Estudio se vende: MGM, en jaque por el coronavirus, busca nuevo dueño

Se busca comprador para uno de los estudios más identificados con la gran historia de Hollywood. Dos bancos de inversión comenzaron a trabajar en la búsqueda de algún interesado en adquirir Metro Goldwyn Mayer (MGM), cuna de los más famosos musicales de la época de oro de Hollywood y símbolo de la grandeza y el poderío de la industria del entretenimiento en esos tiempos. A tal punto de que el fundador del estudio, el legendario Louis B. Mayer, se jactaba siempre de que MGM tenía en su momento de apogeo "más estrellas que en el cielo".

El precio de mercado para quien quiera adquirir MGM está fijado en alrededor de 5500 millones de dólares, según la información de los medios más calificados. Es imposible separar la noticia de esta posible venta de los efectos deletéreos que está provocando el Covid-19 en toda la industria del entretenimiento. El buque insignia actual de MGM es Sin tiempo para morir (No Time To Die), la película número 25 de James Bond, una de las primeras producciones de Hollywood que acusó con fuerza los efectos de la pandemia y debió postergar su estreno (programado originalmente para abril de 2020) casi un año. Hasta ahora, la fecha de lanzamiento de la película está fijada para el 1° de abril de 2021 en la Argentina.

Trailer de Sin tiempo para morir - Fuente: YouTubeTrailer de Sin tiempo para morir - Fuente: YouTube

Todo fue pérdida para MGM a partir de esa situación inesperada e impredecible. Antes del coronavirus, el estudio esperaba obtener ingresos cercanos a los 1000 millones de dólares por un estreno global que todos ciertamente esperaban. El regreso de 007 tenía un número redondo digno de una celebración (la película de las bodas de plata) y contaba como atracción complementaria con la despedida del papel de Daniel Craig, luego de cinco aventuras vistiendo el traje del agente secreto más famoso del mundo.

Pero llegó la pandemia, todos los planes del estudio se hicieron añicos y las expectativas de éxito cambiaron rotundamente y pasaron a ser recuento de daños, algo que difícilmente podrá remontarse por más que se produzca en abril el esperado (y demorado) estreno en los cines. Hasta se llegó a conjeturar, anticipándose a toda esta situación, que Sin tiempo para morir podría pasar de la pantalla grande al streaming. Los dueños de la marca Bond, ciertamente muy conservadores, prefieren por ahora no agitar las olas ni exponerse al riesgo de desvalorizar por completo el futuro de 007 en el cine por una decisión precipitada.

Quienes confían en el poder actual (no solo pasado) de MGM afirman que el estudio tiene cartas en la manga para sostenerse y de paso interesar a potenciales inversores. Además de ser los propietarios de 007 para su llegada a los cines, el histórico estudio se aseguró los derechos de Gucci, la película que prepara Ridley Scott sobre el asesinato del heredero de la famosa marca de moda, protagonizada por Lady Gaga y con estreno previsto para el año que viene. También posee en su catálogo la próxima obra de Paul Thomas Anderson y prepara el regreso (una vez más) de La Pantera Rosa.