Eugenia Martínez de Irujo celebra su cumple en casa de Mariola Orellana rodeada de amigos
Eugenia Martínez de Irujo celebra una nueva vuelta al sol. La duquesa de Montoro ha cumplido 56 años y ha soplado las velas de su tarta rodeada de sus seres queridos. La hija de la duquesa de Alba llegaba a casa de su amiga Mariola Orellana en compañía de su marido, Narcís Rebollo, para disfrutar de una noche entre amigos en un momento excepcional de su vida. Poco antes de que apareciera la homenajeada, llegaba una tarta al domicilio de la esposa de Antonio Carmona para la celebración.
A la fiesta acudieron Carles Sans, uno de los miembros de Tricicle, junto a su mujer, María Antonia Rodríguez, así como los anfitriones del evento y una de sus hijas, Marina Carmona, que se despedía de Eugenia muy cariñosa tras la celebración. Una de las primeras en acordarse del cumple de Eugenia ha sido sin duda Cayetana Rivera. "Fue la primera ayer a las 12 en punto, me ha puesto un mensaje superbonito", reveló sobre su hija, nacida de su relación con Francisco Rivera y a la que está muy unida. "Estoy muy contenta, me acaban de hacer el primer regalinchi", contaba por la mañana muy ilusionada después de que la felicitara "muchísima gente" y le enviaran numerosos ramos de flores, así como un colgante de Tous con la letra E, inicial de su nombre.
Eugenia cumple años seis días después de una fecha clave para su familia, el pasado 20 de noviembre se cumplió el décimo aniversario de la muerte de la duquesa de Alba. La esposa de Narcís Rebollo no acudió a la misa en honor a su madre organizada por su hermano Cayetano, con el que mantiene desde hace meses un claro distanciamiento, y ante la pregunta de si había sido felicitada por el duque de Arjona, contestó que su pareja, Bárbara Mirjan, sí lo había hecho. "Bueno... Me ha felicitado Bárbara justo hace 10 minutos" contestó Eugenia a las cámaras de Europa Press, pidiendo que no le hagan más preguntas sobre el asunto en el día de su cumpleaños porque "es un día muy bonito".
Después de que su hermano le reprochara su ausencia en la misa, la duquesa de Montoro se sinceró sobre la actual relación que mantiene con sus hermanos, incluido Cayetano, dejando la puerta entreabierta a un posible acercamiento. "De todos mis hermanos, que los adoro a todos, es con el único que tengo un poco de distancia, pero bueno, más pronto que tarde se va a arreglar", declaró tratando de quitar hierro al asunto. A doña Cayetana le dedicó este emotivo mensaje con una preciosa foto de madre e hija. "Siempre conmigo, mamá… Siempre juntas… Siempre en mi corazón", y lo acompañó del hashtag "no me hace falta misa para recordarte". Años anteriores ya había manifestado porque había dejado de asistir a estas celebraciones en su memoria. "Yo creo que el primer año y el segundo de misa, fenomenal, pero todos los años... Yo siempre digo que para recordar a mi madre no me hacen falta misas, yo la llevo aquí (señalando el corazón) con lo cual quien quiera ir, perfecto, pero quien no, no pasa nada", destacó.