Se despeja el misterio que rodeaba la detención de Marius Borg Høiby desde el principio
Desde que estalló el "caso Marius' el pasado 4 de agosto, cuando el hijo de la princesa Mette-Marit de Noruega fue detenido y acusado de violencia contra su entonces novia, la prensa noruega sospechaba de un posible trato de favor y durante los últimos tres meses la pregunta sobre cuánto sabía y hasta dónde se había implicado la la mujer del futuro rey, Haakon, y madre de la futura reina, Ingrid, para apoyar a su hijo mayor ha sido constante. Ahora uno de los principales medios del país arroja algo de luz sobre el modo en el que se produjo la detención de Marius Borg Hoiby y Mette-Marit, que se encuentra retirada de la vida pública por motivos de salud, podría verse implicada.
La detención de Marius Borg tuvo algo extraño desde el principio: el lugar en el que fue detenido. No había ninguna explicación para que la policía arrestara a Marius en la escuela Jansløkka, un lugar que no tiene ninguna relación con él, pero que sí esta cerca de la finca real Skaugum, donde tienen la residencia oficial los príncipes Haakon y Mette Marit y en cuyos terrenos cedieron una casa a Marius. Algo que tampoco ha estado exento de polémica, puesto que este tema ha venido a destapar las fiestas con compañías poco recomendables que hacía el hijo de la princesa dentro de una residencia real.
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Ya entonces la conclusión que se podía sacar es que ese lugar, una escuela pública, había sido acordado por ambas partes con el fin de evitar el escándalo y la burocracia que implicaría realizar un arresto dentro de un lugar que pertenece a la jefatura del Estado. Ahora, es el medio VG, el que asegura tener la cronología de cómo se sucedieron los hechos. "Aproximadamente media hora antes del arresto, la policía se pone en contacto con Marius y por teléfono avisan a Høiby de que va a sr arrestado, pero para entonces él ya lo sabía", cuentan fuentes cercanas al caso al medio VG. "La princesa heredera Mette-Marit debió de llamar a Høiby poco antes de su conversación con la policía", cuenta el citado medio.
"Según el registro policial, desde que la policía llamó a Høiby hasta que lo arrestaron en la escuela pasaron 33 minutos. Durante estos 33 minutos, la princesa heredera Mette-Marit, que vive al lado, habría limpiado la casa de la que dispone Høiby. Más tarde, se dice que lo llevó a la escuela de Jansløkka, donde lo esperaba la policía", cuenta el medio VG. Hay que recordar que la policía decidió no registrar la vivienda de Marius al considerar que no guardaba relación con unos hechos que se habían producido, una agresión que él mismo reconoció a través de un comunicado, en casa de la víctima, en Frogner, otro distrito de Oslo. Por otro lado, si los hechos sucedieron como el medio noruego sostiene, esa sería la expliación al hecho de que Marius fuera detenido llevando un movil roto y sin tarjeta SIM, lo que no ha impedido que las otras partes implicadas en este caso facilitaran a la policía las conversaciones y audios en los que supuestamente él les dedicaba insultos y amenazas.
El citado medio asegura que el palacio no ha respondido a sus preguntas sobre quién avisó a la princesa heredera Mette-Marit del inminente arresto y si ella tenía permiso para avisar a su hijo. "Las preguntas sobre los motivos que llevaron a la princesa heredera Mette-Marit a limpiar presuntamente la casa de su hijo antes del arresto tampoco han sido respondidas", añaden. Hay que recordar que la semana pasada la policía recibió la petición de una de las partes de la acusación de que la princesa heredera fuera interrogada en la investigación del caso de violencia contra su hijo, sin embargo, se encuentra de baja por enfermedad. Hay que recordar que la princesa lucha desde el año 2018 contra una variante inusual de fibrosis que le fue detectada en los pulmones y cuyo tratamiento le lleva a retirarse por temporadas de la agenda oficial.
Este caso ha sucedido precisamente en un año en el que el rey Harald había anunciado su decisión de dar un paso atrás y ceder una mayor presencia institucional a la siguiente generación, los príncipes Haakon y Mette-Marit, a raíz de la prolongada baja médica que tuvo a comienzos del 2024 después de la enfermedad que le hizo salir de Malasia, donde estaba en viaje privado con la reina Sonia, en un avión medicalizado a Oslo. Ese episodio despertó mucha preocupación por la salud de un monarca que reinará hasta el final porque en su dinastía la abdicación no es una posibilidad. Sin embargo, ese ansiado descanso se ha complicado a raíz de un escándalo que sí bien no afecta directamente a la Casa Real, puesto que Marius nunca fue un miembro de la institución, sí que ha venido a complicar un escenario que parecía tranquilo y prometía una progresiva incorporación de la princesa Ingrid a la vida oficial. Ahora todo apunta a que hasta que no concluya de forma oficial el caso Marius, la calma no reinará en la realeza noruega.