Así ha sido el emotivo reencuentro de Alberto de Mónaco con la familia de Grace Kelly en Filadelfia
El último viaje del príncipe Alberto (65) a Estados Unidos ha estado repleto de momentos emotivos. La semana pasada, el soberano monegasco tuvo que presidir en Filadelfia la gala de los premios Fundación Príncipe Alberto, una asociación sin ánimo de lucro creada para la protección y conservación del medio ambiente. La querida y recordada Grace Kelly era natural de la capital de Pensilvania por lo que el hermano de las princesas Carolina y Estefanía aprovechó que estaba allí para organizar un gran encuentro con su familia materna.
La reunión se produjo en la casa familiar situada en el número 3901 de Henry Avenue. Se trata de una espléndida propiedad de seis habitaciones y amplio jardín que fue construida por el abuelo del príncipe Alberto, John B Kelly. En el año 2016, el monarca decidió adquirir la vivienda por unos 755.000 euros y le devolvió todo su esplendor tras someterla a una serie de reformas. En la actualidad, el que fue hogar de la protagonista de La ventana indiscreta alberga la oficina de la delegación estadounidense de la Fundación Príncipe Alberto y es el punto de encuentro para estas quedadas familiares.
Tal y como ha informado el diario Monaco Matin, otro hecho destacable de esta visita es que además de reunirse con sus queridos primos y los hijos de estos, el príncipe Alberto se quedó a dormir en la casa, algo que no hacía desde que era un niño pequeño. Esta no fue la única sorpresa, puesto que, junto a sus primos Suzan y John, el padre de Jacques y Gabriela estuvo en el club de remo Vesper Bota, el lugar donde su abuelo dio sus primeros pasos profesionales. Cabe destacar que John B Kelly fue toda una leyenda de esta disciplina deportiva y se alzó con dos medallas de oro en los Juegos Olímpicos de 1920 y 1924.
Sin duda, todo un auténtico viaje al pasado al que el príncipe Alberto quiso poner el broche de oro recordando sus años de estudiante. Acudió a la quedada con sus compañeros de Tecumseh Youth, un campamento de verano al que el monarca asistió siendo un adolescente y en el que hizo buenos amigos que aún conserva. De la misma manera, se vio con el actual director del Amherst College, la universidad privada en la que el marido de la princesa Charlene cursó sus estudios superiores y se graduó en 1981.
Haz click para ver “Grace de Mónaco, el legado del icono eterno”, un documental donde se esboza un retrato moderno y emocionante, de la princesa de Mónaco, a través de Carolina y Estefanía, del príncipe Alberto, su hijo, de sus nietas Carlota Casiraghi y Pauline Ducruet, y de su sucesora, la princesa Charlene de Mónaco. Repasando imágenes de archivo y entrevistando a expertos descubrimos porque Grace se ha convertido en un icono eterno.