Evelyn Lapuente, la mexicana que se adelantó a Jane Fonda y sus aeróbicos en la TV

Evelyn Lapuente en la presentación del programa 'Gimnasia en su hogar'. (Captura de YouTube)
Evelyn Lapuente en la presentación del programa 'Gimnasia en su hogar'. (Captura de YouTube)

Muchos recordaremos que en la década de 1980 casi nadie escapó a los leotardos, calentadores y bandas en la cabeza para hacer aeróbics. Jane Fonda con sus rutinas en videos y Olivia Newton John con su 'Physical' nos obligaron a ejercitarnos. Pero al menos 20 años antes, una mexicana les llevaba ventaja, fue pionera en promover el acondicionamiento físico en casa a través de la televisión. Ella fue Evelyn Lapuente.

Era inicios de los años 1960, la televisión a color estaba a muy poco de hacerse realidad, pero para entonces el televisor se había convertido en un esencial con un lugar específico en la sala que obligaba a ser un punto de reunión familiar. Con varios programas en vivo en horarios específicos y para determinadas audiencias, Evelyn Lapuente logró con Gimnasia en su hogar (1962-1972) ser precursora de los ya conocidos aeróbicos y del ejercicio físico para promover una vida sana y balanceada.

"¿Sabes cuánta gente me vio?, no porque yo fuera muy chicha muy bonita muy... ¡no!, me veían porque era el Canal 2, el Canal 4, las caricaturas y el Once que era una mancha. ¿Entonces qué va a pasar? Pues prendías el aparato y veías la gimnasia. (...) Me veían no porque muy muy, sino porque no había otra cosa", recuerda Lapuente sobre las pocas alternativas televisivas con las que crecieron nuestros padres y abuelos hace poco más de 40 años.

La presentadora no estaba sola, también destacó el profesor Vellanoweth (si ustedes reproducen 'Ejercicio 16' de la banda regiomontana Kinky o 'ejercicios abdominales' en TikTok podrán escuchar su voz) y sacaron una serie de álbumes con sus rutinas musicalizadas: de relajación, respiratorios, de equilibrio, para las piernas, para la cadera, etcétera.

"Cuando una vez me lastimé, voy a la cabina a atender teléfonos, entonces 'sí, por favor, Evelyn, que hagan ejercicio para los glúteos caídos, que se caen', yo decía '¡¿cómo glúteos caídos, cómo se van a caer los glúteos?!', ¿y qué creen?, ¡sí se caen, y no nada más los glúteos, todo se cae!", dijo la exacondicionara física en una reciente entrevista.

Pero algo que siempre ha distinguido a Evelyn es su peinado, específicamente el fleco que oculta sus ojos y su cabellera blanca. "Yo me peinaba de diferentes maneras, casi siempre (con el cabello) recogido, porque si estás haciendo ejercicio, ni modo que el pelo todo suelto se te caiga así. Y de chica me hice el fleco y dije 'ay, se ve bonito así' (...) y el cabello pintado (de blanco), dije 'de aquí soy'".

Mario de la Piedra, productor y pionero de la televisión mexicana, no pensaba igual y le exigió cambiar su look. Su esposo, el director Domingo Garza (De mujer a mujer, Momentos para no olvidar: 55 años de la TV en México), le prometió que lo haría de poco en poco. "¿Pregúnteme cuándo me lo quité?, ¡nunca!".

Una mujer para las mexicanas

Pero además de Gimnasia... Evelyn siguió vigente en televisión en los novedosos programas matutinos y de revista: El doctor de sus hijos, Hoy mismo, Chepina y su menú Pando, Moda y belleza, Sexto sentido, Operación Convivencia con Paco Malgesto, De mujer a mujer, en los que modelaba y y conducía, y así se ganó un lugar en el corazón del público mexicano.

Y de figuras que posteriormente se han convertido en estrellas internacionales, como lo relató Thalía en su biografía Growing Stronger.

"Cuando tenía unos siete años, me uní al elenco de un programa matutino de variedades llamado La mujer ahora (Janet Arceo, Paco Stanley) en Televisa, una de las cadenas mexicanas más grandes, donde los niños tenían un papel importante. La presentadora, Evelyn Lapuente, era una rubia joven, jovial y con un flequillo fantástico, era la mexicana Jane Fonda y si mal no recuerdo el director de la programación infantil era Sergio Andrade, quien años después fue vinculado a uno de los mayores escándalos de la industria del entretenimiento mexicana".

Pero el éxito de Evelyn como conductora se debía a su don de gente, conectar especialmente con las mujeres, las amas de casa que la veían por televisión, para impulsarlas a practicar un oficio, enseñarles a explotar su creatividad en manualidades y artesanías para el autoempleo.

Esto lo logró con Actívate con las Evelyns, una revista televisiva al lado de su hija Evelyn, Cable Club y Manos a la obra, pero lejos de Televisa.

Y es que a pesar de participar en casi todas las barras de la empresa, Evelyn tardó años para lograr una plaza hasta que se aventuró a pedírsela al temible Emilio Azcárraga Milmo, el Tigre, luego de sentir que su trabajo peligraba por algunas envidias dentro de los equipos en los que colaboraba. "Traía yo un cuello de tortuga negro, transpiraba, transpiraba, lo esperé como dos horas (...), yo decía '¿qué le voy a decir?'. Tú no puedes llegar con un señor a decirle 'ay, es que me están haciendo...', no puedes llegar así pero no sabía lo que le iba a decir".

Una vez dentro de la oficina le soltó la pregunta de si pertenecía a Televisa, pues después de 20 años de trabajo no tenía la famosa exclusividad de la que todos alguna vez gozaron. "Me dijo '¿te acuerdas cuándo empezaste?', 'no', 'sí, sí, sí, 20 de agosto de 1962, a ver Aurelio Pérez (productor y gerente del Canal 4 de televisión), que le den una plaza pero que le respaten su antigüedad'. En menos de cinco minutos ya me había dado una planta en 1982".

Desde hace un par de años, Evelyn se dedica a su programa Manos a la obra para seguir impulsado a mujeres emprendedoras, recorre convenciones y talleres de manualidades para promoverlos.

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