¿Una estatua para P-22? ¿Una estrella en el Paseo de la Fama? Lluvia de ideas para homenajear al famoso puma

Fue una efusión de dolor digna de cualquier celebridad de Los Ángeles: fotos de glamour en los medios de comunicación de todo el mundo, fans atónitos con su cara en camisetas, velas fuera de sus lugares favoritos.

Ahora, Los Ángeles se plantea cómo recordar a su querido puma P-22.

Desde que el puma fue sacrificado el sábado tras diagnosticársele lesiones importantes y varias enfermedades crónicas, las autoridades locales, los defensores de la fauna salvaje y otras personas cuyas vidas se vieron afectadas por el puma han recibido un aluvión de sugerencias sobre cómo Los Ángeles debería honrar a uno de sus residentes más conocidos.

Ya han aparecido homenajes espontáneos en los lugares donde se sabía que merodeaba P-22. En Los Feliz, una ofrenda en Vermont Avenue incluía velas con la oración de P-22, un retrato del gran felino y -en un guiño a una de sus recientes comidas- dos estatuillas de chihuahua. Un restaurante de Sunset Boulevard cambió su marquesina para que se leyera: "Descansa en Puma, P-22. Love, LA". Y a la entrada de Griffith Park, en Fern Dell Drive, una estatua de bronce de un oso sostenía un ramo de rosas entre sus patas.

"Me encantaría ver recordatorios suyos por toda la ciudad", dijo Beth Pratt, directora ejecutiva regional en California de la National Wildlife Federation, que fue una de las defensoras más conocidas de P-22. "Es un gato con el que la gente entabló relaciones muy significativas y únicas".

Las sugerencias de los aficionados para homenajear a P-22 han ido desde lo pedestre a lo estrambótico: ondear las banderas de la ciudad a media asta, cambiarle el nombre a una calle o exhibir un león de montaña animatrónico comiéndose un koala, una referencia irreverente a una de las comidas más famosas del gran felino.

Pero la idea más popular y probable es una estatua en Griffith Park, el hogar del puma desde hace más de una década.

P-22 sorprendió al mundo cuando llegó a Los Feliz en la primavera de 2012, después de haber recorrido al parecer un peligroso trayecto de 32 kilómetros a través de dos autopistas desde su lugar de nacimiento en las montañas de Santa Mónica. Los científicos habían supuesto que el puma adolescente no permanecería mucho tiempo en Griffith Park, en parte porque su superficie de nueve millas cuadradas es aproximadamente el 6% del tamaño de un área de campeo típica de los grandes felinos de la zona.

Para sorpresa de los angelinos, P-22 permaneció en el corazón de la ciudad durante más de 10 años.

Gerry Hans, presidente de los Amigos del Parque Griffith -que financiaron el estudio que llevó al descubrimiento de P-22 en el parque- se preguntó si un artista escultor podría evocar la fotografía más famosa de P-22. Tomada por el fotógrafo de National Geographic Steve Winter, la imagen muestra al gran felino merodeando por una ladera con el cartel de Hollywood iluminado a sus espaldas.

"Sería estupendo que el artista fuera capaz de mostrar lo majestuoso y apuesto que era", dijo Hans.

La ciudad tendría que encontrar un artista y averiguar cómo pagar la escultura y su mantenimiento, dijeron las autoridades. Pratt dijo que no faltarían donaciones de los amantes de los grandes felinos. Luego está la cuestión de dónde se colocaría la estatua.

"¿La colocamos en uno de los lugares por los que se le conocía y dejamos que la gente la encuentre?", dijo Laura Friedman, miembro de la Asamblea estatal cuyo distrito está justo al norte de Griffith Park. El hecho de que la imagen del gato aparezca ante los excursionistas en un sendero o en la ladera de una colina podría ayudar a evocar la emoción del descubrimiento que inspiró durante su vida, afirmó.

Otros han sugerido el Observatorio Griffith, donde la estatua de P-22 se situaría cerca del busto de otro icono de California, James Dean.

Hans espera que la estatua enseñe a los visitantes de Griffith Park la difícil situación de los animales urbanos separados de sus congéneres por el desarrollo y el rico ecosistema del parque que mantuvo el apetito de un depredador durante una década.

