Dulce y el sentimiento eterno por Gonzalo Vega, el amor de su vida

CIUDAD DE MÉXICO, diciembre 25 (EL UNIVERSAL).- Pese a que su relación no pudo prosperar y cada quien hizo una familia por separado, Dulce siempre recordó con nostalgia el romance que sostuvo con Gonzalo Vega, su primer novio y a quien consideró el amor de su vida.

Fue cuando tenía sólo 17 años cuando Dulce dejó su natal Matamoros, Tamaulipas, para probar suerte como cantante en la capital, por lo que se mudó a Ciudad de México en compañía de su madre, quien apoyó a la joven en sus deseos de darse a conocer en el mundo de la música, a pesar de que todo parecía que les jugaba en contra.

En distintas entrevistas, la intérprete de "Tu muñeca" ha contado que fue al poco tiempo que se mudaron a la Ciudad de México que tuvo su primer encuentro con Gonzalo Vega, aunque este no fue cara a cara.

Dulce rememoraba que fue una tarde, mientras caminaba por las calles de Reforma junto a su mamá, que dieron con el Cine Latino, al que entraron sólo para ver los carteles de las películas que estaban anunciadas, pues no tenían dinero suficiente para pagar los boletos para ver una película.

Fue entonces que uno de los carteles llamó su atención especialmente, se trataba del promocional de "El juicio de Martín Cortés", una película de época protagonizada por Gonzalo Vega.

Al ver la apariencia del actor, Dulce quedó fascinada con su belleza y, por un instinto extrasensorial, tuvo la sensación de que un día se conocería, como le expresó a su mamá, quien se mostró incrédula ante dicha manifestación.

"Cuando vi esa foto me le quedé viendo y me dice mi mamá: ´-¿Qué le estás viendo?´, y le digo: ´-No sé, pero yo voy a conocer a ese hombre, mamá, yo lo voy a conocer´", contó a Yordi Rosado en una entrevista.

Pasó el tiempo y Dulce conoció a José José, que fue quien la apoyó, para que comenzara a cantar en el Holiday Inn.

Un día, la joven se acercó al "Príncipe" para confiarle que cantar tantas horas, como demandaba su trabajo en el hotel, la dejaba afónica, motivo por el que el cantante la envió a ver a su doctor.

Fue así que, mientras esperaba ser atendida en el consultorio, llegó un hombre, de complexión fornida, pero al que no le pudo ver el rostro, porque traía un pasamontaña, que lo ayudaba a proteger su rostro a una cirugía, por sinusitis, que acaban de realizarle.

"Llega un hombre con un cuerpazo, pero con pasamontaña, sólo se veían los ojos, con una voz hermosa, casualmente, el doctor nos citaba el mismo día, a la misma hora y terminábamos sentados uno junto al otro y empezamos a platicar, seguimos viéndonos ahí", contó.

Se trataba de Gonzalo Vega, pero eso no lo supo, hasta luego de que la marcara por teléfono, después de semanas de haberse tratado, sin que supiera cuál era su rostro; ella pensaba que era un hombre que nada tenía que ver con ese actor que había visto en el cartel.

"Recibí una llamada de él, me dice: ´-Hola, soy Gonzalo´, yo ni la cara le conocía, ni sabía que era el actor, le digo: '-No sabía que te llamabas Gonzalo, ¿cómo te apellidas?', me dice: ´-Gonzalo Vega´", respuesta que la dejó atónita, pues creyó que Dios se lo había mandado.

Fue así que Gonzalo la invitó a comer y, como ella aún era menor de edad, la cantante le dijo que tenía que ir a su casa para pedirle a su mamá permiso para que salieran, aunque sólo permitió que la cita durara tres horas.

Fue así que fueron a comer y, más tarde, pasearon por Chapultepec.

"Lo veo por primera vez sin el pasamontaña, estaba más guapo de lo que me imaginaba, yo me deslumbré, era todavía más guapo".

Tras la relación tan apasionada que vivieron, al pasar los años Dulce reconoció que aunque se casó después, el actor fue el gran amor de su vida, sólo que terminó su relación con él porque era la única forma en que su carrera como cantante seguiría prosperando.