Estrenos de teatro: Fátima es camaleónica demuestra que Florez es mucho más que una imitadora
Fátima es camaleónica. Idea y dirección general: Norberto Marcos. Libro: Sergio y Norberto Marcos. Elenco: Fátima Florez, Emanuel El Mago, Iván Ramírez. Bailarines: Eugenia Speroni, Ángeles Aleman, Julieta Pérez Cieri, Matías González, Nico Repetto y John Olivera. Músicos: Fernándo Vázquez (director), Ezequiel Giraldez, Francisco Maggio y Guillermo Erede. Coreografías: Paola García y Fátima Florez. Vestuario: Ignacio Horrach. Luces: Diego Alberto. Escenografía: Gustavo Ruiz. Funciones: de martes a domingos, a las 22, en el Teatro Roxy, San Luis 1750, Mar del Plata. Duración: 120 minutos. Nuestra opinión: buena
MAR DEL PLATA.- Año tras año, espectáculo tras espectáculo, Fátima Florez demuestra que es mucho más que una imitadora. Además de bailarina y cantante, hoy se puede decir que es una gran actriz. La rigurosidad en la construcción de cada uno de sus personajes habla de una minuciosidad y de un detallismo únicos, que algunos podrán ningunear pero que la colocan entre los mejores artistas de este país. Tal vez sea hora, entonces, de trascender el formato de show que viene desarrollando desde hace una década (con éxito, por cierto, pero que la limita) e ir por más.
Fátima es camaleónica no es un paso superador en la carrera de la artista, sí un buen show que cumple con la misión del entretener al público. De hecho ni el imitador que en esta oportunidad la acompaña (el debutante Iván Ramirez) ni los trucos del mago Emanuel están a la altura de lo ofrecido en el show anterior (Fátima es mágica). No obstante, hay que reconocer que pese a la pandemia, que restó inversión a las propuestas marplatenses, la producción de este show es bien generosa: incluye cuatro músicos, seis bailarines, diversas pantallas LED y hasta invitados sorpresa en la platea (Patricia Bullrich, por ejemplo) y eso habla a las claras de un respeto por el público.
En cuanto a la labor específica de la humorista, se destacan más sus conocidas imitaciones que las nuevas (la de Cristina Pérez aún reclama atención); entre ellas, las de Susana Giménez, Vicky Xipolitakis, Moria Casán, Charlotte Caniggia, Iliana Calabró, Graciela Alfano, Elisa Carrió, María Eugenia Vidal, a cual más desopilante, y el summum: Cristina Fernández de Kirchner.