Los Amigos del Parque Griffith también llevan más de un año planificando un mural en el que aparezca P-22, según Hans. La ciudad está estudiando los planes para un mural que pintarían dos artistas locales en tres paredes orientadas al norte del auditorio del Centro de Visitantes de Griffith Park.

"Celebra a P-22, pero también la ecología del parque", dijo Hans. El puma está en el mural, dijo, "pero en cierto modo se mezcla con el entorno y, como dijo el artista, está oculto a plena vista".

Los fans de P-22, entre los que se encuentra Pratt, llevaban mucho tiempo deseando que el gran felino recibiera una estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, tal vez con las huellas de sus patas en el cemento del Teatro Chino TCL. Pensaban que sería un tributo a su condición de gato con poder de estrella y una base de fans célebres.

Pero la Cámara de Comercio de Hollywood, que se encarga de la instalación y el mantenimiento de las estrellas, siempre dijo a los defensores que no. La muerte de P-22 no ha cambiado esa respuesta, dijo la portavoz Ana Martínez.

"Desgraciadamente, no cumple los requisitos", dijo Martínez.

Varios animales tienen estrellas, como Lassie, que fue interpretada por nueve perros en 11 películas y cientos de episodios de televisión. La aparición de P-22 en un documental no basta para calificarlo como miembro activo de la industria, dijo Martínez.

Cualquiera que sea honrado con una estrella en el Paseo de la Fama tiene que haber estado "en el negocio del entretenimiento durante más de cinco años, tiene que ser nominado o recibir premios, y tiene que hacer contribuciones caritativas", dijo Martínez. "Ése es el criterio".

El legado de P-22 también continuará a través de la investigación científica. Durante la mayor parte de su vida, el Servicio de Parques Nacionales de EE. UU. le siguió la pista a través de su collar. Los investigadores llevan estudiando los movimientos de los pumas en las montañas de Santa Mónica desde 2002.

Tras la muerte de P-22 el sábado en San Diego, los investigadores se movilizaron para empezar a recoger muestras genéticas de su cuerpo, que contribuirán a los estudios sobre genética, reproducción y salud entre los pumas del estado, según informó el Departamento de Pesca y Vida Silvestre de California.

Los investigadores no suelen tener acceso inmediato a los leones de montaña que mueren en libertad, por lo que la presencia de P-22 supuso una oportunidad excepcional para obtener muestras genéticas de alta calidad, dijo Seth Riley, jefe de la rama de vida salvaje del Servicio de Parques Nacionales.

"Esta era una oportunidad para que contribuyera a algo que nos va a dar información sobre la especie en todo el estado", dijo Riley.

Uno de los legados más significativos de P-22 ya está en construcción: un puente para la fauna salvaje sobre un tramo de 10 carriles de la autopista 101 a la altura de Liberty Canyon, que los activistas esperan que ayude a evitar el tipo de aislamiento que P-22 llegó a vivir.

El puente no conectará con Griffith Park, pero P-22 fue el rostro de una campaña de recaudación de fondos que atrajo el apoyo de la fundación de Leonardo DiCaprio y de personas de todo el mundo.

"El mejor homenaje a P-22 es llevar adelante su historia", afirma Winter, el fotógrafo. "Le debemos a P-22, y a toda la fauna de California, construir más pasos y conectar más hábitats para ellos".

Los cambios en las calles dentro de Griffith Park también podrían honrar la memoria de P-22, dijo el concejal Nithya Raman.

P-22 fue atropellado por un conductor poco antes de ser capturado este mes por agentes de la fauna salvaje. El gran felino ya se encontraba en mal estado de salud, con insuficiencia renal y una enfermedad cutánea muy contagiosa que estaba erosionando su pelaje. Pero el golpe del vehículo también le causó heridas importantes, incluida una fractura de cráneo.

Tras su muerte, algunos electores pidieron que se redujera o eliminara el tráfico de vehículos en más zonas del parque para proteger a los humanos y a la fauna, dijo Raman.

"No esperaba oír eso tras su muerte", dijo Raman. "Pero es algo que ha surgido, y es algo que me entusiasma".

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Este artículo fue publicado por primera vez en Los Angeles Times en Español.