry confesó en una entrevista que llevaba sobrio un año y medio, toda una hazaña para alguien que había conocido el lado oscuro del consumo de drogas y de alcohol. Allí, también, dio un pantallazo de cómo fueron sus días más difíciles: “Fingía dolores de espalda, migrañas. Tenía ocho doctores que me medicaban al mismo tiempo. Me levantaba y sabía que ese día tenía que arreglármelas para conseguir 55 pastillas. Cuando sos un drogadicto, todo es una cuestión matemática. Sabía que si iba a algún lugar por un rato tenía que tomar tres, si me quedaba más tiempo eran cinco. Era agotador, pero no te queda otra. Se trata de evitar sentirte muy muy mal. No lo hacía para sentirme intoxicado o para alcanzar una sensación de bienestar. No iba a fiestas, lo único que quería era sentarme en mi sillón, tomar cinco pastillas y ver una película. Eso era el cielo para mí. Ya no lo es”.