La ex esposa de Silvestre denunció que la hostiga: “Hasta que no me vea en el cajón, no va a…”

Hace unas semanas que Silvestre regresó con fuerza a la palestra pública, tras una reaparición en la pantalla en la que contó que no tenía comunicación con sus hijos, así como insinuó que sus ex esposas le habían robado. En este contexto, Déborah Ramos realizó una fortísima denuncia en su contra al aseverar que la hostiga.

“No es fácil que a los 60 años te dejen sin nada, el trabajo de toda la vida, que de un día para el otro te quedes en la calle. Y que todos sean cómplices”, declaró el cantante en su visita a PH, el ciclo que conduce Andy Kusnetzoff todos los sábados en Telefe.

Desde ese momento se activó una investigación de los comportamientos de Silvestre, sobre todo en el programa A la tarde, de América TV. En ese espacio, realizaron una entrevista con Déborah Ramos, la ex esposa del actor, que contó que sufrió una infidelidad mientras estaba embarazada con el amorío del cantante con Andrea del Boca.

Dentro de una gama enorme de anécdotas, de episodios traumáticos, Déborah lanzó una definición fortísima respecto a su ex esposo: “Ese hombre hasta que no me vea en el cajón no me va a dejar tranquila”. Una frase contundente, que engloba un sinfín de circunstancias.

Karina Mazzocco intervino para tratar de clarificar ese concepto y le preguntó: “Recién dijiste que no va a parar hasta verte en el cajón, ¿a qué te referís?”. De ese modo, Ramos profundizó: “Él dice que yo le arruiné la carrera que él no es más famoso por mi culpa. Ese es su pensamiento”.

Frente al tenor de las palabras de la mujer, Karina redobló: “¿Te amenazó en algún momento’”. Déborah aclaró ese punto y sostuvo: “No, vos fijate que habla de los hijos, de las otras mujeres, de Verónica Vieyra ,pero de mi no habla porque tiene terror. Luis (Ventura) sabe muchos secretos de cosas que ha hecho Silvestre”.

En toda la entrevista, la ex esposa de Silvestre describió que sus hijos la estaban llamando para corte la comunicación, para que no continúe con sus dichos al aire. En cuanto a esa preocupación, Ramos explicó: “Me piden eso porque me hace mal, a mi y a sus hijos. Quieren que corte con esto. Pero, Silvestre no puede llamar a mi hijo después de 10 años para decirlo por qué no lo defendieron, no lo voy a perdonar”.